Reconocimiento a la labor destacada
de médicos pasantes dentro de su servicio social
- Programa de actividades necesarias
para el inicio del servicio social
- Conferencias y cursos de capacitación
con recomendaciones prácticas, médicas, antropológicas,
éticas, legales y escolares, entre otras áreas que ayudarán
a los jóvenes a enfrentar y solucionar problemas comunitarios
Dentro del marco del Programa
de actividades necesarias para el inicio del Servicio Social, que se
realizó durante la semana del 5 al 9 de enero, se entregaron
reconocimientos a cinco jóvenes por su destacada labor en la
realización de esta actividad.
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Cinthya
Verver Moreno |
En ceremonia efectuada
en el auditorio “Gustavo Baz Prada” del Antiguo Palacio
de Medicina, Adrián Fernández Cáceres Castillo,
Wendy Angélica García Martínez, Cinthya Verver
Moreno, Emilia Sánchez Alarcón y Jazmín Paola Solís
Urzúa, quienes realizaron su servicio social en los estados de
México, Tabasco, Oaxaca, Durango y Zacatecas, respectivamente,
fueron reconocidos por la Facultad de Medicina después de que
con anterioridad ya lo habían sido por otras instituciones por
la misma labor. Cabe mencionar que Adrián es acreedor al premio
“Gustavo Baz” y las jóvenes al premio “Jóvenes,
vamos por México”, de Sedesol.
Durante esta ceremonia, el doctor José Narro Robles, director
de la FM, aseveró que para esta dependencia cada vez que una
generación concluye sus estudios, pasa al servicio social o realiza
el examen profesional es motivo de satisfacción y orgullo, como
lo es para cada uno de los alumnos. Les habló del compromiso
profesional que adquirirán en breve y los felicitó por
mantener esa convicción de avanzar en esta extraordinaria aventura
que es la de formarse como médicos.
“Hace algunos años comenzaron sus estudios con un gran
deseo, con mucha alegría y convicción, pero también
con una enorme incertidumbre sobre el qué va a pasar, cómo
me va a ir, y ustedes son de los afortunados que han logrado ir venciendo
todos y cada uno de los obstáculos y cada uno de los problemas
a los que se han enfrentado y que han tenido que superar.”
Agregó que ahora pasan a una nueva etapa de su formación
donde van a poder estar al servicio de una comunidad, podrán
atender prácticamente como médicos a pacientes que les
van a confiar su salud y la atención que requieran cuando tengan
un problema, enfrentarán a una comunidad en muchos de los casos
y contribuirán al proceso de organización de la misma.
Igualmente, verán en la práctica muchos de los temas que
vieron en las aulas, de tal manera que será un año importante
y trascendente en su vida y formación.
Comentó que para la Facultad será un año de compromiso
y dentro de dicho compromiso se estructurarán mecanismos para
estar en contacto con los alumnos: “... todavía no podemos
hacer como quisiéramos, pero estamos caminando en esa dirección”.
Finalmente, y como una obligación por ser el director de la Facultad,
les recomendó cuidarse y cuidar su trabajo.
En representación de los premiados habló Cinthya Verver
Moreno, quien agradeció a las autoridades el reconocimiento que
les hicieron. A la FM por la profunda experiencia humana, personal y
profesional: la huella puma en el corazón; a las comunidades
que abrieron las puertas, sus corazones y otorgaron la confianza para
poder trabajar en conjunto. A sus compañeros —a la nueva
generación que inicia el servicio social— les dijo que
es el turno de mantener en alto el nombre de la Facultad.
“Crean que al regresar traerán la huella puma en el corazón
más profunda de lo que la llevamos, enorgullezcan a esta Facultad
y a esta Universidad”, y emocionada y como una fórmula
recomendó un “goya” para dar aliento, para el corazón
y para llenarse de entusiasmo.
La ceremonia estuvo presidida además por los doctores Joaquín
López Bárcena, secretario general, y Sara Morales López,
secretaria de Enseñanza Clínica, Internado y Servicio
Social, ambos funcionarios de la Facultad de Medicina.
Posteriormente, en otra breve ceremonia donde se hizo un reconocimiento
general a todos los prestadores de servicio social 2003, el doctor José
Narro agradeció públicamente la invitación que
le realizaran los representantes estudiantiles para participar en ese
encuentro, principalmente a Juan Manuel Pineda, consejero técnico,
y a José Luis Jiménez, consejero universitario.
“Tengo poco menos de un año de estar al frente de la FM
y el gran orgullo y satisfacción de servirle. Cuando llegué
encontré un ambiente complicado, pero ahora tengo que reconocerles
que han sabido manejar una relación madura, respetuosa y responsable.
Quiero agradecerles que me hayan invitado y permitido dirigir estas
palabras, agradecer a cada uno de ustedes y a quienes han estado fungiendo
como representantes en los distintos niveles, porque estamos encontrando
la manera de que nuestros puntos de vista, opinión y propuesta
coincidan para superar a la FM que al final de cuentas es lo que importa”,
concluyó.
Otras actividades
Dentro de esta semana de trabajo se llevaron a cabo conferencias informativas
con temas de utilidad para los jóvenes que comienzan en febrero
su servicio social. Asimismo se realizaron: “El Simposio de Salud
Sexual y Reproductiva. Implicaciones médicas, éticas,
sociales y legales”; una “Feria de Información”,
y la “Selección de sedes e inscripciones al servicio social”.
Esta última actividad se llevó a cabo en la explanada
de la Facultad. Así, del 19 al 28 de enero se desarrollaron los
cursos de inducción al servicio social por estado e institución.
En entrevista y respecto a estas actividades, la doctora Patricia Longega
Escobio, jefa del Departamento de Servicio Social, comentó que
durante el tercer día de actividades, por cortesía de
Ipas México, A. C. institución privada de divulgación
sobre los derechos reproductivos y de la mujer, se organizó el
“Simposio de Salud Sexual y Reproductiva. Implicaciones médicas,
éticas, sociales y legales”, al que asistieron abogados
y médicos que hablaron sobre los aspectos legales de la medicina,
el manejo de la planificación familiar y el desarrollo de los
derechos de la mujer respecto a su decisión de concebir, pero
tomando en cuenta a la pareja. Dijo que se les entregó información
sobre las mejores prácticas en la atención ginecológica
contemporánea y detección precoz del cáncer cervicouterino.
Es de mencionar que esta institución cuenta con profesores e
investigadores de la Facultad de Filosofía y Letras.
Comentó que a la “Feria de Información” asistieron
los jefes de Enseñanza e Investigación de los estados
de México, Sonora, Morelos, Tlaxcala, Zaca-tecas, Durango, Chiapas
e Hidalgo, quienes expusieron las características de las sedes
e hicieron promoción para llevarse los mejores promedios. “Y
efectivamente, dio resultado, a partir de estas pláticas se redistribuyeron
los mejores promedios, curiosamente en los estados que vinieron a promoverse.
En este encuentro los jóvenes preguntaron los pormenores de las
sedes: aspectos físicos del área, geográficos,
cli-máticos, de comunicación y recursos con que cuentan,
entre otras cosas. Por ejemplo, en los estados del norte en época
de nevadas hay zonas incomunicadas, por lo que es uno de los elementos
que se tienen que tomar en cuenta para su desarrollo.”
Durante el día de “Selección de sedes e inscripciones
al servicio social” —el cual fue iniciado por el director—
los chicos eligieron su plaza, a lo que la doctora Longega agregó:
“Cuando se cerraba algún estado pegaban de gritos, porque
tenía que cambiar su decisión; lloraron y gritaron como
si estuvieran en las carreras de caballos”. Algunos estados, como
Morelos, vinieron directamente a realizar la inscripción con
objeto de adelantar los trámites de documentación y becas.
Cabe mencionar que este año saldrán a zonas rurales cerca
de 780 jóvenes, el resto realizó con anterioridad su trámite
para las plazas en investigación, las cuales son cedidas de acuerdo
con ciertos requisitos: haber publicado artículos o participado
en congresos, y someter un protocolo al Comité Interinstitucional
de Formación de Recursos Humanos para la Investigación,
que califica, y si es adecuado, útil y práctico para la
sociedad, se acepta. Aquí ingresaron 27 jóvenes que realizaron
su trámite desde septiembre del año anterior y se inscribieron
el 29 de enero. También se informó que existe otro grupo
de alumnos de 14 miembros que realizarán su servicio social en
la industria. Aquí originalmente se inscribieron 57 y fueron
elegidos 14 por un comité compuesto por académicos de
los Departamentos de Servicio Social y de Salud Pública, encabezados
por el doctor Rodolfo Nava. Los jóvenes fueron seleccionados
porque están interesados en cursar posgrados en salud ocupacional
y medicina del trabajo. Su labor dentro del servicio social consistirá
en cambiar los procedimientos y evitar riesgos, accidentes y enfermedades
de trabajo.
Sobre los cursos de introducción al servicio social por estado
e institución, la jefa del Servicio Social comentó que
son impartidos por los seis profesores que integran el Departamento.
Se desarrollaron en dos días con duración de cinco horas
diarias: “Porque son los únicos momentos en que estamos
con ellos. Muchas veces les agarran huracanes y en lugar de regresarse,
se quedan solidarios con sus comunidades, y no sólo eso, recaban
alimentos y medicina para ayudar a su gente, son extraordinarios y valientes,
es decir, estamos formando personas cumplidas y de avanzada, con un
gran sentido ético y humanista.”
Hay que decir que el Departamento de Servicio Social también
da orientaciones administrativas, escolares y legales para que manejen
correctamente su expediente, todo ello con la idea de que los alumnos
sean competentes, a lo que agregó: “Abordamos la competencia
porque es la nueva forma de hacer educación médica y el
aprendizaje autorregulado que ellos tienen que seguir aun no estando
ante un académico. Los jóvenes tienen que saber continuar
su educación por sí mismos por toda su vida.”
Programa Académico de Servicio
Social
En cuanto a este Programa comentó que está organizado
en función de competencias de calidad que el Comité de
Evaluación de Escuelas y Facultades de Medicina recientemente
valoró y aprobó en la FM. “En función de
esto el Departamento de Servicio Social diseña su programa académico
para que los alumnos cuenten con bases teóricas, de procedimiento
en comunidad y contextuales, que implica tener presente la formación
ética que obtuvieron durante la carrera; tan es así que
se dan conferencias sobre estos temas, ya que en determinado momento
ellos pueden contar con el liderazgo para guiar a la población.
El programa también les dice cómo se les va evaluar y
cómo tienen que hacer su diagnóstico de salud, cómo
deben autoevaluarse y continuar con el aprendizaje autorregulado. Cuenta
con varias unidades de autoenseñanza para que las respondan,
procedimientos para remediar en algo la problemática en salud
que presentan los habitantes, orientación sobre participación
comunitaria y la actitud del médico pasante ante la comunidad;
se incluye asimismo un capítulo de medicina tradicional para
que se tome en cuenta que estas cosas sí existen, pero que tomen
de ellas los aspectos positivos para manejarlos a favor de la salud
de la gente.”
Conferencias
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Doctor Carlos Viesca |
El programa de conferencias
estuvo constituido por: “El nuevo médico. 53 aniversario
de su filmación”, del doctor David Grajeda; “Ética
médica”, del doctor Carlos Viesca; “Normatividad
y características de las sedes de la Secretaría de Salud”,
impartida por el doctor Humberto Vargas; “Sedes del IMSS”,
de Ana María Monterrosas; “Envenenamiento por animales
ponzoñosos”, de Luis Eduardo Robles; “Promoción
de salud. Comunidades saludables”, de Luis Rubén Durán;
“Desastres naturales”, de María del Carmen González;
“Enfermedades transmitidas por vectores”, de Jorge Méndez;
“Paludismo”, de Héctor Olguín; “Dengue”,
de Noé García; “Virus del oeste del Nilo (VON)”,
de Juan Montaño; “Epidemiología de la encefalitis
por VON”, de Lucina Romero y Flavio Martínez; “Epizootia
del VON”, de Jorge Cárdenas, e intercambio de experiencias
con ex alumnos.
Al finalizar su participación en el “Programa de actividades
necesarias para el inicio del Servicio Social” y en entrevista
para este medio, el doctor Carlos Viesca Treviño, titular del
Departamento de Historia y Filosofía de la Medicina, comentó
que la importancia de hablar a los pasantes de ética médica
es porque generalmente se piensa que sabemos del tema, pero en la práctica
actual dicho tema se ha desbordado, pues presenta muchos problemas nuevos
en razón de que podemos hacer más por los enfermos, pero
también podemos hacer más barbaridades con ellos, por
lo que la reflexión moral de los límites es muy importante.
“En el servicio social se da en dos vías: lo que nos han
enseñado que se debe tener y lo que no se tiene. Con cuánto
equipo médico dispongo, pues a veces es nada y saber que necesitamos
atender a los pacientes con nada y que tenemos que sacarle jugo a esa
nada es una responsabilidad ética. Es difícil interiorizar
el problema de llegar a una comunidad que piensa distinto y cuenta con
tradiciones y costumbres diferentes, y no pensamos en cómo llegar,
cómo actuar y decir yo soy el médico, sin tomar una actitud
arrogante, porque entonces no cumplimos ni moral ni médicamente.
Esto da una doble responsabilidad de observar y preguntarnos, por eso
es importante hablar con los alumnos cuando se van a servicio social.”
Durante la sesión de desastre, la doctora María del Carmen
González les recordó que un desastre implica la conjunción
de dos factores: un fenómeno, natural o antrópico, que
alcanza proporciones extraordinarias, y ciertos asentamientos humanos
y sistemas físicos expuestos a la acción de dicho fenómeno.
Los desastres se definen como cualquier evento natural o producido por
el hombre que ocasiona problema, trastorno ecológico, pérdida
de vidas humanas o deterioro de la salud y daños a los servicios,
en una magnitud suficiente para ameritar una respuesta extraordinaria
desde fuera de la comunidad o área afectadas.
Los desastres se clasifican en geológicos, hidrometeorológicos,
químicos, urgencias epidemiológicas y sociorganizativos.
El programa cuenta con tres componentes sustantivos que son: previsión
integral, intervención oportuna y control de riesgos. En caso
de desastres naturales las líneas de acción que se establecen
son: atención médica y psicológica, vigilancia
epidemiológica activa y sanitaria, saneamiento básico,
control de vectores y promoción de la salud.
Aseveró que a nivel local las diferentes etapas y acciones desarrolladas
para la atención de un desastre continúan siendo las mismas
a nivel estatal. En algunos fenómenos, como los ciclones, se
puede pronosticar. En estos casos es fundamental la fase de advertencia,
en la cual es necesario estar atentos a las indicaciones de protección
civil; mantener estrecho contacto con la Jurisdicción Sanitaria
(JS) para informar sobre la situación que prevalece en la zona
y notificar en caso de que sea necesaria la evacuación de la
población; fomentar entre ésta el cumplimiento de las
instrucciones de la autoridad de protección civil; continuar
con la promoción de medidas para el autocuidado de la salud;
definir y comunicar a la JS necesidades de medicamentos y supervisar
e informarle sobre refugios temporales instalados.
En caso de evacuar a la población: instalar un módulo
de atención médica en refugios temporales para proporcionarla
de forma universal y gratuita las 24 horas; reportar diariamente a la
JS la morbilidad existente en los formatos establecidos; monitoreo de
cloro residual del agua para uso y consumo humanos; verificar las condiciones
sanitarias de las instalaciones y favorecer la participación
de la población en actividades de saneamiento del refugio temporal.
Finalmente, la doctora González aseveró que los desastres
culminan con las etapas de impacto y recuperación.
Presentación de
alumnos
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Durante el intercambio
de experiencias con ex alumnos, donde participaron Victor Camacho, Cinthya
Verver Moreno, Nelson W. Barbosa Arzola, Gerardo Francisco García
Rañón, Janeth Páez Jiménez y Emila Sánchez,
todos coincidieron en que a lo mejor no para todos es perfecto el servicio
social, pero que a ellos les dejó grandes experiencias.
En este sentido Janeth Páez Jiménez, quien realizara su
servicio social en la unidad médica rural 152 de Cieneguita,
municipio de San Dimas, estado de Durango, y premio Sedesol “Jóvenes,
vamos por México”, comentó que lo recibió
porque las autoridades del estado aprobaron su labor. “Creo que
fue suerte y me favoreció el apoyo del presidente municipal,
mi enfermera, la señora María del Refugio Frías
Cisneros y su esposo. Durante mi estancia logré la construcción
de un Centro para Adolescentes, porque conseguí que los jóvenes
se integraran a las pláticas y participara la comunidad, por
eso me dieron el premio.
“Fue una experiencia bonita, algunos compañeros dicen que
como experiencia no les gustó el servicio social o les fue mal,
yo fui con muchos sueños y todos los cumplí. Llegué
con idea de hacer muchas cosas porque sentí que era mi clínica.
En determinado tiempo no todo fue tan lindo y llegas a decir basta,
pero uno no puede decir no, porque ya acostumbraste a la comunidad y
creo que lo que más importa es el poner en alto a la UNAM.”
Finalmente, Víctor Florentino Camacho Trejo, quien realizó
su servicio en la comunidad de San Antonio el Grande, municipio de Huehuetla,
estado de Hidalgo, y acreedor al premio “Gustavo Baz”, comentó
que el portar y mantener este premio es un compromiso con una comunidad,
y de que el compañero que continúe en esa plaza realice
un mejor trabajo del que ya se hizo.
La labor que realizó Víctor fue consolidar la infraestructura
dentro de la comunidad, obras públicas de drenaje, escaleras
y una escuela de telebachillerato. Todo ello con el apoyo de la comunidad.
“Cargar con la responsabilidad de un premio universitario es un
compromiso y una labor de orgullo ante las comunidades; a pesar de que
ha aumentado la gran cantidad de pasantes de las escuelas nacionales,
la UNAM ocupa siempre las partes lejanas de la ciudad y es un compromiso
el enfrentarnos a nuevos retos y exigencias para lograr mantener el
honor de la Universidad; ellos confían en nosotros y prefieren
tener pasantes de la UNAM que de sus universidades estatales, porque
saben de nuestra calidad académica y entrega, porque venimos
de una universidad que comparte muchas experiencias. La UNAM, a pesar
de todos los problemas que le imponga el crear jóvenes con conciencia
social, es muy importante, porque llegas entendiendo la verdadera realidad
de la comunidad, la marginación, y los problemas políticos,
religiosos y sociales. Muchas veces durante las clases y la carrera
los maestros comentaron cómo fue su servicio y cómo solucionaron
el problema, ahora es mi labor trasmitir a mis compañeros mis
experiencias para que sea más rápida su llegada al éxito”,
concluyó.
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