La UNAM hacia el nuevo milenio
Con el antecedente de haber dado a conocer en noviembre de 1997 el Plan de Desarrollo 1997-2000 y habiendo solicitado a la comunidad universitaria sus consideraciones al respecto, el pasado mes de mayo, el doctor Francisco Barnés, rector de la UNAM, presentó su versión definitiva sobre dicho plan, después de haber tomado en cuenta la opinión de los universitarios. Así, expuso que el Plan de Desarrollo es un instrumento eficaz, para que de manera plural, la comunidad universitaria avance en la construcción de lo que considera debe ser la universidad del nuevo milenio. A juicio del rector, la esencia del Plan de Desarrollo radica en los propios principios que conforman a la UNAM: sustentarla como la máxima institución educativa del país con renovado carácter nacional, reafirmar su condición de entidad pública, afianzar su autonomía y redoblar su compromiso con la sociedad mexicana, lo que dará forma y prevalencia a los programas, proyectos y acciones requeridos para la construcción de la universidad del año 2000. Al exponer su plan, el rector manifestó que la UNAM, por sus condiciones y la conformación de la comunidad que trabaja y estudia dentro de ella, la hacen ser una institución excepcional. La diversidad de profesores y alumnos, así como de investigadores, permiten que la Universidad sea un factor de movilidad social por demás trascendente para el país, pues además cuenta con un sistema de estudios de posgrado que sin duda es el más relevante de México. Nuestra institución, consideró el rector, sigue siendo modelo en estudios de nivel superior y ha sido precursora en el nivel de estudios de nivel bachillerato. En su trascendencia hacia la vida nacional, la UNAM representa más del 50% de investigación que se realiza en el país y su infraestructura es única en América Latina; aunado a la excepcional manera con que cumple su tarea de difundir la cultura está su riqueza arquitectónica y cuenta con diferentes campus universitarios que abarcan el área metropolitana y algunos puntos cercanos a la capital. Por las razones anteriores y porque éstas no pudieron haberse logrado sin el amplio apoyo de nuestra sociedad, el rector considera que la UNAM debe ser generosa en su actuar y efectiva en sus contribuciones para con el sistema de educación superior y especialmente con las instituciones públicas, por lo que la institución debe seguir trabajando para seguir siendo la mejor casa educativa a nivel superior y para beneficio de todos los mexicanos. Para ello, dijo el rector, la UNAM establece condiciones para que se traduzca su condición privilegiada de universitarios en una actitud comprometida con los menos favorecidos, por lo que la Universidad debe preservar el criterio académico como única vía de acceso, permanencia y egreso, donde exista la certeza de que ningún alumno con capacidad y compromiso académico abandone sus estudios por razones económicas. Por otra parte y en forma simultánea, el doctor Francisco Barnés expuso el programa de trabajo para 1998 al que contribuyeron todas las dependencias y entidades académicas, en él exhorta a la comunidad universitaria a desplegar toda su potencialidad y creatividad para que los universitarios puedan cumplir con la sociedad y con su alma mater. El programa de trabajo contempla la posibilidad de que el personal académico se incremente a partir de la conversión gradual del banco de horas de asignatura; la contratación de profesores de carrera sólo a partir de la categoría de asociado "C" y para bachillerato y escuelas nacionales de Enfermería, Trabajo Social, Artes Plásticas y Música, el nivel mínimo a contratar será el de asociado "B"; asimismo, la figura de ayudante de profesor se reservará para alumnos de alto desempeño académico de posgrado y del último año de la licenciatura. Por lo que se refiere a los alumnos, tanto de licenciatura como de bachillerato, el rector se comprometió a buscar la duplicación del número de becas de Fundación UNAM para los primeros, y para los segundos preservar la matrícula de primer ingreso en el nivel actual, tratando de mantener la eficiencia terminal con alumnos que terminen este periodo en un plazo máximo de cuatro años y con un promedio superior al que tenían cuando ingresaron a este ciclo. Además, el programa presentado por el rector señala la renovación de planes y programas de estudios que espera ver transformados en un 50% al término de su gestión; aumentar la tasa de egreso en un 10% y 25% en la de titulación; mantener la matrícula actual de primer ingreso a licenciatura; consolidar la aplicación del Examen Diagnóstico para todos los alumnos de primer ingreso y apoyar la producción de materiales docentes. En cuanto al posgrado, la meta del Programa para 1998 es incrementar al 50% de la matrícula en maestrías y doctorados, por lo que habrá de culminarse la adecuación al nuevo reglamento de posgrado de todos los planes y programas de este nivel y asegurarse que cumplirán los requisitos para obtener el reconocimiento del Padrón de Excelencia del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología, además de contribuir al Programa de Mejoramiento de Profesorado de la SEP. Respecto al Sistema de Universidad Abierta, el propósito es duplicar la matrícula de primer ingreso e incrementar 50% la tasa de titulación, y en educación continua, multiplicar los mecanismos y cursos de esta modalidad, de forma tal que su matrícula crezca al menos en 10% anual. Con relación al sistema de investigación, se plantea desarrollar y consolidar la investigación, particularmente en las unidades multidisciplinarias y foráneas, por lo que deberán alcanzarse las metas siguientes: Para el año 2000, el 90% de los investigadores de los institutos y centros de investigación, el 35% del profesorado de carrera de las facultades y el 20% del profesorado de carrera de las unidades multidisciplinarias deberán cumplir los requisitos para formar parte del Sistema Nacional de Investigadores. En las unidades multidisciplinarias, el número de profesores de carrera deberá crecer a un ritmo promedio de 10% anual. A partir de 1999, el personal académico de carrera se incrementará en 50 plazas por año, fundamentalmente para apoyar la investigación en las unidades multidisciplinarias y foráneas. Se constituirán tres laboratorios con equipo e instrumental de vanguardia, alcance y participación nacional abiertos a los requerimientos y demandas de todo el país en Ciudad Universitaria, Cuernavaca y Juriquilla. Asimismo, se deberán concluir la integración de la Red Bibliotecaria de los subsistemas de investigación de la UNAM. En cuanto a la vinculación con la sociedad, se plantea incrementar la participación de la Universidad en la solución de problemas nacionales mediante el aumento en el número de convenios de colaboración. Asimismo, se deberá establecer los vínculos y obtener los recursos para desarrollar, al menos, 10 programas de investigación con enfoques multidisciplinarios en temas de prioridad nacional. Con relación a la cooperación académica, se plantea duplicar el número de alumnos de primer ingreso en el posgrado de la UNAM provenientes de otros países, y triplicar el de alumnos nacionales. Además, en 1998, se deberá establecer la normatividad para ofrecer doctorados compartidos con otras instituciones de educación superior mexicanas y del extranjero. De forma complementaria, las funciones de las escuelas de la UNAM fuera del país serán ampliadas con el fin de que tengan un beneficio directo para las entidades y dependencias de la Universidad. Por lo que hace a los sistemas de apoyo académico, se plantean las siguientes metas: Dotar con un laboratorio para la enseñanza de idiomas a cada facultad, escuela y plantel del bachillerato. En cómputo y telecomunicaciones, se deberán mejorar todas las dependencias universitarias, de tal forma que se incremente en un 30% anual la consulta en línea y el número de usuarios de los bancos de información de la Universidad. Asimismo, deberá contarse con programas de licenciatura "en línea" a cargo del Sistema de Universidad Abierta, como resultado de la aplicación de la tecnología de telecomunicaciones. En lo que se refiere a la administración universitaria, la meta es reducir al menos en 50% el tiempo promedio de los trámites de mayor frecuencia. Como se puede observar, todos estos aspectos que el rector visualiza deben ir acompañados de una planeación y evaluación institucionales, por lo que para 1999 deberá establecerse un sistema de planeación, evaluación y presupuestación, que permita una más adecuada designación del presupuesto universitario y su más eficiente uso, donde la diversificación de las fuentes de financiamiento de la Universidad habrán de crecer como mecanismo para allegarse recursos complementarios al subsidio federal, por lo que se propone: incrementar en 10% anual, en términos reales, los recursos que reciben las entidades académicas y dependencias administrativas de la Universidad por los servicios, productos y resultados de su trabajo. Finalmente, el doctor Francisco Barnés expresó: "la Universidad Nacional asume hoy plenamente las responsabilidades que le corresponden en la nueva época que vive México. Este es el propósito último del Plan de desarrollo, de los programas estratégicos y de las metas señaladas. "Convoco a todos a trabajar solidariamente para que nuestra Universidad mantenga su liderazgo, derivado de la responsabilidad con que cumple su misión, de su compromiso y solidaridad con la sociedad mexicana. "Convoco a los universitarios a consolidar el carácter público de nuestra Institución. El recibir del Estado la mayor parte de sus recursos económicos obliga a cada uno de los universitarios: a los alumnos, a prepararse de la mejor manera posible; a los académicos, a esforzarse cotidianamente en la docencia, en la investigación y en la difusión de sus resultados; a los trabajadores y directivos los compromete a apoyar efectivamente las tareas fundamentales de la Institución. Asimismo, la Universidad acogerá siempre a los que vengan en busca del saber y den muestras de su preparación y compromiso con la vida académica. Nunca el dinero será la llave que abra o cierre las puertas de acceso a esta Universidad. "Convoco a los universitarios a preservar nuestra autonomía que es libertad fundada en el respeto y cumplimiento de responsabilidades y deberes; autonomía que nos obliga y obliga a los demás a respetar nuestras leyes y formas de gobierno". |