Gaceta Facultad de Medicina UNAM
25 abril 2005
Facultad de Medicina UNAM

Académica de la Facultad de Medicina galardonada en Tamaulipas

  • Recibe el reconocimiento la QFB Yolanda Saldaña Balmori, profesora del Departamento de Bioquímica con 40 años de servicio
La doctora Yolanda Saldaña durante la entrevista

En ceremonia efectuada el 31 de marzo pasado en el Congreso del Estado de Tamaulipas, la química farmacéutica Yolanda Saldaña Balmori, académica de la Facultad de Medicina, recibió la Medalla al Mérito “Luis García de Arellano”, la cual se entrega para honrar a las mujeres y hombres tamaulipecos que se han distinguido por sus servicios a favor del Estado de Tamaulipas, de la patria o para la humanidad.

En el recinto oficial del Poder Legislativo de Tamaulipas, en sesión solemne, presidida por el gobernador del Estado y en presencia de la coordinadora general de los diputados y del presidente del poder judicial del mismo, la galardonada recibió diploma, medalla y la inscripción de su nombre en el Muro de Honor del Congreso, por servicios prestados a la humanidad en el campo de la medicina farmacobiológica.

La química Yolanda Saldaña Balmorí, es originaria de Tula, Tamaulipas; realizó estudios de química farmacobióloga, en la Universidad Autónoma de San Luis Potosí y se graduó en octubre de 1963; un año después, viajó a la ciudad de México para continuar con un posgrado en Bioquímica en esta Universidad Nacional Autónoma de México; actualmente es candidata a doctora en Bioquímica por la Facultad de Química de la UNAM.

Desde 1965 comenzó su carrera docente en la Facultad de Medicina; es decir, cuenta con 40 años en la docencia y en actividades de investigación básica y de difusión de la cultura; sobre estos asuntos habló Yolanda Saldaña Balmori, durante una entrevista realizada en su laboratorio del Departamento de Bioquímica.

Se trata de una mujer madura, que los años hacen ser más activa; en su rostro se deja ver la sensibilidad, aunque en su voz y pensamiento hay firmeza, decisión y orden, que se descubren en la charla sostenida para la Gaceta.

Investigación

Desde sus inicios en la FM, participó en diversos proyectos de investigación científica y debido a su organización familiar, sus actividades dentro del Departamento de Bioquímica cambiaron por su participación en la administración docente.

Al respecto platicó que en la época que el jefe del Departamento era el doctor José Laguna, se creó la sección de Enseñanza (hoy Coordinación) donde participó junto a los profesores Guillermo Álvarez Llera y Magdalena Carrillo, en la coordinación de exámenes, cursos, apoyo de material y elaboración de elementos didácticos, entre otras actividades.

Años después se incorporó al equipo del doctor Enrique Piña, en un proyecto sobre el efecto que tienen algunos medicamentos (antinflamatorios no esteroideos) sobre el daño que ocasiona la ingesta de etanol, tanto en ratas como en humanos; los resultados se han publicado en revistas especializadas nacionales e internacionales.

Además ha participado en 11 proyectos, cuatro relacionados con la investigación educativa y uno de ellos, aprobado recientemente, por el que recibió un donativo económico del Programa de Apoyo a Proyectos Institucionales para el Mejoramiento de la Enseñanza (PAPIME) de la Dirección General de Asuntos de Personal Académico.

De este proyecto que está iniciando, denominado “Fomento a la Enseñanza de la Bioquímica en México”, explicó que uno de los objetivos es convencer a los profesores de esa materia de que su labor en el aula forme parte de una investigación educativa: es decir, comience por identificar a la población, para saber sus intereses y capacidades de aprendizaje y en función de eso, ofrecerles los contenidos de la materia con los métodos apropiados y evaluarlos, si no hay avances regresar y adecuar el método para que el estudiante aprenda, finalmente se analiza la parte que le corresponde si el aprendizaje no se diera satisfactoriamente.

La primera fase de su proyecto inicia con la invitación a profesores dispuestos a modificar su estilo de impartir cátedra para incidir en el aprendizaje de la bioquímica, a fin de que el conocimiento aprendido le sirva al alumno para el ejercicio de su profesión y, sobre todo, dijo, “me interesa que se redignifique la enseñanza de la bioquímica y reforzar el papel del profesor, no sólo como dador de clases sino como formador de personas”.

Docencia

En docencia ha impartido cursos a lo largo de 40 años, tanto en pregrado como en progrado, ya sea de bioquímica o de ciencias afines y ha sido responsable de 75 cursos en licenciatura en la FM, así como de 14 cursos en diferentes posgrados de la UNAM.

Actualmente imparte la materia de bioquímica y biología molecular, explica que como profesora exige buen comportamiento, les prohíbe introducir comida, bebidas y celulares en el salón de clases, porque “no sólo deben estar atentos o asistir para escuchar una cátedra, ya que los profesores no somos informadores, sino formadores”; les enseña la precisión del tiempo: es decir, su un tubo de ensayo tiene que estar en baño de hielo por siete minutos, pues que sea preciso el tiempo, también les exige que aprendan a conocer volúmenes y distancias, porque muchas veces desconocen a que equivale un mililitro”.

En todos los años de docente Saldaña Balmori a reunido un sin número de recuerdos; indica que en ocasiones algunos de sus alumnos, tiempo después, le comentan que gracias a su clase aprendieron adicionalmente a ser ordenados en todo, hasta en la vida. “Yo me siento muy enriquecida al dar clases, les aplicó muchos exámenes, pido tareas que los estudiantes saben que reviso y pretendo convencerlos de que el examen debería ser un evento deseable porque es un parámetro para saber cómo avanzan en su aprendizaje y a quienes lo requieren, les ofrezco apoyo”.

Sin embargo, pese a los esfuerzos de maestros como la entrevistada, “la materia de bioquímica tiene una alto índice de reprobación en esta Facultad de Medicina, porque es una ciencia, hasta cierto punto, abstracta y muchos de los estudiantes no tiene ese nivel”, explica la profesora, además de recordar que en todo el tiempo que lleva en el Departamento de Bioquímica la preocupación ha sido cómo ofrecer el conocimiento para que el estudiante tenga un mejor aprendizaje.

Motivada por esa necesidad ideó una serie de crucigramas que desde hace cinco años se incluye trimestralmente en la Revista de Educación Bioquímica (REB), en la sección llamada CRUCIBIOQ; estos crucigramas, uno diferente cada vez, han servido de apoyo a la enseñanza tanto en universidades del país como de algunas universidades latinoamericanas y también los utiliza como parte de los exámenes que aplica a sus alumnos.

Difusión

En lo que se refiere a la difusión de la cultura, recuerda que en 1974, ante el aumento de la matrícula estudiantil en la Facultad de Medicina y la improvisación de profesores para cubrir esa demanda, el entonces jefe del Departamento de Bioquímica, profesor emérito Enrique Piña Garza y un grupo de colegas pensaron en actividades para reforzar el contenido académico de los mismos, y de ahí surgió el Taller de Actualización Bioquímica, del cual se hizo cargo los primeros 16 años; al quinto año de realizar esta actividad se comenzó a publicar el Mensaje Bioquímico, del cual la química editó, paralelamente a la organización de las reuniones, los primeros 12 volúmenes de la colección; cabe señalar que se elabora anualmente para ser distribuido entre los asistentes al Taller con el contenido de lo que habrán de ser las conferencias de la reunión; tanto el Taller como el Mensaje Bioquímico continúan realizándose hasta la fecha, ahora en manos de otros profesores y con la participación de profesionales en el campo de toda la República Mexicana.

Con el principio de conectar a los profesores de bioquímica del país y reforzar, dentro de lo posible, la formación de los del área, se creó el Boletín de Educación Bioquímica, donde comenzó a participar como coordinadora editorial, por 11 años, esta revista recientemente cambió su nombre por el de Revista de Educación Bioquímica (REB), y actualmente tiene 23 años de circular; su participación hasta la fecha es como editora fundadora.

En 1990 Saldaña Balmori y otros profesores fundaron la Asociación Mexicana de Profesores de Bioquímica A. C.; su primer presidente fue el doctor Enrique Piña y el órgano de comunicación de la misma es la REB. Actualmente es presidenta por segunda ocasión, toda vez que lo había sido de 1993 a 1996.

La doctora Saldaña Balmori ha recibido varias distinciones del Centro Biográfico Internacional de la Universidad de Cambridge, en Inglaterra: Certificado de estar incluida en el “2000 Outstanding of the 21st Century“, por su contribución en el campo del estrés oxidativo, en marzo de 2002 y en abril de 2004 por su contribución en el campo de radicales libres y educación bioquímica, por eso méritos, un año antes, con el diploma “2000 Eminent Scientists of Today-First Edition”. Este año, en el mes de abril recibió el certificado “Top 100 Scientists 2005” por el desarrollo en la educación bioquímica.

Además recibió, en mayo de 2002, diploma otorgado por American Biographic Institute, con sede en Raleigh, Carolina del Norte, USA, como “A Great Minds of the 21st Century” (Una de las grandes mentes del siglo 21), debido a sus méritos como profesora e investigadora; adicionalmente, esa misma institución le otorgó el diploma “Una de las grandes Mujeres del siglo 21”, fechado en 2004.

Con el más reciente reconocimiento que Yolanda Saldaña recibió de su estado natal, las actividades laborales adquieren nuevos ritmos, y se encuentra muy motivada a seguir trabajando en lo que le gusta, dijo al concluir la entrevista.