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Prevención de los defectos del tubo neural
Los programas de prevención son extremadamente importantes en estas patologías, y han sido difundidos por diferentes autores. Estos se justifican en virtud de la tasa elevada de casos que existe en el País así como por las consecuencias que sufren los niños y los problemas familiares condicionados por los cuidados y el costo del tratamiento de los mismos.
La mayor tasa mundial de Espina Bífida y Anencefalia la presenta China, con 50 casos por 10,000 nacimientos, seguida por México con más de 30 por 10,000 según el estudio realizado por Botto y cols. en 1999. (3)
El costo de la atención médica y servicios de educación y costos indirectos totales de acuerdo a Botto fue de 500 millones de dolares ( calculados para 1992 ). El costo por paciente fue de 294,000 dólares.
El ácido fólico es una vitamina B que
puede ayudar a prevenir defectos de nacimiento en el cerebro y la médula espinal
cuando se ingiere antes del embarazo y durante las primeras semanas del mismo.
Las mujeres que están en edad de concebir deben tomar 400 microgramos (mcg) de ácido fólico todos los días porque una gran cantidad de embarazos no son planeados y porque estos defectos congénitos de la espina dorsal y el cerebro comienzan antes de que las mujeres sepan que están embarazadas(4).
Durante las primeras 4 semanas de embarazo,
se desarrolla el tubo neural, estructura que dará origen a la médula espinal
y el cerebro del feto
Los estudios demuestran que las mujeres que consumen la cantidad recomendada de esta vitamina desde antes de la concepción y durante el primer mes de embarazo reducen el riesgo de tener un bebé con ciertos defectos de nacimiento en el cerebro y la médula llamados defectos del tubo neural (NTD).
Los estudios también sugieren que el ácido fólico puede ayudar a prevenir algunos otros defectos de nacimiento, como el labio leporino y la fisura palatina.
En mujeres sin factores de riesgo y ausencia de antecedente de embarazo con defecto del tubo neural, se recomienda el consumo diario de un suplemento multivitamínico, alimentos fortificados o una combinación de ambos que contenga 400 mcg(0,4 mg) de ácido fólico, antes de la concepción y durante el primer trimestre del embarazo. (5) (6 )
En las mujeres con antecedente de embarazo con defecto del tubo neural, en quienes el riesgo de un nuevo embarazo con tales defectos es de 2% a 3%, se recomienda consumir 4000 mcg (4 mg) diarios de ácido fólico, además del que se encuentra en la dieta, un mes antes y durante las primeras doce semanas del embarazo, medida que disminuye hasta un 70% el riesgo. Por el riesgo de un consumo elevado de otras vitaminas, la dosis debe alcanzarse con a ingestión de tabletas de ácido fólico, cada una de las cuales contiene 1000 mg de la vitamina, y no mediante suplementos multivitamínicos.
Entre el 50 y el 75 por ciento de estos casos se podrían evitar siguiendo las medidas anteriores. Los casos que se presentan a pesar de ellas pueden ser consecuencia de la ingestión de antagonistas del ácido fólico durante el embarazo como el trimetoprim o la carbamazepina (7)
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