Aula A-403, remodelada con apoyo
Adopta un Aula, programa que convocó la presente administración de la Facultad de Medicina ante sociedades y agrupaciones médicas, para renovar y modernizar sus aulas y ofrecer a sus alumnos y profesores un entorno sano, digno y adecuado, ha rendido frutos, pues se han remozado varias gracias al apoyo del gremio médico. El pasado 30 de agosto, autoridades de la Facultad, encabezadas por el director, José Narro Robles, recibieron a los directivos del Hospital Santa Fe para dar testimonio del aprovechamiento de los recursos donados en meses anteriores por ese nosocomio, invertidos en la remodelación y el equipamiento del aula A-403, acto en el que se develó una placa que deja testimonio de su generosidad. En esta ocasión, el doctor Jorge Solórzano, director del Hospital, ante estudiantes, autoridades de ambas dependencias, amigos y familiares, a nombre de su padre, doctor José Alberto Solórzano Gutiérrez, fundador del nosocomio, enfatizó que ésta es una manera de dejar plasmada la colaboración del Hospital Santa Fe, pero también de retribuirle un poco a la Universidad Nacional lo mucho que recibieron de ella. Por su parte, el doctor Narro Robles agregó que la presente administración, así como sus profesores y alumnos, están comprometidos a mejorar cada día, y lo que la Dirección puede hacer por impulsar ese sentido de superación consiste en mejorar las condiciones en las que se desarrolla el proceso educativo y la investigación; para realizarlo en las mejores condiciones, se cuenta con la simpatía y colaboración de distintas estructuras del gremio: sociedades científicas y hospitales como Santa Fe, que generosamente han contribuido con la FM para avanzar en el proceso de remodelación de sus espacios. El beneficio de las condiciones del aula que se reinaugura se refleja en la mejoría en la que los profesores y alumnos pueden desarrollar su programa de trabajo, lo cual sirve, al mismo tiempo, para reafirmar ese compromiso de ser mejores y cumplir cada quien sus propósitos, con la meta final de servirle de una mejor manera a la sociedad mexicana. Asimismo, el doctor Narro Robles expresó que ésta es la mejor Facultad de Medicina de México, misma que se caracteriza por ser capaz de trasmitir conocimiento a los jóvenes estudiantes, pero también se empeña en generarlo, en desarrollar nuevo conocimiento mediante la investigación, y promoverlo para actualizar los planes y contenidos para adiestrar así a sus alumnos con los mejores niveles científicos y técnicos, todo ello con un profundo contenido social. Esta Facultad, explicó, está comprometida con las condiciones de salud de la población; a lo largo de su historia, ese compromiso ha sido capaz de generar una idea, después un programa y, posteriormente, una realidad de ya casi 70 años: el servicio médico social. Al finalizar su intervención, destacó que la FM ha estado comprometida con el diseño de las instituciones públicas de salud en nuestro país y, al mismo tiempo, ha sido capaz de formar estudiantes que desarrollan proyectos como el Hospital Santa Fe, mediante el trabajo de su fundador, doctor Solórzano Gutiérrez. Antes de develar la placa, correspondió al doctor Víctor Arrubarrena Aragón, miembro del Hospital, evocar al doctor Solórzano Gutiérrez, quien egresó de esta Facultad en 1944; explicó que el maestro recibió preparación y capacitación como especialista al amparo de la enseñanza tutelar que, como herencia de la escuela europea y en particular francesa, era tan común en el ámbito médico de la época. El doctor Solórzano Gutiérrez, pendiente de no descuidar el aspecto docente a la par del trabajo diario, durante muchos años fue profesor titular de la cátedra de ginecología y obstetricia en la entonces Escuela de Medicina, impartía sus clases en las aulas del Hospital General de México. Adicionalmente, Arrubarrena Aragón habló de las acciones del doctor Solórzano Gutiérrez como creador e impulsor de servicios de salud, como el Hospital Santa Fe, que en sus inicios fue sanatorio-maternidad. Así, dijo que en los años cincuenta, la seguridad social daba sus primeros pasos, pero la necesidad de ofrecer servicios privados de atención médica era ya una necesidad ingente. Los Hospitales Inglés y Español, en su tradicional localización estaban lejos de garantizar la necesidad de servicios para la población. Fue entonces que, con visión, con espíritu creativo, pero al mismo tiempo saboreador y consciente de los riesgos que ello implicaba, el maestro Solórzano Gutiérrez inauguró el sanatorio-maternidad “El Rosario”, durante muchos años semillero para la formación de tantos y tantos gineco-obstetras, el cual más tarde se convertiría en el hospital que es hoy día. “Dondequiera que se encuentre, el doctor José Alberto Solórzano Gutiérrez vería con satisfacción la realidad actual de su obra: El Hospital Santa Fe es una fuente de trabajo para más de 600 familias; es un centro de enseñanza para el personal de enfermería; por ello, ha incorporado sus programas a la Escuela Nacional de Enfermería y Obstetricia; trabaja en la capacitación de médicos y de su personal, pero, sobre todo, mantiene su autenticidad buscando incrementar día a día la calidad de sus servicios, ofreciendo programas de seguridad para sus pacientes, certificando sus acciones tanto en los organismos nacionales como en procesos de ISO 9001, así como modernizando y actualizando sus instalaciones, todo ello en un ambiente cálido y familiar, como fue el deseo de su fundador”, expresó Arrubarrena Aragón al finalizar su intervención. Cabe destacar que, gracias al apoyo del Hospital Santa Fe, el aula A-403 es ahora un espacio que reúne las condiciones para la enseñanza-aprendizaje, y llevará, en la placa colocada en su interior, ese testimonio. |
|||||||||
