Gaceta Facultad de Medicina UNAM
25 mayo 2004
Facultad de Medicina UNAM

Acciones de la Universidad Nacional ante el brote de sarampión registrado en el país

  • La población vulnerable: jóvenes entre 13 y 39 años de edad

El sarampión es una enfermedad causada por Paramyxovirus, muy contagiosa, caracterizada por fiebre, tos y salpullido; su principal complicación es la pulmonía, por lo que en esos casos se requiere hospitalizar al paciente; la infección se propaga por gotitas nasales, bucales o de la garganta de una persona infectada, se incuba entre 7 y 14 días antes de la aparición de los síntomas.

La inmunidad a la enfermedad se logra después de la vacunación o de una infección activa. Cabe señalar que antes de que la inmunización se generalizara, el sarampión era una enfermedad común en los niños, por lo que 90 por ciento de la población ya se había infectado a la edad de 20 años. Actualmente, adolescentes y adultos jóvenes que no recibieron una segunda dosis de la vacuna son vulnerables, por esa razón, y debido al brote de sarampión que registra en el país 64 casos, las autoridades sanitarias promueven que la población entre 13 y 39 años de edad se vacune para evitar la propagación del virus.

En apoyo a estas acciones sanitarias, la Universidad Nacional Autónoma de México respondió al aplicar la vacuna (doble viral, sarampión y rubéola), del 7 al 29 de mayo; para este propósito se instalaron seis puestos, ubicados en las Facultades de Medicina, Derecho, Contaduría y Administración, Ciencias Políticas y Sociales, e Ingeniería, así como el Centro Médico Universitario, informó en breve entrevista el secretario general de la Facultad de Medicina, doctor Joaquín López Bárcena, quien supervisó la brigada en esta Facultad.

El día de arranque de la vacunación en la FM, realizada en la planta baja del edificio B, junto a los elevadores, en la primera hora se aplicaron más de 100 dosis, la respuesta fue inmediata; los siguientes días se aplicaron un promedio de 600 vacunas diariamente que inmunizaron principalmente a jóvenes de otras facultades aledañas y trabajadores, ya que la mayoría de los estudiantes de medicina de los dos primeros años fueron vacunados el año anterior bajo el Programa Universitario Vacunado.

“Fue una dosis única que no provoca mayores molestias, aunque en algunas personas ocasiona una leve reacción en los siguientes 10 días”, explicó el secretario general.

Para su aplicación se recomendó no estar embarazada, no haber tenido la enfermedad, no ser alérgico a la neomicina (antibiótico) o al huevo, no sufrir padecimientos que comprometan el sistema inmunológico (cáncer, leucemia, VIH-sida), no estar en tratamiento con quimioterapia o radioterapia, no presentar un proceso infeccioso y no haber sido vacunado en el último año.