Gaceta
Facultad de Medicina UNAM
25 de abril 1999


Regresar al índice

Asamblea de la comunidad estudiantil de la Facultad de Medicina

 

El pasado 13 de abril, varios estudiantes de la Facultad de Medicina se reunieron en asamblea para discutir diversos puntos relacionados con la reforma del Reglamento General de Pagos.

El acto se llevó a cabo en las escaleras del edificio B, cerca de la entrada principal del Auditorio Raoul Fournier Villada, lugar donde también convergieron profesores, trabajadores de base y representantes del Sindicato de Trabajadores de la UNAM.

El primero en tomar la palabra fue Mario Sánchez, consejero alumno suplente de la Facultad de Medicina ante el Consejo Universitario, quien mencionó que "....en esta dependencia no se ha hablado ni propuesto sobre una posible huelga, ya que no lo veíamos como un camino, siempre nos hemos basado en el diálogo, en querer un diálogo con las auroridades. La huelga no se ha discutido, ni siquiera se sabe por qué se ha estado llamando a realizarla; creo que ni siquiera hay información de por qué se está planteando por parte de la gente que se encuentra en la Facultad, yo creo que antes de decir sí o no a la huelga, hay que discutir el problema, dar una solución y en caso de que la FM se manifieste en contra de la huelga, debemos dar una propuesta alterna."

Para terminar su participación invitó a los presentes a realizar otra asamblea más organizada para decidir cuál va a ser la postura sobre la huelga. "Tenemos que hacer un plan de acción. Debemos recoger una opinión, un consenso y llevarlo al Consejo Universitario, a la Asamblea Universitaria o a cualquier otra instancia."

Posteriormente, Alberto Rojas, consejero universitario alumno de la FM, explicó de manera detallada la forma de gobierno y la estructura orgánica de la UNAM, así como la designación y acciones de las principales autoridades (Junta de Gobierno, Consejo Universitario, Rector y Tribunal Universitario, entre otros). Asimismo, expuso el manejo del presupuesto de la UNAM, del cual resaltó los ingresos extraordinarios que se adquieren por dos conceptos, por aportaciones voluntarias y por los servicios que ofrece la Universidad a particulares.

"El dinero extra que ustedes dan no entra a la Universidad directamente, sino a una asociación civil, Fundación UNAM, que no tiene una relación real con la UNAM. Esta Fundación tiene un pacto con el gobierno federal, en el que por cada peso que ustedes dan, el gobierno da otro peso, después Fundación UNAM determina en qué lo quiere utilizar y lo regresa a la UNAM en laboratorios de cómputo."

"El subsidio del gobierno federal en 1997 equivalía a 93.42 por ciento del presupuesto y en 1999 es de 89.19 por ciento, eso manifiesta que el subsidio poco a poco está siendo disminuido y mermado, tanto por la situación actual que vive el país, como por la política que ha tenido el gobierno de empezar a mermar ese presupuesto para la Universidad.

 

"De toda la Universidad Nacional, la FM es la que tiene el mayor presupuesto; tenemos un presupuesto de 324 millones 891 mil 491 pesos, lo que es equiparable al de la Universidad de Chapingo, o a la del estado de Tlaxcala, lo que quiere decir que tenemos una cantidad de dinero enorme y tenemos una de las peores bibliotecas (sic) de la Universidad. Dentro del desglose del presupuesto total que viene a la UNAM se destina, para infraestructura de la FM, 0.5 por ciento para nivel licenciatura; de las cuotas que pretenden poner, se obtendía 0.57 por ciento del presupuesto total. Lo últmo que han hecho de infraestructura en la FM es el edificio (de investigación), pero esto ya lo tenían contemplado en presupuestos anteriores.

Finalmente dijo: "Se solicitó una reunión con la Cámara de Diputados, con una subcomisión que se formó a petición nuestra, que se llama Subcomisión de Análisis y Revisión de la Ley Orgánica, con la intención de iniciar una discusión al interior de la Cámara de Diputados que contagie a la UNAM sobre las formas de gobierno de la Universidad (sic). Los diputados que conforman esta subcomisión son de cuatro partidos políticos distintos, estuvieron dispuestos a elaborar un plan para una modificación a la Ley Orgánica de la UNAM, evidentemente un plan que nazca de ella y que se lleve como propuesta. Es una propuesta de los consejeros universitarios, pues consideramos que el día de hoy tenemos el problema de las cuotas, tal vez se deroguen, pero en dos o en tres años otro rector va a llegar a ponerlas, o tal vez se ponga otro proyecto, y como están las condiciones de representatividad estudiantil, donde nosotros no contamos para nada, cualquier decisión va a pasar sobre nosotros, el problema real no son las cuotas, no es el pelear por el reglamento, sino que hay que modificar la estructura de cómo se organiza la UNAM, que permita que los estudiantes realmente tengan representatividad en estos órganos colegiados a nivel Consejo Universitario, a nivel Consejo Técnico y de esa manera podremos dar un sobrepeso a las decisiones que tienen en la actualidad."

Más adelante, el doctor Enrique Wintergersten Toledo, profesor de cirugía, comentó: "En el caso del Reglamento General de Pagos no se tomó en cuenta la opinión de la comunidad estudiantil, y mucho menos la de la población mexicana, que son padres, quizás papás de ustedes, o de otros jóvenes que quieren entrar a la UNAM; no se les pidió a esos mexicanos su opinión acerca de esta imposición de las cuotas. Dice el rector que estas propuestas y esta problemática es planteada por los partidos políticos de fuera, que quieren meterse aquí; como todo esto es una serie de preguntas, va la primera pregunta al doctor Barnés de Castro, ¿es realmente intromisión de los partidos políticos aquí en la UNAM o, a) ¿es intromisión de algún ministro del gabinete que quiere tomar su lugar?, b) ¿quién empezó este problema?

"Los pobres de siempre y los empobrecidos de ahora son las antiguas víctimas del sistema explotador y corrupto que corroe y arruina el país; los ricos de siempre, los enriquecidos de ahora, puede que sí o no sean los victimarios de los pobres, pero sí podemos asegurar que son los cómplices del sistema gubernamental y en ese engranaje sin consuelo que los alivie algún día, serán también las víctimas. Es la gente, el ciudadano, el campesino, el obrero, el profesor sin esperanza y el profesional qu debe mandar la abolición del Reglamento General de Pagos, qué bueno que ustedes tienen voz por ellos, pero son los que están afuera, porque de su bolsillo va a salir el pago de las cuotas, fue una estrategia inteligente a medias, y bien pensada, a medias, para que la oposición fuera menos sólida."

Por su parte, al hacer uso de la palabra un representante del Sindicato de Trabajadores de la UNAM, señaló que "la Universidad, como institución, es el espacio generador de cultura e investigación en donde se forman los profesionistas que de manera permanente dirigen los destinos de este país. La primera pregunta que nos hemos hecho es si la Univesidad ha respondido a las necesidads o problemas nacionales, solamente es una fábrica de desempleados; para nosotros, falta mucho por hacer en lo que se refiere a la UNAM como institución.

"La Universidad del futuro debe ser distinta a la que hoy tenemos, replantearla y redefinirla es una necesidad impostergable, cuando hablamos de esto, queremos decir que es necesario replantear su estructura administrativa y académica. Estamos pensando en una Universidad dinámica, flexible y moderna; para que esta Universidad pueda tener cabida y dé fruto es necesario que cambie fundamentalmente su estructura en la toma de decisiones.

"El papel de los universitarios debe ser amplio y responsable, porque están representando a la sociedad civil, donde las decisiones que tomen deben ser valoradas y reflexivas, porque éstas pueden afectar o engrandecer no solamente a la Universidad sino al país entero. Recuperar a la UNAM tiene que ser una tarea responsable, porque lo que hay que recuperar es su sentido crítico y propositivo, pero, sobre todo, su carácter social; hoy cada vez obsevamos con tristeza que en esta Universidad ingresan cada vez menos hijos de trabajadores campesinos.

"Esta Universidad debe realizar una agenda, donde autoridades, trabajadores, estudiantes, académicos e investigadores se pongan de acuerdo, si no es así, no lograremos que la UNAM salga adelante, para lograr una reforma integral de la máxima casa de estudios. Es cierto que el Consejo Universitario, el máximo órgano colegiado de la Universidad, no es representativo, y por lo tanto, las tomas de decisiones no son a veces las más indicadas para la Universidad. Sus órganos colegiados, sus academias y claustros, tienen que recuperar ese sentido original, al igual que la Universidad debe recuperar aspectos como: su autonomía, libertad de cátedra su libre examen, así como su carácter público y gratuito.

"Creemos que la única forma de poder arribar a consensos es a través de un diálogo real y respetuoso, no podemos llevar a cabo un diálogo en instalaciones inadecuadas, hay espacios que son de los universitarios y ése es un aspecto que la Universidad debe reconocer."

 

Un miembro del grupo Deber Universitario, leyó un comunicado de los consejeros de la Facultad de Medicina, el cual dice: "Los consejeros alumnos hemos fallado y defraudado a nuestra comunidad, a quienes con su voto depositaron su confianza en nosotros, debemos reconocer que ni los consejeros técnico y universitario fuimos capaces de recabar el punto de vista de los estudiantes acerca del Reglamento General de Pagos de una manera oportuna; es evidente que desde el inicio del problema nos pronunciamos a los extremos: los consejeros técnico a favor de las cuotas y los consejeros universitarios en contra, solicitando su derogación, propiciando así una división entre universitarios. El problema es que esta situación ha llegado a un punto extremo, convocando a una huelga estudiantil que pudiera tener serias repercusiones; no es justo que un grupo extremista solicite a los estudiantes aceptar un Reglamento de Pagos que no les convence, tampoco es justo que otro grupo extremista les solicite poner en riesgo su ciclo escolar para alcanzar sus objetivos; también hay que reconocer que la Rectoría ha tenido errores y aciertos. Por lo tanto propongo no caer en el juego de las dos partes en conflicto, vamos a dejar los extremos, los invito a hacer propuestas de reforma a través del Consejo Técnico de la Facultad para no aceptar el Reglamento General de Pagos actual, pero tampoco arriesgar nuestro ciclo escolar con una huelga; en pocas palabra, hagamos una propuesta de universitarios trabajando juntos y olvidemos nuestras diferencias."

Finalmente, el doctor Luis Delgado Reyes, profesor de Anatomía, dijo: "Deberíamos ocupar las instalaciones adecuadas para analizar los problemas presentes. Existen ideas muy diversas, por un lado vemos que la autorización del cambio de cuotas se presenta después de que el Fobaproa es autorizado y entonces el Estado tiene que ver de dónde recupera la reducción del presupuesto a nuestra Universidad.
El rector asume una decisión unilateral sin tomar en cuenta la opinión de la comunidad universitaria, decide cambiar el Reglamento de Pagos. Todos estamos conscientes de que los 20 centavos que se pagaban son injustos, pero estamos en contra en la forma en que se llevó a cabo este Reglamento. En lugar de ser un rector de la Universidad quiere ser un rector que escucha las decisiones de un gobierno que tiene que saldar sus deudas. Entonces, el pueblo tiene que pagar todos los errores, entonces debemos ser conscientes de la situación del país, y de que la Universidad siempre será una mente joven que puede sacar adelante este país. Los invito a que analicen la forma en la que podemos ayudar a nuestra Universidad."