Gaceta Facultad de Medicina UNAM
10 octubre 2006
Facultad de Medicina UNAM

70º ANIVERSARIO DEL SERVICIO SOCIAL UNIVERSITARIO

El servicio social en el área de la salud es el modelo más
eficiente que se realiza en México

  • La mesa redonda, Presente y Futuro del Servicio Social en Medicina, dedicada al área que comenzó el servicio social en nuestro país
  • Constituyó una de las cuatro mesas redondas del coloquio Compromiso y Responsabilidad Social

Los participantes de la mesa redonda Presente y Futuro del Servicio Social en Medicina, ante el hecho de que es el servicio social más eficiente que se realiza en México, acotaron que es necesario crear un nuevo acuerdo nacional viable y pertinente para el sector educativo y el sector salud en beneficio de los estudiantes y de las poblaciones, así como aumentar en número y cantidad las becas otorgadas a los médicos pasantes que realizan su servicio social.

El invitado especial: Doctor Carlos Castillo Henkel,
y el doctor José Narro Robles

Cabe destacar que dicha mesa fue una de las cuatro que constituyeron el coloquio Compromiso y Responsabilidad Social, efectuado durante la celebración del 70º aniversario del servicio social universitario, y fue dedicada a esta área por haber sido la primera en implementarlo y porque sus características son particularmente diferentes a otras profesiones.

Entrando en materia, la doctora Mariana Zendejas Villalpando, Premio Nacional de la Juventud 2005, apuntó que el servicio social es una actividad temporal y obligatoria que permite consolidar la formación académica al llevar a la práctica los conocimientos adquiridos en las aulas y tomar conciencia de la problemática nacional —en particular la de los sectores más desprotegidos del país—, así como extender a la sociedad los beneficios de la ciencia, la técnica y la cultura.

Al hablar de las características del servicio social en medicina, comentó que en otras carreras, para realizarlo, generalmente se requiere contar con 70 por ciento de los créditos del plan de estudios, la aprobación de la facultad o escuela, llevarlo a cabo en un tiempo no menor de seis meses y cubrir 480 horas como mínimo o las que establezca el reglamento interno de cada facultad o escuela. En el caso de la salud, indicó que se requiere 100 por ciento de los créditos y un tiempo de un año, a lo que agregó: “Se realizan 2 mil 840 horas durante este periodo, sin tomar en cuenta que el médico debe estar disponible las 24 horas del día, los 365 días del año.”

Señaló que en esta área los campos clínicos para servicio social son de tres tipos: 1) Unidades para población urbana de más de 15 mil habitantes de menor desarrollo económico y social; tiempo parcial sin beca o beca mínima con jornada de 5 a 6 días a la semana y horario de 4 horas diarias, sólo para casos de excepción como pasantes con problemas de salud o pasantes trabajadores federales. 2) Unidades de atención para población rural concentrada de 2 mil 500 a 15 mil habitantes; tiempo completo con beca mínima; jornada de 6 días por semana con horario de 8 horas de actividades para atención de consulta y campo. 3) Unidades auxiliares de salud para población rural dispersa para poblaciones de mil a 2 mil 500 habitantes; tiempo exclusivo con beca, jornada de 6 días por semana con un día de descanso, horario de 8 horas para la atención, consulta, actividades de campo y atención de urgencia las 24 horas del día.

La también Premio Gustavo Baz Prada dijo que las actividades que han de desarrollar los pasantes de medicina son: atención al niño sano, vacunación, salud ginecológica, pacientes con enfermedades cronicodegenerativas, salud reproductiva, atención al adolescente, campaña de salud bucal y consulta médica general. Aunado a esto, se suman las acciones comunitarias, como el manejo adecuado de basura y desechos, manejo y vigilancia de agua potable, mejora de viviendas y de caminos, manejo adecuado de excretas, huerto familiar y trabajo conjunto con la presidencia municipal, las instituciones y la comunidad, además de desarrollar investigación clínica y epidemiológica.

En conjunto, los ponentes de la mesa

Al realizar un análisis de su labor, enfatizó que en promedio asisten 3 mil 761 consultas al año, 314 por mes, 78 por semana, 20 por día, y la remuneración económica de su beca mensual es de mil a mil 800 pesos que equivalen a 60 pesos diarios y tres pesos por consulta, en comparación con un médico de contrato que gana de 12 mil a 14 mil pesos mensuales y su consulta es de 30 a 35 pesos, por lo que pidió se fortalezca el servicio social con conferencias y talleres que orienten al alumno sobre las funciones básicas que realiza desde el inicio de su formación profesional; asesoría académica personalizada por parte de los integrantes del Departamento de Servicio Social como parte del programa académico; aumento de la beca y mayor difusión de los reconocimientos que se pueden obtener por realizar un servicio social ejemplar.

Durante su participación, el doctor Joaquín López Bárcena, secretario general de la Facultad de Medicina, afirmó que el servicio social que México lleva en el área de salud es modelo para otros países y que es el más eficiente que se realiza en toda la República, por lo que necesita una reforma profunda para mejorar más aún su eficiencia.

Destacó que hace algunos años, en un coloquio organizado por la Organización Panamericana de la Salud, se mencionó que otros países realizan el servicio al terminar la carrera, por lo que es un servicio profesional y no social como el se hace en México; además, contiene un componente doble: ser social y académico. Lo diferenció porque aquí también se llevan a cabo los dos, nada más que el social se realiza durante la licenciatura y el profesional —dentro del área médica— durante la especialidad.

Asimismo, afirmó que para que se realice el servicio social es necesaria una estrecha relación entre el sector salud, las instituciones de salud y las educativas.

Durante algunos años las escuelas de medicina adoptaron una actitud pasiva en la que delegaban al gobierno la responsabilidad del estudiante, pero en 1991 se creó la Comisión Interinstitucional para la Formación de Recursos Humanos en Salud (CIFRHS), que unió al sector salud con las instituciones educativas. Actualmente, esta Comisión es la que se encarga de reunir a las instituciones para que se pongan de acuerdo en todo lo que se refiere a la interacción educativa, incluido servicio social.

Con respecto a normas oficiales, mencionó que el único reglamento que existe data de 1982, por lo que en 1992 se reunieron un grupo de escuelas para integrar lo que se llamó Recomendaciones de la Comisión Interinstitucional para el Servicio Social, donde se especificó cuáles serían las condiciones en las que el alumno debería ejercer su trabajo, cómo podía aprender y cómo se podía beneficiar la comunidad. Se fijaron las recomendaciones y se firmó un convenio con cada una de las entidades federativas.

Requisitos y duración del servicio social en la Facultad de Medicina

  • Haber cubierto 100 por ciento de los créditos del Plan de Estudios de la carrera y acreditar el examen profesional (fases teórica y práctica).
  • Inscribirse durante un acto público que tiene lugar en las instalaciones de la Facultad de Medicina, o
  • Cubrir los requisitos de la CIFRHS en materia de investigación y ser aprobado por el comité ad hoc.
  • La duración del servicio social es de doce meses.

Después de esto las recomendaciones emitidas por la CIFRHS no han tenido la repercusión esperada, lo que se traduce en una menor factibilidad de desarrollo del componente académico, por lo que es necesario revisar y actualizar el conjunto de lineamientos normativos del servicio social de medicina en México, tomando en cuenta la descentralización de los servicios de salud. Para ello, propuso realizar un nuevo acuerdo nacional viable y pertinente para el sector educativo y el sector salud en beneficio de los estudiantes y de las poblaciones, así como crear comités estatales interinstitucionales para la formación de recursos humanos para la salud que configuren de manera generalizada un nuevo esquema, acorde con las reformas de salud y educativas.

Por su parte, el doctor Carlos Castillo Henkel, director de la Escuela Superior de Medicina (ESM), del Instituto Politécnico Nacional (IPN), comentó que la ESM se fundó sobre la base de un fuerte compromiso social, especialmente con las clases más desprotegidas que en ese momento estaban fundamentalmente en el campo, y que hasta hoy la integración social es una respuesta a lo que la sociedad pide al Instituto para que el IPN contribuya también a resolver problemas sociales.

Mencionó que la solidaridad y reciprocidad social se fomentan mediante un servicio social renovado que forma parte del currículo y de las actividades de aprendizaje de los estudiantes de todos los niveles. Además de ser un requisito para finalizar la carrera de medicina, tiene como finalidad generar condiciones propicias para que los médicos pasantes lleven a la práctica los conocimientos adquiridos, en beneficio de los habitantes de las comunidades marginadas y de los sectores más desprotegidos, a fin de contribuir a satisfacer las necesidades de salud del país, por lo que los temas en los que se ha de reflexionar son: plazas, los beneficios que proporciona el servicio social a la sociedad, el tipo de adiestramiento y las condiciones adecuadas para el pasante, el género, los programas académicos, la supervisión y la definición clara del papel del pasante en el servicio de salud, entre otros.

Sobre las plazas, afirmó que en el Distrito Federal es necesario buscar sitios de oportunidad para prestar servicio. Sobre las sedes, aseveró que las instituciones de salud deben autorizar la utilización de sus campos clínicos únicamente a instituciones educativas que cuenten con planes y programas de estudio de la licenciatura en medicina acreditados o en proceso de acreditación por organismos reconocidos por la Secretaría de Educación Pública. Sobre el género, dijo que cada vez es más el número de mujeres que estudian y que las condiciones deben ser iguales a las de los hombres.

“La población femenina de las escuelas de medicina del país se duplicó entre 1967 y 1985; pasó de 18 a 36.3 por ciento. En 1990 las mujeres representaban una tercera parte de los médicos en México. Actualmente la matrícula femenina en la ESM es ligeramente superior a 50 por ciento. A pesar del número cada vez mayor de mujeres médicas, la problemática que plantea su creciente incorporación a la práctica profesional ha sido poco estudiada. Están en condiciones de desventaja frente a los hombres y en el caso del servicio social, la predominancia femenino conduce a mayor cuidado en la elección de las plazas.”

La Facultad de Medicina trabaja en 17 estados, 260 municipios y 631 comunidades

Las modalidades son: asistencial, docencia e investigación

Sobre el tema del beneficio social, mencionó que los estados deben facilitar la supervisión, evaluar el impacto en la comunidad de la actividad de los pasantes a mediano y largo plazos e incluir otras acciones de beneficio para la comunidad.

Sobre la remuneración que reciben los jóvenes, comentó el caso del municipio de Axtla de Terrazas, en el estado de San Luis Potosí, donde se está otorgando una beca complementaria de 2 mil 200 pesos y 400 pesos de ayuda mensual para viajar al Distrito Federal, además de alimentación y hospedaje por parte de la comunidad.

En el caso específico de la Facultad de Medicina, el doctor Malaquías López Cervantes, secretario de Enseñanza Clínica, Internado y Servicio Social, indicó que el servicio social corresponde al sexto año de la carrera, por lo que se espera que el alumno aplique e integre los conocimientos teóricos y prácticos adquiridos durante ella, para: resolver problemas de salud individuales y colectivos, participar en la formación de recursos humanos, y llevar a cabo actividades de investigación científica.

“En esta etapa es primordial para la formación del médico que demuestre su actitud de servicio y capacidad para el trabajo en equipo, sustentado en el autoaprendizaje.”

Como antes se mencionó, los tipos de servicio son: asistencial, docencia e investigación. En el caso de la FM, el doctor López dijo que en el área asistencial se busca vincular al joven con la sociedad, con respeto de las características étnicas y culturales de cada comunidad; aplicar los principios de la educación para la salud; proporcionar atención médica individual y familiar, y participar en los programas de salud pública y en la elaboración de las estadísticas de salud.

En el área de docencia la Facultad de Medicina ofrece a los médicos pasantes la posibilidad de realizar su servicio social al intervenir en la enseñanza de sus propios compañeros de carrera, y para ello es necesario haber sido instructor desde los primeros años, de manera tal que se cuente con la experiencia necesaria acerca del proceso de enseñanza-aprendizaje.

En investigación se busca promover que los alumnos de medicina se incorporen desde etapas tempranas a proyectos, fomentar la investigación como complemento esencial del desempeño profesional y despertar el interés por realizar estudios de posgrado. Informó que por estas labores los estudiantes pueden ser acreedores a premios como el Nacional de la Juventud o el Gustavo Baz Prada.

Sobre los problemas que presenta el servicio social, indicó que giran en relación al cambio en los balances de género, la sobrecarga de trabajo y responsabilidades, la inadecuada distribución en las tres modalidades y una injusta retribución económica, concluyó.

Finalmente, el doctor José Rodríguez Domínguez, profesor de la FM, se refirió a los problemas actuales del servicio social, los cuales se encuentran en torno a un individualismo en la práctica profesional que no responde a una visión de largo plazo para mejorar la salud integral de las comunidades; a una concepción parcial del servicio social sin que responda a las necesidades del desarrollo nacional, regional, estatal, municipal o local; a una crítica creciente del servicio social, por no contar con elementos de medición de su impacto en la formación de habilidades y valores de los profesionistas; a una pérdida del espíritu del servicio social genuino, que se convierte sobre todo en un requisito más para la titulación; a una dispersión del ejercicio profesional del pasante dentro de programas puntuales y coyunturales, desvinculados entre sí con las funciones de docencia, investigación y extensión, sin continuidad programática.

Para dar respuesta a todo ello, recomendó y sugirió profundizar en el conocimiento de la función, la filosofía, los objetivos y la importancia del servicio social. Proponer actividades de motivación a los alumnos para participar en proyectos comunitarios asociados a su desarrollo profesional. Desaparecer la práctica del servicio social como un requisito para la titulación. Establecer una coordinación para la organización y gestión del servicio social de pasantes de Medicina, y vincular disposiciones federales, estatales y municipales. Crear instrumentos y metodologías adecuadas para la evaluación y el seguimiento de programas y actores dentro del servicio social. Desarrollar estrategias de vinculación de los programas eminentemente médicos que se llevan al cabo durante el servicio social con proyectos de desarrollo social sustentable, e implantar mecanismos adecuados para incentivar la participación del personal académico en la orientación, el diseño, el seguimiento y la evaluación de los proyectos de servicio social, para garantizar los objetivos de aprendizaje.
Para lograr estos objetivos afirmó que es necesario integrar el servicio social de medicina a proyectos sociales concretos de desarrollo comunitario a largo plazo. Establecer un Programa Integral de la Práctica Profesional del Estudiante de Medicina en donde durante uno o dos años continuos realicen sus prácticas hospitalarias y comunitarias, bajo la supervisión de tutores médicos capacitados. Mantener el servicio social tal como en la actualidad se lleva a efecto, demandando mejores condiciones laborales para los médicos pasantes, y sustituir un servicio social obligatorio por uno voluntario, en donde el alumno que opte por el mismo pueda gozar de mayores oportunidades para su desarrollo profesional.