Gaceta Facultad de Medicina UNAM
10 agosto 2005
Facultad de Medicina UNAM

Seminario Permanente de Salud en el Trabajo

La selección del equipo de protección personal, un tema dentro y fuera de la Ley de Trabajo

“La selección del equipo de protección personal es muy compleja, requiere de actividades múltiples, estudios de gabinete, clínicos, anatómicos, vías de ingresos, tiempos de exposición, factores de protección, una selección adecuada, además de adiestramiento y comprobación del uso apropiado del mismo”, afirmó tajantemente el ingeniero Genaro Escobar Márquez, quien participó en la 62ª sesión del Seminario Permanente de Salud en el Trabajo.

Durante este evento realizado en el auditorio “Fernando Ocaranza”, titulado “Equipo de protección personal. Selección y tiempo estimado en la vida de los cartuchos (respiradores)”, el especialista en higiene industrial aseveró que la selección técnica de los equipos de protección personal se hace para poder identificar la forma, el tiempo y la probabilidad de vida de los cartuchos respirables, pues los accidentes y enfermedades demandan a la industria en general cubrir las necesidades primarias.

“Las empresas tienden a contratar personal calificado tratando de llevar a cabo los programas de prevención de las enfermedades de trabajo. Sin embargo, aun en las empresas trasnacionales hay deficiencias que todavía por procedimientos no se pueden cubrir, pero lo más importante es la falta de procedimientos para poder de alguna manera tener un servicio que sea lo suficientemente confiable en calidad. En México —aseveró— carecemos de este tipo de actividades.”

Dijo que la falta de mantenimiento y de estudios ergonómicos conlleva a varios problemas, pues un gran número de maquinaria viene del extranjero y el adaptarlas a los trabajadores nacionales muchas veces no funciona. Todo ello, agregó, lleva a procedimientos inadecuados e impactos que declinan en la falta de cumplimientos y supera los valores de referencia de las normas de la Secretaría de Trabajo y Prevención Social, los cuales pueden conducir a accidentes de trabajo y, desde luego, a enfermedades profesionales.

Mencionó que uno de los principales problemas que ocurren a nivel nacional es no tener claramente establecidas las formas de clasificación de los contaminantes, por lo que agregó: “Si no sabemos distinguir que hay material particulado, líquido, gases, ácidos y vapores, difícilmente seremos capaces de hacer la selección de un equipo adecuado de protección.

“El principal propósito de tener bien clasificadas todas las sustancias es porque, punto uno, todas son diferentes, y punto dos, otras son cancerígenas o cuentan con diferente toxicología y el medio de recolección para su cuantificación también es diferente.”

El también miembro del Consejo Americano de Higiene Industrial y del Consejo de Certificación de Profesionales en Seguridad, ambos de los Estados Unidos de América, pidió se observe que todas las empresas que venden este tipo de equipo nunca piden estudios sobre la situación física laboral en la que se va a utilizar y que, por lo contrario, los responsables de higiene industrial deben establecer objetivos para cada departamento e indicar cuál es el principal problema que genera el material respirable al que estará expuesto el trabajador.

Aseveró que es importante estar conscientes, todas las partes involucradas, de la forma de ingreso de dichas sustancias al cuerpo, pues pueden ser diversas. Las más comunes son las respiratorias, la piel, la mucosa y la digestiva.

Al hablar de otro profesionista que está involucrado en dicha decisión, mencionó que para el ingeniero en seguridad la cifra más importante dentro de un estudio será la de los polvos inhalables, lo que establecerá, asimismo, una estrategia de muestreo. Por otra parte, indicó que esto es muy necesario ante el hecho de que dichas estrategias no están normadas y que se debe contar con más de un resultado para evitar estar sobre el límite permitido. También recomendó evaluar por lo menos cinco veces el mismo lugar para obtener un estándar.

En el caso de los médicos, aseveró que dichas mediciones son importantes para determinar un estado tóxico, y agregó: “Difícilmente el médico realiza dichas evaluaciones, pues cada empresa sabe cuál es el compuesto molecular que está preparando, la distribución de la sustancia y el daño que puede producir.”

Otro elemento que se ha de tomar en cuenta para la elección del equipo de seguridad lo constituyen las horas de la jornada laboral, pues de ello dependerá cada cuándo se tendrá que sustituir el equipo y la efectividad del mismo, ya que las condiciones ambientales también son muy importantes para determinar su efectividad. Dijo el especialista que en México lo más tradicional es usar equipo desechable porque es más barato y no se contemplan la humedad ni los valores de referencia que pueden disminuir hasta en 85 por ciento su efectividad, lo que dependerá también del tipo de trabajo desarrollado.

Por lo anterior, mencionó que aunque la clasificación del trabajo tampoco es clara y precisa, se tiene que hacer para poder comenzar a realizar estudios que conduzcan a un buen desarrollo y una selección de equipo adecuado. Como ejemplo mencionó que los estudios y características existentes en Estados Unidos datan del año de 1943 y todavía son las que se aplican en varios países hasta ahora.

“Bueno, pero cómo podemos saber cuándo cambiar el cartucho, pues no hay otra forma que medir y medir para poder determinar la concentración de las sustancias, cada semana o cada mes, y después, sí cambian las condiciones de concentración, pero no con el propósito de cumplir con la reglamentación, porque esto no es lo que ella pide, esto se hace a nivel investigación interna para tratar de no tener la probabilidad del desarrollo de una enfermedad laboral”, concluyó.