La certificación contribuye a reducir la heterogeneidad en la calidad de los servicios médicos
Con objeto de que los médicos especialistas –que hoy suman 85 mil en territorio nacional– acrediten niveles de competencia para el ejercicio de su profesión, en beneficio de la sociedad mexicana, la Universidad Nacional Autónoma de México y las Secretarías de Educación Pública (SEP) y de Salud (SSa) realizaron la Reunión de Evaluación del Proceso de Certificación de las Especialidades Médicas.
Durante esta reunión se destacó la labor –desde la década de los sesentas– de las Academias Nacional de Medicina y Mexicana de Cirugía, y de los consejos de especialidades médicas para certificar y recertificar la preparación de quienes proporcionan atención especializada. Al encuentro, realizado el pasado 20 de septiembre en el auditorio “Raoul Fournier” de la Facultad de Medicina, asistieron el rector, Juan Ramón de la Fuente, y los titulares de la SEP, Reyes Tamez Guerra, y la SSa, Julio Frenk Mora. En este marco, se presentó el libro La Academia Nacional de Medicina de México y la certificación de los especialistas por los consejos de especialidades médicas, cuyo autor, Víctor Manuel Espinosa de los Reyes Sánchez, precisó que hasta agosto de este año, 75 mil médicos especialistas habían sido certificados, de los 85 mil que están en activo. Al hablar de su obra, Espinosa de los Reyes resaltó que desde el inicio de los consejos, los fines y objetivos fueron certificar y recertificar los conocimientos y destrezas de los especialistas, así como estudiar la reglamentación de las especialidades, ya que en México no había un organismo que certificara su preparación. Al comentar la publicación, el doctor Fernando Ortiz Monasterio, profesor emérito de esta Facultad, afirmó que el libro muestra el desarrollo de la medicina mexicana en los últimos años, así como la estructura y el valor de los consejos de especialidades médicas, de gran autoridad moral. Asimismo, en este tenor, el doctor Carlos McGregor Sánchez Navarro, ex presidente de la Academia Nacional de Medicina y ex director de la Facultad de Medicina, resaltó que prácticamente todas las cadenas de hospitales privados exigen la certificación del médico especialista, al igual que las compañías de seguros de gastos médicos mayo-res, por lo que el propósito de este tipo de procesos es recertificar, lo que significa que cada quinquenio el especialista debe demostrar que está capacitado y actualizado como una garantía a la población que demanda el servicio. Con la referencia del contenido del libro, al tomar la palabra el doctor Juan Ramón de la Fuente convocó a los titulares de la SEP y de la SSa a suscribir un convenio en materia de certificación de los conocimientos de los médicos que ejercen una especialidad, el cual permita que el Estado norme estos procesos, y que sea el propio gremio el que continúe la acreditación. Planteó la necesidad de que la certificación que realizan los consejos de especialidades médicas adquiera un carácter legal en el mediano plazo, aunque para ello deben generarse las normas y diseñar el marco jurídico. Insistió en que sería un grave error que la certificación estuviera a cargo de funcionarios públicos, quienes difícilmente podrían realizar mejor función que los propios médicos, por lo que debe mantenerse la responsabilidad en quienes han demostrado tener la capacidad para hacerlo, y resaltó que en los últimos decenios, los resultados de los médicos especialistas certificados han sido inobjetables y son ellos los que le han dado un gran jalón a la calidad de la atención a la salud en los hospitales públicos y privados. Así, el rector llamó a cerrar filas para evitar la disminución del subsidio que el Estado otorga a las universidades públicas, pues advirtió que reducir el presupuesto a éstas significa afectar la investigación en ciencia y tecnología y, por lo tanto, el desarrollo del país. “Si queremos ser más competitivos, si queremos mejorar la productividad, necesitamos invertir más en recursos humanos calificados y en desarrollo científico y tecnológico que hoy en día son la palanca fundamental de la productividad y de la competitividad”, aseveró. Ante ex rectores de la UNAM, el director de la Facultad de Medicina, José Narro, ex directores de escuelas y facultades, presidentes de los consejos de las especialidades médicas, y directivos de institutos y hospitales de las instituciones de salud, el rector De la Fuente precisó que para seguir adelante con este tipo de procesos es necesario que tanto las instituciones educativas como las de salud cuenten con los recursos necesarios para continuar la formación de especialistas. “No podemos permanecer callados. Vemos cómo, año tras año, el presupuesto para investigación y desarrollo, para ciencia y tecnología, lejos de crecer, decrece, y afecta sensiblemente a las universidades, como la UNAM, que realiza más de 50 por ciento de la investigación que se hace en México.” Explicó que en el caso de la educación superior el proyecto de presupuesto muestra una disminución de 0.50 a 0.48 con relación al producto interno bruto (PIB), y en el caso de la ciencia y la tecnología una disminución de 0.38 a 0.35. Al respecto, el titular de la SEP, doctor Reyes Tamez, destacó la importancia de la evaluación externa. Subrayó que la mejor forma de hacerlo sería entre pares académicos, por lo que propuso la instalación de un grupo de trabajo integrado por todos los sectores involucrados para analizar el tema. En respuesta a lo del presupuesto, Tamez desalentó cualquier posibilidad de que México logre un desarrollo educativo pleno, y agregó: “Ni con ocho por ciento del PIB podemos alcanzar lo que invierten por alumno los países más desarrollados, e incluso si todo el gasto programable se dedicara a la educación, tampoco alcanzaría el mismo propósito.” En presencia de miembros de la Academia Nacional de Medicina, alumnos de la FM y legisladores, el doctor Julio Frenk señaló que en México existe la tendencia irreversible a establecer marcos que permitan garantizar los máximos niveles de calidad en los servicios de salud. Dijo que la certificación contribuye a reducir la heterogeneidad en la calidad de los servicios médicos, ya que mientras existen instituciones que cuentan con niveles de excelencia y vanguardia en la materia, otras están rezagadas. Cabe señalar que el libro La Academia Nacional... reseña la participación que ha tenido la ANM en la evaluación de los conocimientos y competencia de los médicos que solicitan certificarse como especialistas, desde los orígenes hasta el año de 2003. No sólo se trata de un interesante estudio histórico que muestra el progreso del ejercicio de la medicina desde la antigüedad hasta nuestros días, sino que incluye temas de orden teórico y práctico que permiten conocer el desarrollo de la certificación de los médicos especialistas en nuestro medio. El doctor Espinosa de los Reyes es un médico mexicano destacado, líder en su disciplina, de amplia trayectoria académica, con aportaciones originales al conocimiento y a la organización de los servicios de salud en nuestro medio. El libro es una coedición entre la Facultad de Medicina de la UNAM y la Academia Nacional de Medicina. |
|||||||||
