Gaceta Facultad de Medicina UNAM
10 de marzo 2004
Facultad de Medicina UNAM

ALUMNOS DESTACADOS

Perseverancia, disciplina y esfuerzo, elementos que se conjugan en Ana Barrera Vargas, alumna de tercer año de la FM

Alumna Ana Barrera Vargas

Alegría, gran vitalidad y espíritu de superación, son algunos de los rasgos que definen la personalidad de Ana Barrera Vargas, quien en la actualidad cursa el tercer año de la carrera de medicina en esta Facultad con promedio de 10, y quien considera que su profesión tiene la virtud de combinar dos aspectos: el humanista y el científico, “… lo que la convierte en una disciplina importante, que te abre muchas puertas y puede dejarte grandes satisfacciones”.

Ana es estudiante de la generación 2002, ingresó a la Facultad de Medicina por concurso de selección y pertenece a los Núcleos de Calidad Educativa (Nuce), área que le brindó la oportunidad de involucrarse en proyectos de investigación, como el que realizó al lado de la doctora Julieta Rubio en el Instituto de Investigaciones Biomédicas.

Con claridad y fluidez externa cada una de las experiencias que ha vivido durante sus primeros años en la FM, de la cual se siente orgullosa, y que comparte en una breve charla con la Gaceta, a la que reveló que este interés por estudiar medicina surgió en la etapa final de la preparatoria cuando Ana —en ese momento indecisa— deseaba estudiar algo relacionado con matemáticas, “... pero me di cuenta de que no llenaba mis expectativas y después pensé en la medicina porque consideraba que podía ser más apasionante que una carrera de matemática y dejarme muchas satisfacciones; acaparó mi atención y así la escogí, en el área 2, realicé mi examen y pude ingresar a la FM.”

Se muestra siempre extrovertida y sin prisas. Ana asegura que al principio de la carrera pensó que se inclinaría hacia la investigación, “... pero cuando asisto a tomar clases en el hospital, tratar con los pacientes y estar inmersa en la vida hospitalaria, creo que me está gustando más la clínica”, expresa.

El binomio disciplina-esfuerzo ha sido para Ana la clave de su excelente desempeño académico. “Significa tratar de ser constante, aunque a veces es difícil, porque cuesta trabajo desconectarte de algunas actividades que has llevado toda tu vida y de repente limitar algunas, pero creo que lo más importante es equilibrar el estudio con la vida social y la familiar.”
Sobre deportes y pasatiempos, Ana señala que jugó baloncesto, pues era de su predilección en la “prepa” porque dedicaba buen tiempo a su práctica, pero lo abandonó cuando ingresó a la FM, “... era muy fácil salir de la escuela y que-darme a jugar todos los días; dejé de hacer deporte y eso —la verdad— me pesa. Tal vez si me lo propongo podría encontrar el tiempo para hacerlo. Además, en mi tiempo libre me gusta mucho leer, ver la televisión, salir con mis amigos e ir al cine”, indica.

En la actualidad Ana cursa las materias psicología, salud pública y medicina general, revela que esta última es de su predilección porque aporta un enfoque práctico y al mismo tiempo la aplicación más tangible. “Estudias cómo se diagnostican y se tratan las enfermedades. Y luego si llegas con un paciente que tiene las características del caso que viste en el salón de clases se te hace más práctico. En medicina general estudias cosas nuevas y, por ende, considero que son interesantes.”

Ana toma clase en el Hospital General “Dr. Manuel Gea González”, “... estar allí ha sido para mí una buena experiencia, al ver las cosas prácticas llegas a integrar todo lo que viste en las materias básicas, le encuentras mucha utilidad y aplicación; considero que he aprendido mucho en estos siete meses que llevamos clínica, cuando ves el caso de alguna enfermedad es mucho más difícil que se te olvide a cuando lo lees o cuando lo ves en la fotografía de un libro, porque te acuerdas del enfermo que viste. Poco a poco vas adquiriendo la confianza de platicar con el paciente, interrogarlo. Se me ha hecho interesante entablar comunicación con todo tipo de gente que llega al hospital y tratar de ayudarlos de cierto modo, porque nosotros en este momento, como estudiantes, no podemos hacer gran cosa. A lo mejor si platicas con el paciente sientes que algo estás haciendo, que lo estás ayudando.

— ¿Te gustaría hacer investigación en un futuro no muy lejano?
“A lo mejor sí, estuve en los primeros años en un laboratorio, en el Instituto de Investigaciones Biomédicas, asistía una o dos veces a la semana. Estuve participando en un proyecto en el laboratorio de la doctora Julieta Rubio, del área de medicina genómica . El principal objetivo de la investigación era que se estaba buscando crear un banco de ácido desoxirribonucleico de la población mexicana. La tarea era obtener muestras de sangre. Una vez obtenida la muestra, se procedía a aislar los leucocitos, con eso se buscaban ciertos polimorfismos en algunos genes, sobre todo los que se están buscando ahora en el laboratorio son de citocromos, enzimas que participan en procesos de oxidación y detoxificación.”

— ¿Qué significa para ti ser estudiante de la UNAM?
“Me da mucho orgullo ser universitaria, es una institución que da mucho porque tiene todo tipo de actividades, te abre una cantidad de puertas impresionante en el ámbito de la investigación, de la cultura, del deporte. Es una universidad que tiene todo y realmente he aprendido a valorarla mucho. Ninguna universidad de México se puede comparar a ésta. Es una institución que ha trascendido y que le ha valido tener mucho prestigio; le tomas gran cariño y surge un sentimiento de pertenencia a ella. Cuando regresas a tu Facultad de Medicina y la ves pintada, acondicionada y remodelada te da gusto que se están haciendo las cosas bien”, concluye.