ACTIVIDADES CULTURALES: BAJO EL MURAL Dos grandes grupos en la FM: Cabezas de Cera y Alebrijes
Cabezas de Cera (CDC), grupo de música alternativa que combina su pasatiempo con la investigación, y Alebrijes, agrupación de música jazz-grass, son los dos últimos conjuntos que han participado en el proyecto cultural Bajo el Mural de la Facultad de Medicina. CDC nació en 1995 como una propuesta de experimentación y de satisfacción de los integrantes, al buscar en la música el principio del rock como un medio de expresión, autoconocimiento e investigación de sonidos, texturas y posibilidades más allá de los que están establecidos en la música actualmente. Es un grupo con una propuesta única en México, tanto en su quehacer musical como en su formación instrumental; con seis años de trayectoria artística el grupo ha pasado por innumerables etapas y experiencias, desde ser un octeto hasta constituirse como trío, con una instrumentación muy vasta. Después de más de diez años de formar parte de diversas agrupaciones (Mixquic, El Mostro), de transitar por el pop, el funk, el jazz, el rock progresivo y la música tradicional de Asia, África y México, y de dejarse influir por Led Zeppelin, The Police, Soda Stereo e Infectious Grooves, CDC es un trío joven que parece toda una orquesta, con Mauricio Sotelo en el stick grid, guitarra electroacústica y vihuela; Francisco Sotelo en percusiones acústicas y electrónicas (bombo, tarola, set electrónico de percusión, platillos, tambor kitai y silbato), y Ramsés Luna en clarinete, saxofón, controlador midi, whistle, flauta, surna turca y voz. La diversidad de géneros que fusiona en su música le ha dificultado adherirse a un estilo particular, pero por otra parte lo ha llevado a compartir cartel con grupos de rock progresivo, jazz, blues y hasta rock urbano, así como formar parte del elenco de festivales internacionales y encontrar nuevos seguidores en países donde jamás se han distribuido sus discos. Uno de sus atributos es su diversidad, pero el mejor rasgo es el de ser una de las pocas agrupaciones que, en estos tiempos, ha decidido tomar los riesgos de hacer una música que, alejada de modas y convencionalismos, se adentre por los múltiples caminos del rock progresivo para hacer una senda propia. Ellos han descubierto que para cualquier estado de ánimo o sentimiento existe una música. La buscan, la estudian y la interpretan al límite de sus instrumentos.
Con la formación actual y dos discos, el grupo sigue experimentando más allá de sus instrumentos, por lo que su percusionista, Francisco Sotelo, en su concepto de metalmúsica (término acuñado por él mismo), ha creado a la fecha 13 instrumentos de cuerdas, percusiones y alientos de distintas aleaciones de metal, elaborados en la Escuela de Artesanías del INBA, de donde el compositor es egresado y se desempeña como docente. Algunos de los instrumentos surgieron a partir de su trabajo con el hierro, donde la libertad en el proceso creativo le llevó a conjugar ambos elementos, la música y la plástica. En esta ocasión tocaron con el “Tricordio”, pero otros de los instrumentos de Francisco son: Tambor Kitai, Arpa Celeste, Kalimba y Armatoste.
En entrevista para este medio, Ramsés Luna comentó que él pertenece a la última etapa del grupo, y que con CDC ha aprendido muchas cosas, entre ellas, a desempeñarse como alientista. Con él ha encontrado la libertad de expresarse y hacer cosas diferentes.
Mencionó que desde niño se sintió inclinado por la música y actualmente está satisfecho por lo que ha logrado. “Vivo para la música y de ella es muy difícil vivir en nuestro país, más porque nuestra música es experimental y no es pretenciosa en cuanto a buscar popularidad; estamos alejados de eso y es lo que nos ha mantenido vivos.” Por su parte, Mauricio Sotelo, con estudios en la Escuela de Música Mexicana, dijo que sus temas son variables, porque hay melodías que nacen a partir de un solo sonido, a lo que agregó: “Las piezas tienen un corazón que es un motivo melódico, armónico o rítmico, y a partir de eso se genera la composición. Cada melodía varía y todas tienen su propio desarrollo. En el caso de las piezas de guitarra acústica, yo hago una frase que me gusta o a veces tengo toda la pieza, llego al ensayo, la muestro, y con el estilo de mis compañeros, la componemos.” Aseveró que se dedica a la música por influencia de su hermano, que es cuatro años mayor que él. “Yo cursaba la secundaria, él iba a la preparatoria y yo pensaba que quería ser ‘rocanrolero’. Escuchaba la misma música que él, y a partir de ahí me nació la inquietud. Él tenía su banda y yo comencé a tocar aparte; después me integré al grupo y las ganas de tocar es lo que me llena de felicidad y de paz.”
Sobre los instrumentos que maneja, nos dijo que toca entre otros el tricordio, que es uno de los que ha inventado su hermano. Al preguntarle cómo clasifica la música de CDC aseveró que invariablemente de “género masculino” –entre bromas—, pues es difícil, pero que él solamente la catalogaría como “música mexicana contemporánea”, porque tiene un poco de todo y ellos no son estables, “lo que es agradable”. Finalmente, Francisco Sotelo comentó que su vinculación con la plástica se dio a raíz de que estudió la carrera de técnico en metales, donde lo que más le gustó fue la libertad de trabajo, pues le permitió impulsar su propuesta de instrumentos musicales. “El desarrollo de los instrumentos fue al final de la carrera como algo intuitivo, donde descubrí que el metal puede funcionar como un elemento sonoro que combine con mis nociones de dibujo y diseño”. Así avanzó con los instrumentos de metalmúsica. Aseveró que de primera instancia lo que se busca es una propuesta estética, ser originales, únicos, y que tengan elementos del diseño, forma, textura y volumen, así como sonoro: un timbre, para que puedan ser explotables dentro de su género. En este tono, aprovechó para comentar que próximamente editarán un disco apoyado por el Fondo Nacional para la Cultura y las Artes (Fonca) del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta) –instancia encargada de proporcionar becas a los jóvenes creadores mexicanos—, donde consolidarán su propuesta metalmúsica. Sobre su formación musical comentó que es completamente autodidacta, que su inquietud surgió en los ochentas con el movimiento de rock en español; su interés por las percusiones nació de su desesperación. “La batería fue el instrumento adecuado para desfogar la ansiedad que tenía y lo sigo desarrollando, al principio fue como algo ‘animalesco’, ahora trato de que sea más estudiado.” Finalmente, los integrantes de CDC agradecieron la invitación que les realizó la FM, aunque cabe mencionar que no es la primera vez que tocan aquí, anteriormente —hace dos años— ya habían alternado con un grupo chileno, “y siempre es agradable encontrar un escenario dentro de la Facultad y dentro de la Universidad, porque aquí es un lugar donde se concentra la juventud de México”. CDC se ha presentado en diversos festivales, como el Festival Interactivo de Jóvenes; el II Festival Internacional de Rock Progresivo ProgNite en Monterrey, Nuevo León; el XI Festival Cultural Nopala, en Nopala, Hidalgo; el V Festival Balúm Canán, en Comitán, Chiapas; el Festival del Barrio Antiguo, en Monterrey; el III Festival Internacional de Puebla; la Bienal de los Ángeles, organizada por la Universidad Iberoamericana; el Tercer Festival Internacional de Ciencia Ficción y Fantasía; el primer aniversario de El Faro de Oriente; el Festival AVIV 2001 en el Centro Deportivo Israelita; el encuentro Campamento Jóvenes, en Tepoztlán, Morelos, organizado por el Instituto Mexicano de la Juventud, y el Primer Encuentro Internacional de Música Libre, además de incontables foros y teatros en la ciudad de México y provincia, como el Museo Universitario del Chopo, el Centro de Convenciones de Tlatelolco, el Zócalo de la ciudad de México, la Asamblea de Representantes, la Escuela Nacional de Música, el Multiforo Alicia, el Estudio A del Instituto Mexicano de la Radio, y el Parque Central de Comitán, Chiapas, entre otros. Han participado en programas de radio y televisión como Ruta 22, La vela, El rock sigue en el Chopo, Apaga la luz, Vasos Comunicantes, Música Perdida, Su casa y otros viajes, Frecuencia Tec Monterrey, Nuestro Rock, etc. Han incursionado en la creación de música original para cortometrajes, exposiciones, teatro y danza, como Corpus in Statu y Metamorfosis. Ganadores en la categoría de Mejor Grupo Progresivo del 2001 de la revista Nuestro Rock. Para este año están invitados a participar en el Sexto Festival Baja Prog, en Mexicali, B.C., alternando con Peter Hamill, Il Balleto di Bronzo, Duty Free Area y quince grupos más de todo el mundo, y el Interfest 2002 en Hamburgo, Pensilvania. Actualmente CDC prepara su segunda producción discográfica, la cual estará lista a mediados del año. Grupo Alebrijes, jazzgrass
La mitad de los integrantes del grupo dicen haber comenzado su carrera con el grupo Silver Grass y lo que los une fue el entusiasmo por el género. Su repertorio lo integran a partir del gusto de todos, y además porque lo sienten auténtico. Sobre su presentación en la FM, opinaron que fue muy divertida, pues el publico, a pesar de haber sido un día nublado con baja temperatura y mucho aire, respondió cálidamente.
“Nos gusta mucho tocar para la gente joven, porque son muy receptivos y es un público bonito. Además sonó muy bien, esto es una sorpresa, porque el espacio no lo conocíamos.” Sobre el escenario de Bajo el Mural comentaron parecerles muy bien que se adapten lugares al aire libre, “porque el que quiere se queda y el que no, se va, es muy suave la idea.”
Alumnos asistentes Por su parte, José Alvarado López, del mismo grupo, afirmó que a él le han gustado más las conferencias, porque son temas que no se ven seguido, y los ponentes son de prestigio. |