[Contenido]|[Anterior]| [Siguiente]


Presentación del libro
El Real Protomedicato. La reglamentación de la profesión médica en el Imperio español

Las funciones del Real Protomedicato durante el siglo XVI se relacionan con las tareas actuales del Consejo de Salubridad General, la Secretaría de Salud, la Facultad de Medicina y la Comisión Nacional de Arbitraje Médico, señaló el doctor Alejandro Cravioto, director de la FM durante la presentación de la traducción en español del libro El Real Protomedicato. La reglamentación de la profesión médica en el Imperio español, escrito por John Tate Lanning.

"Este organismo, dijo, evidentemente requería desde el principio, un grupo y un individuo que dirigiera, vigilara y reglamentara lo relacionado con la medicina, con la salud pública y con los sujetos que la practicaban. Esto lleva a pensar que la salud ha sido una parte de vigilancia fundamental del Estado, tanto desde la Colonia como en la actualidad, y dentro de esa estructura de vigilancia, cuidado y control de la salud, la Facultad de Medicina formaba una parte fundamental en el proceso de formación de los médicos con la práctica de esa medicina y creemos que en la actualidad hemos logrado conjuntar nuevamente todos esos intereses.

Por lo que se refiere estrictamente a la obra de John Tate Lanning, traducida por la licenciada Miriam de los Angeles Díaz Córdova y el doctor José Luis Soberanes, el doctor Alejandro Cravioto dijo que es la primera edición que se realiza en colaboración con un instituto ajeno de su área. "Esperamos que se repita con otros institutos y facultades del área de humanidades, pues creemos que en conjunto podemos seguir produciendo cosas útiles para el engrandecimiento de la Universidad, para la adquisición de conocimientos y sobre todo para mejorar la salud de la población de este país", concluyó.

Por su parte, el doctor Héctor Fernández Varela, comisionado Nacional de Arbitraje Médico, expresó que el Protomedicato, en alguna forma, es el antecedente de varias instituciones modernas como el Consejo de Salubridad General y la Secretaría de Salud que, en su carácter de autoridades sanitarias nacionales, regulan el funcionamiento de establecimientos y prestadores de servicios de salud de acuerdo a la legislación vigente, además de efectuar la vigilancia epidemiológica, entre otras múltiples funciones. "También sería el antecesor de las áreas de evaluación de nuestras universidades, de la Dirección General de Profesiones en su calidad de sancionador de los títulos médicos y de los consejos de especialidad que hoy en día examinan a los médicos que culminan sus estudios, verificando que estén calificados para otorgar una adecuada atención médica general o especializada, y agregó: el libro El Real Protomedicato describe la formación, estructura y funciones que el autor reseña a través de la recopilación y análisis cuidadoso de los testimonios que localizó en archivos de ocho países, siendo México donde encontró mayor información documental, aunque dispersa en distintos archivos, como el de la Facultad de Medicina de la UNAM, compuesto por 17 volúmenes que fueron reunidos y preservados por el doctor Francisco Fernández del Castillo.

"A pesar de ello, continuó, son evidentes las lagunas de información en los casos de Perú y Venezuela, donde sólo existen escasos vestigios testimoniales de esta secular institución. El autor John T. Lanning, indicó, relata casos concretos que reflejan la historia sociocultural de los prestadores de servicio de atención médica, sus deberes y su papel en la sociedad colonial.

"Es así, que la organización de los temas permite tener una visión general del Real Protomedicato, tanto en España como en sus colonias, sin perder de vista lo ocurrido en los territorios conquistados en el Cono Sur y en el Caribe, donde también se instaló el Protomedicato que, en todos los casos, nació bajo reglas legales y administrativas complejas, ya que su instalación estaba regida por preceptos que en ocasiones emanaban de la corte de España, pero en otras de la voluntad del virrey y también de los cabildos locales, lo que confundía y entorpecía su jurisdicción y funcionamiento.

"Los documentos analizados en el texto ponen de manifiesto y corroboran la impresión de que, desde los tiempos de la Roma Antigua, donde se designaron 16 archiaters (médicos de cabecera de los reyes), y después en la España Medieval, se advertía la necesidad de la reglamentación de la práctica médica, para contender con el problema creado por los charlatanes y oportunistas que ejercían la medicina sin ser médicos autorizados, asunto que llevó en España a la creación del Protomedicato, después retomado por los reyes católicos Fernando e Isabel, al observar ellos también que el arte de curar había caído en un lamentable estado. Estos soberanos buscaron corregir la situación a través de los protomédicos confiriéndoles la tarea de examinar aquellos que desearan ejercer la medicina y les otorgaron también jurisdicción para aplicar sanciones por los delitos, excesos y negligencias de médicos cirujanos, ensalmadores y boticarios, expresando así su real voluntad de contribuir a mejorar la calidad de la atención médica que se ofrecía a sus súbditos".

Para concluir su intervención, el titular de la CONAMED, afirmó que El Real Protomedicato remonta a los lectores a momentos importantes en el desarrollo y regulación de la medicina en nuestro país, así como al principio y control de especialidades como la cirugía, la estructuración de la educación médica y la investigación; además de aspectos relevantes como las políticas de gobierno respecto a la salud pública en esa dilatada etapa histórica de nuestra nación. En cuanto a la relación que pudiera haber entre el Protomedicato y la Comisión que encabeza el doctor Héctor Fernández, dijo que ambas instituciones se asemejan en la medida que son instancias receptoras de quejas, con capacidad para analizar y elaborar dictámenes que pongan fin a las controversias, dando la razón a quien en justicia la tenga; también tiene similitud en su objetivo final, que es contribuir a mejorar la calidad en la atención que se otorga a los usuarios de los servicios médicos.

A su vez, el doctor José Luis Soberanes, director del Instituto de Investigaciones Jurídicas, apuntó que El Real Protomedicato es la historia del ejercicio de la profesión de la salud al referirse a otras formas de ejercicio profesional que se relacionan con la salud de los individuos. "El contenido viene a cumplir un servicio para conocer nuestra historia, la historia de México, de la medicina, del derecho y de nuestra administración de justicia, porque el Protomedicato era un tribunal donde se administraba justicia, aunque también era un órgano de la administración pública para regular y reglamentar el ejercicio de las profesiones médicas".

Más adelante, la maestra Xóchitl Martínez Barbosa, secretaria general de la Sociedad Mexicana de Historia y Filosofía de la Medicina, señaló que el mismo John T. Lanning advierte que su interés estuvo centrado en investigar la regulación de la profesión médica en los territorios españoles de Indias, así que su metodología de investigación se centró desde el aparato burocrático de la Colonia y de la normatividad que se genera a partir del Real Protomedicato.

"La fundación inicial de este organismo surgió como respuesta al nuevo interés en las plantas medicinales del nuevo mundo, interés difundido en toda España a mediados del siglo XVI y así, la corona tomó provisiones tanto para la investigación botánica como para que un protomédico general regulase las profesiones médicas". Con esta afirmación, dijo, el autor abre una línea de análisis diferente a lo que se refiere al establecimiento del Protomedicato en la Nueva España, quizá como el punto de partida de la instalación de la ciencia colonial, de la ciencia dependiente en los nuevos territorios que estará basada fundamentalmente en las instituciones españolas. "Este modelo se sustenta en la existencia de un sector de lo real que era nuevo e inédito ante la ciencia europea, que en este caso es la herbolaria medicinal o terapéutica indígena cuya asimilación se convirtió en una de las grandes aportaciones de la conquista y el descubrimiento de América a la medicina occidental, al mismo tiempo que funcionó como elemento de fusión entre las medicinas dominante y la dominada".

Por último, señaló a los asistentes a la Casa Universitaria del Libro, que esta obra, El Real Protomedicato, posibilita o facilita los caminos hacia nuevas temáticas quizá poco exploradas en el ámbito de la historia y filosofía de la medicina; por ejemplo, el estudio de las ideologías y de las mentalidades, los prejuicios sociales y de raza que norman la conducta del Protomedicato y que constituyen el trasfondo de la organización social y política de la Colonia.

[Contenido]|[Anterior]| [Siguiente]