Gaceta Facultad de Medicina UNAM
10 agosto 2006
Facultad de Medicina UNAM

CONFERENCIA MAGISTRAL

Avances en el estudio de Lacazia loboi

  • Dictada por el doctor Leonel Mendoza, del College of Natural Science. Medical Technology Program, Michigan State University, Lansing, EUA
El doctor Leonel Mendoza presentó los avances de sus estudios

Desde 1996 el doctor Leonel Mendoza comenzó a estudiar la enfermedad conocida como lacaziosis (se caracteriza por lesiones paraqueloides de la piel y los tejidos subcutáneos), y el microrganismo causante: Lacazia loboi (L. loboi), del que ahora se conoce un poco más después de 70 años de su descubrimiento.

El experto dio a conocer que su grupo de investigación en el laboratorio de la Universidad de Michigan, mediante diversos estudios pioneros y con la utilización de herramientas moleculares, ha avanzado en el conocimiento filogenético de ese organismo patógeno. Encontraron, entre otros hallazgos, que se trata de un hongo dimórfico Onygenales, de la familia Ajellomycetaceae.

Al inicio de sus trabajos, sabía que este agente infeccioso, al igual que muchos microrganismos, no se puede cultivar, lo que dificulta su estudio y, por lo tanto, su clasificación; esto explica por qué originó una gran controversia entre los científicos, reflejada en los distintos nombres con que este patógeno ha sido conocido.

El primer caso fue encontrado por el doctor Jorge de Oliveira Lobo, en Pernambuco, Brasil, y aunque no sugirió un nombre específico, esta enfermedad se conoció a partir de ese descubrimiento. El padecimiento está distribuido en toda Latinoamérica, pero es Brasil donde se producen más casos.

 

Datos históricos

  • En 1936, el doctor Jorge de Oliveira Lobo describió el primer caso en Brasil.

Con el tiempo el microrganismo fue calificado con diferentes nombres:
1940 Glenosporella.
1941 Blastomyces.
1943 Glenosporosis amazonica.
1944 Paracoccidioides loboi.
1952 Blastomyces loboi.
1956 Loboa Ioboi.
1958 Lobomyces loboi.
1999 Lacazia loboi.

Actualmente a la enfermedad que produce Lacazia loboi se le conoce como lacaziosis.

Se sabe que L. loboi puede infectar a humanos y delfines, dijo el doctor Mendoza durante la conferencia magistral titulada “Estrategias moleculares para el estudio de Lacazia loboi”, realizada el pasado 16 de junio en el marco del VI Diplomado de Micología Médica “Dr. Ernesto Macotela Ruiz”.

Además resaltó que este organismo recibió, en diferente años, un nombre distinto, entre ellos: Glenosporella loboi; Blastomyces brasiliensis, Glenosporopsis amazonica; Paracoccidioides loboi; Loboa loboi; Lobomyces loboi; de igual manera se generaron diversos nombres con los que la enfermedad fue ampliamente conocida, dentro lo cuales lobomicosis fue el más usado, pero fue en 2005 que se puso fin a la controversia al denominar a la enfermedad lacaziosis, con relación al género del agente etiológico ya reconocido como Lacazia loboi en 1999. Actualmente los únicos nombres correctos son lacaziosis y “enfermedad de Jorge Lobo”.

Este padecimiento de la piel y los tejidos subcutáneos no es letal y es generalmente de evolución lenta, hay reportes de pacientes con lacaziosis por más de 40 años. Existen cuando menos cinco manifestaciones clínicas, incluida la lesión típica paraqueloidal: infiltrativa, gomosa, ulcerada y verrucosa. Algunos pacientes pueden presentar dos o más de estas lesiones, incluso una forma macular.

Después de esta explicación, el investigador describió el procedimiento que siguió junto a sus colaboradores para descubrir que L. loboi posee características propias, pero es hermano filogenético de Paracoccidiides brasiliensis (P. brasiliensis) que, a su vez, está atado al grupo formado por los hongos dimórficos clásicos: Blastomyces dermatitidis e Histoplasma capsulatum, en la familia Ajellomycetaceae.

Para llegar a este conocimiento mediante estudios moleculares hicieron el árbol filogenético con secuencias del ácido desoxirribonucleico (ADN) de L. loboi y P. brasiliensis. “Nuestra estrategia fue obtener primero muestras del microrganismo, las cuales son difíciles de conseguir”, entonces, decidieron obtenerlas de pacientes en Brasil, y luego se tomó tejido, se hizo aislamiento del ADN y se aplicó a un modelo de laboratorio (ratones) para poder comenzar los estudios moleculares.

Lacazia loboi, es un hongo que infecta a delfines y humanos. Aún se desconoce cómo ocurre la infección.

Importantes han sido ya los resultados preliminares de esas investigaciones: Sugieren que un ancestro de L. loboi podría haber dado origen al género Paracoccidioides, pero que L. loboi adquirió características propias y no de ese género; ha iniciado una revolución filogénetica en el género Paracoccidioides y posiblemente en todos los demás organismos de la familia Ajellomycetaceae.

Con estos hallazgos y las consecutivas investigaciones esperan aclarar cómo es que los delfines y los humanos se infectan. Los resultados arrojan que, dado que todos los miembros dimórficos en la familia Ajellomycetaceae se adquieren por inhalación, se especula que L. loboi podría ser también aeróbico, con diseminación a la piel posterior a la inhalación; sin embargo, la vía traumática no puede ser descartada, ya que la infección experimental ha sido posible después de la inyección de levaduras viables de L. loboi en el tejido subcutáneo de ratones y humanos. También se cree que la especie infectante sea diferente entre delfines y humanos.}

Además de describir otros estudios que han permitido ahora llegar a ese conocimiento, en sus conclusiones el investigador aseguró que mediante la metodología que aplica se ha demostrado que podrá ayudar a resolver incógnitas epidemiológicas, inmunológicas, diagnósticas y de tratamiento para este patógeno incultivable.

Al finalizar la conferencia, el doctor Leonel Mendoza recibió un diploma que lo acredita como profesor asociado del VI Diplomado de Micología Médica 2006, organizado por el doctor Rubén López Martínez, jefe del Laboratorio de Micología Médica.