Clausura del Primer Congreso sobre la Investigación en Facultades y Escuelas
Durante la última ponencia del Primer Congreso sobre la Investigación en Facultades y Escuelas, en el auditorio “Raoul Fournier” de la Facultad de Medicina, el titular de la misma, doctor José Narro Robles, destacó la responsabilidad y obligación de la dependencia en la formación de médicos con “alto sentido humanístico, una sólida preparación académica y un espíritu científico inquisitivo”, además de un compromiso social que les permita, mediante la organización sistémica y la evaluación de los procesos diagnósticos y terapéuticos, promover cambios y mejoras en la salud de la población. Durante el evento, realizado el pasado 18 de marzo, resaltó el orgullo de la comunidad, que ha sido semillero de destacados investigadores quienes se formaron, surgieron y trabajaron en la Facultad, “núcleos y embriones” que han dado origen a algunos de los institutos, de los cuales “... todos los universitarios podemos sentirnos orgullosos”, y reconoció el caso del Instituto de Investigaciones Biomédicas y del de Fisiología Celular. Con este antecedente, consideró la importancia de ser una dependencia que promueve el juicio crítico en los estudiantes de pregrado y posgrado. Aseveró que la plantilla académica se constituye de cerca de tres mil integrantes de todos los niveles y categorías, y que con su trabajo se desarrolla buena parte de la investigación que se genera en la Universidad, ya que la labor que realizan en los laboratorios locales y en las entidades hospitalarias es, en muchos casos, “buena parte de la investigación que se desarrolla en México”. Asimismo, enfatizó que los productos generados de la investigación comprenden artículos en revistas científicas y capítulos en libros especializados, tanto nacionales como internacionales, libros de texto y de actualización, así como la generación de patentes. El director de la Facultad reiteró la importancia de que el personal sea parte de las principales sociedades y asociaciones académicas en el campo de la medicina y del Sistema Nacional de Investigadores (SNI), ya que 50% de los profesores son miembros, por lo que es una de las entidades académicas que más aporte tiene. Para entender la importancia de este primer congreso, el doctor Narro explicó que 826 miembros del personal académico de facultades y escuelas pertenecen al SNI, uno de cada tres universitarios labora en facultades y escuelas, y sus actividades son importantes en el campo de las ciencias, las humanidades y las ciencias sociales. Por ello, manifestó que esta primera convocatoria “abre una enorme perspectiva al permitirnos entrar en un gran proceso de comunicación, coordinación y articulación de los esfuerzos”, ya que no se pueden entender la tarea y el trabajo de la Facultad, si no es por la vinculación indisoluble en el proceso académico, docente y de investigación. Advirtió que hay nuevos retos, necesidades y posibilidades donde los académicos deben seguir participando activamente para promover la buena investigación en todos los campos del conocimiento, del trabajo y de la organización de los servicios de salud. “Es factible y es posible hacer investigación” y es un compromiso que sea de calidad. Para el doctor Narro existe un reto que es muy claro, “el conocimiento científico no basta para transformar una realidad”, y hay que apostar al desarrollo, aplicación y uso de la investigación, para lograrlo, reconoció necesario: 1) contar con políticas decididas de apoyo a la investigación, 2) seguir formando recursos humanos, ya que “para hacer investigación se necesitan investigadores”, 3) recursos económicos y 4) un ambiente adecuado y espacio para la investigación. Al concluir las actividades de este congreso, productivo en sesiones tanto matutinas como vespertinas, con la participación de un numeroso grupo de académicos, la doctora Rosaura Ruiz Gutiérrez, secretaria de Desarrollo Institucional, manifestó su satisfacción al “constatar los ánimos creativos, espíritu universitario, compromiso académico y conciencia de la importancia que tiene la investigación como pieza angular para el desarrollo del país”. Explicó que las ocho ponencias magistrales, 22 plenarias, 406 ponencias y carteles expuestos a lo largo de esta semana, dieron cuenta del interés, de la capacidad de participación y del hábito de trabajo colectivo que distinguen a los universitarios, lo que constituye un invaluable testimonio de los actores de la investigación que se realiza en escuelas y facultades, sobre las condiciones en que se desarrolla, tendencias, obstáculos y prioridades más significativas. Habló de la importancia de los profesores que con motivación intelectual y sentido pedagógico trascienden, con valores y aportaciones a la investigación, en tiempos de enorme rezago histórico por su cada vez más reducido apoyo por parte del gobierno federal. Señaló que gracias a las reflexiones de quienes enseñan e investigan en las facultades y escuelas, el congreso confirma el liderazgo que sigue ostentando la UNAM en la formación de nuevos tecnólogos, científicos, humanistas y artistas para el desarrollo nacional. Resaltó que “aunque la investigación en facultades y escuelas alcanza niveles de calidad y producción comparables, y en algunos casos superiores, a la que se realiza en centros e institutos, nunca ha sido incluida en el marco jurídico universitario, ni justamente reconocida. “Los obstáculos que enfrenta la investigación en facultades y escuelas no puede resolverse si no es por medio de una reforma estructural de la que es punto de partida el congreso”, y precisó que dentro de los principales planteamientos, es importante la preparación de estudiantes con pensamiento creativo, innovador y crítico que “reafirma la necesidad de que la investigación se realice en facultades y escuelas, pero también muestra la importancia de que los centros e institutos se involucren y se comprometan, no sólo en el posgrado sino también en la licenciatura”. Luego de los puntos de vista planteados por casi 700 participantes, destacó la necesidad de un programa institucional que ofrezca un marco general e integral de organización, coordinación y apoyo a la investigación en escuelas y facultades. Informó “la posibilidad de aprovechar el potencial de excelencia existente a través del diseño de políticas de planeación y vinculación de la investigación de facultades y escuelas con centros e institutos, y la pertinencia de tipificar una figura única de docente-investigador”, así como la modificación del estatuto de personal académico. Enfatizó que el llamado más importante es a “incrementar las oportunidades de realización de proyectos vinculados con diversos sectores de la sociedad, y de arraigar a jóvenes profesores investigadores que en el futuro enriquezcan la planta académica de la UNAM”. Asimismo consideró que el incremento en los acervos hemerográficos, la promoción de intercambio académico, la creación de planes permanentes en la evaluación de la investigación en escuelas y facultades y la inserción formal de los estudiantes en proyectos, constituyen otra parte importante de las propuestas. La titular de la Secretaría de Desarrollo Institucional asumió como tarea prioritaria “impulsar, gestionar y favorecer las acciones encaminadas a satisfacer las necesidades y propuestas que se han expresado por medio de este fértil y productivo diálogo”. Afirmó que “la investigación constituye una aportación invaluable al desarrollo de la sociedad, contribuye al enriquecimiento permanente de nuestra concepción del mundo y guía de ese modo nuestras elecciones y decisiones a largo plazo; por ello, es necesario asegurar las condiciones para que el ejercicio de la investigación propicie el avance del conocimiento, eleve el nivel académico de los estudios que ofrece la UNAM y permita a la sociedad el acceso a sus productos” afirmó. La especialista reiteró que el doctor Juan Ramón de la Fuente, rector de la Universidad, “concibe el fortalecimiento de la investigación como una de las actividades centrales de la reforma académica de la UNAM” y que el congreso constituye el primer paso en este sentido. Por ello, explicó que las autoridades universitarias van a trabajar en la revisión de los aspectos legales, la gestión de recursos y los apoyos a la difusión de los resultados de la investigación que se realizan en las diferentes facultades y escuelas, así como en dar continuidad a este congreso, debido a su éxito, importancia y trascendencia. Reconoció que la experiencia que ofrece el diálogo, la confrontación de perspectivas, el trabajo colectivo y la cooperación, significan la base para el fortalecimiento de la investigación. Por su parte, el licenciado Enrique del Val Blanco, secretario general de la UNAM, manifestó que los resultados de esta semana de trabajo tendrán consecuencias en la reforma del marco jurídico y legal para establecer el papel fundamental de la investigación que se hace en facultades y escuelas. Enfatizó que lo más importante son los recursos económicos: “el incremento de la investigación requiere de apoyos adicionales y para ello, el rector ha comprometido y comprometerá recursos para que se desarrolle la investigación en facultades y escuelas”. Concluyó que la mejora y modificación del marco jurídico legal y los recursos económicos podrán asegurar la investigación en escuelas y facultades, y este congreso fue la base para incrementar el desarrollo de la investigación en el país. |
|||||||||
