Gaceta Facultad de Medicina UNAM
25 febrero 2007
Facultad de Medicina UNAM

 

PREMIO “PALMAS ACADÉMICAS”

El gobierno francés entrega su máximo reconocimiento al doctor Luis Miguel Gutiérrez Robledo

Pionero de la geriatría en México y fundador de la especialidad en la Facultad de Medicina
“La atención médica de los adultos mayores, un reto por enfrentar”

El doctor Luis Miguel Gutiérrez Robledo

Caballero de la Orden de las “Palmas Académicas”, máxima distinción que entrega el gobierno de Francia por servicios prestados a la cultura de ese país, fue el nombramiento conferido al doctor Luis Miguel Gutiérrez Robledo, distinguido investigador y profesor mexicano.

Es uno de los principales arquitectos de la cooperación francomexicana en el ámbito de la salud y la investigación, especialmente en el área de la medicina del adulto mayor, se dio a conocer en la ceremonia de entrega del galardón, efectuada el pasado 10 de enero en la sede diplomática de Francia en México.

El doctor Gutiérrez Robledo, jefe del Servicio de Geriatría del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición “Salvador Zubirán”, se ha destacado, entre otras actividades, por el impulso que le ha dado en nuestro país a la investigación de la especialidad que ejerce: la geriatría clínica y la epidemiología del envejecimiento, en particular en torno al estudio del deterioro cognoscitivo y las alteraciones del estado nutricional en la ancianidad.

A través de Francia, donde se formó como especialista, adquirió la visión que en aquel país han desarrollado sobre otorgar una “buena calidad de vida, accesible para la mayor parte de la población, en particular para los de edad avanzada”, que lo ha llevado a realizar estudios en este campo y, entre otras cosas, a crear el comité académico de la especialidad en geriatría de la Facultad de Medicina, UNAM, de la cual es profesor titular.

Cabe destacar que el doctor Gutiérrez Robledo ha mantenido intercambio, al menos anual, con idas y venidas de profesores franceses y mexicanos, por más de 20 años, que han conducido a la formación del grupo más sólido en investigación geriátrica en nuestro país en el Instituto “Salvador Zubirán”, donde la totalidad de los médicos adscritos son francófonos.

En este terreno, explicó para este medio informativo que en México el desarrollo de la geriatría es modesto, pues existen alrededor de 300 geriatras certificados, cuando las necesidades son 10 veces superiores, los servicios especializados, casi inexistentes y las necesidades de este grupo de personas, crecientes.

Doctor, ¿los recurso humanos que se están adiestrando serán suficientes?

No. El programa de especialidad de la Facultad de Medicina recluta números por debajo de las plazas de residencia disponibles; sin embargo, se están haciendo esfuerzos para dar formación geriátrica a todo el personal de salud en el nivel de atención primario.

¿Cuál es la perspectiva a largo plazo en esta área de la medicina?

¡Enorme! Las potencialidades son muy grandes, en nuestro país todo está por hacerse: desarrollo de servicios hospitalarios y comunitarios; programas asistenciales, de prevención, cuidados a largo plazo; investigación de los mecanismos moleculares del proceso de envejecimiento y las enfermedades asociadas; comprensión de los mecanismos del proceso de fragilización que ocurre al avanzar en edad, y desarrollo de estrategias terapéuticas y preventivas para mejorar la calidad de vida al envejecer, así como prevenir el deterioro funcional.

La geriatría es la especialidad médica que se ocupa de la atención médica de los ancianos. Fue creada por Marjorie Warren en Inglaterra en 1946.
En México, la especialidad que se imparte en la Facultad de Medicina de la UNAM se inició en 1994, a iniciativa del doctor Luis Miguel Gutiérrez Robledo.
La gerontología es la ciencia que se encarga del envejecimiento de las personas. En ella confluyen conocimientos de psicología, medicina, educación y sociología, con objeto de convertir la experiencia de envejecer en una aventura menos negativa y, ¿por qué no?, incluso positiva.

Luego de estas afirmaciones, a decir del experto, se necesita generar la cooperación de investigadores mexicanos que pueden asociarse con el gobierno y sus homólogos franceses para establecer innovadores programas médicos y sociales que ayuden a la población anciana de México.
Asimismo, aseguró que el principal reto como especialista y como profesor es conseguir motivar a un número creciente de jóvenes médicos mexicanos en el ámbito de la salud, para desarrollar una carrera geriátrica tanto clínica como de docencia e investigación y, con ello, contribuir a satisfacer las ingentes necesidades de nuestros mayores.

De este modo, señala a los estudiantes de medicina que, a excepción de los pediatras, todos se verán confrontados con un número creciente de pacientes de edad avanzada en su práctica profesional, número que además se acrecentará significativamente en los próximos años.

Por esta razón, afirmó que el reconocimiento que recibió, además de distinguir a su especialidad, expresa una oportunidad para darle mayor visibilidad e ímpetu al trabajo que realizan en conjunto sus colegas, en un momento en que esto es muy necesario para los pacientes.

Además de compartir el galardón con sus homólogos, lo hace con la institución para la cual ha dedicado su trabajo: el Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición “Salvador Zubirán”, pues por medio suyo, también se reconoció, y más allá de ese Instituto, a la medicina mexicana.

En este sentido, también aceptó, como dijo en la ceremonia de premia-ción ante la presencia del embajador Alain le Gourriérec, y el secretario de Salud, José Ángel Córdova Villalobos, la generosidad con la que Francia ha extendido su visión humanista a México por medio del Institut de Santé Publique et Développement de la Universidad “Victor Segalen”, de Burdeos, que ha sido determinante del creciente interés que sobre el tema surge hoy en México mediante el análisis y difusión de la información de salud pública geriátrica; la colaboración con la Asociación ALMA, cuyo modelo de prevención de la violencia contra el anciano está siendo implantado exitosamente en esta ciudad, así como el apoyo para la realización de la cátedra Jacques Monod conducida conjuntamente con la Facultad.

Luego de preguntarle sobre sus impresiones y retos al recibir ese importante galardón respondió que representa, sin duda, una gran satisfacción, pero además es sinónimo de un incremento en el intercambio francomexicano en temas de envejecimiento, pues el actual secretario de Salud ha manifestado públicamente su interés en esta área al proponer y conseguir la aprobación de una iniciativa, dirigida a la creación de un Instituto Nacional de Salud dedicado al tema, concluyó.

El doctor Luis Miguel Gutiérrez Robledo es médico cirujano por la Universidad La Salle; realizó una especialidad en medicina interna en el Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición “Salvador Zubirán”, y otra en geriatría en la Universidad Grenoble, Francia, donde cursó, simultáneamente, la maestría en gerontología social, en el Centro Pluridisciplinario de Gerontología; es maestro en biología del envejecimiento por la Universidad de París VII, y doctor en ciencias médicas (orientación epidemiología) por la Universidad de Burdeos “Víctor Segalen”, Francia.

De su trayectoria profesional se destaca que ha dirigido más de 35 tesis, impartido cátedra en la UNAM, El Colegio de México, la Universidad Iberoamericana, la Escuela de Salud Pública de México y el Centro Interamericano de Estudios en Seguridad Social, entre otras instituciones, además de ser profesor invitado en prestigiadas universidades de Francia, Suiza y Canadá, así como en numerosos centros en América Latina.

Desde 1994 es consultor de la Organización Mundial de la Salud en el tema de envejecimiento, y ha sido miembro del Consejo Consultivo sobre Envejecimiento de la ciudad de México. En 2001 creó la Academia Latinoamericana del Adulto Mayor (ALMA) bajo la imagen de la europea.

Su producción científica abarca más de 95 publicaciones entre libros, artículos, capítulos, memorias y textos de divulgación publicados en México, Estados Unidos, Francia, Canadá, Costa Rica, Panamá y Brasil.

Actualmente colabora en programas de investigación con la Universidad de Pensilvania, en Filadelfia, la Organización Panamericana de la Salud, y con el Instituto de Salud Pública de la Universidad de Burdeos; mantiene asimismo cooperación con sus colegas franceses, europeos y latinoamericanos por medio de proyectos bilaterales.

 

La Orden Oficial de las Palmas Académicas fue instituida en 1808 por Napoleón I, con el fin de honrar con medallas al mérito a miembros de la Universidad francesa.Posteriormente, en 1866, las Palmas comenzaron a entregarse a quienes trabajan por la educación.El decreto del 4 de octubre de 1955, firmado por el presidente René Coty, instituyó tres grados dentro de la Orden: caballero, oficial y comendador.
Las Palmas Académicas pueden ser otorgadas a extranjeros y a los franceses residentes fuera de Francia que contribuyen activamente a la expansión de la cultura de ese país a través del mundo.