Seminario
El Ejercicio Actual de la Medicina

Acta de la reunión del grupo de trabajo “El Ejercicio Actual de la Medicina”, celebrada en la sala de juntas de la División de Estudios de Posgrado e Investigación de la Facultad de Medicina el viernes 26 de Marzo de 2004.

Regresa

El Dr. Octavio Rivero cedió la palabra al Dr. Rafael Álvarez Cordero para la presentación del trabajo: “EL MÉDICO, LA MEDICINA Y LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN”. Al terminar la lectura solicitó a los presentes, comentarios en relación al trabajo del Dr. Álvarez.

Dr. Fernández Varela: Yo suscribo letra por letra, todo lo que dice este documento del doctor Álvarez Cordero; ha sido una preocupación también mía muy central desde que estuve en la CONAMED, porque era un problema de todos los días y ahora existen algunas otras cosas que se van a anexar a estos problemas; sé esta revisando la política farmacéutica del país, estoy en un grupo que la esta revisando compuesto fundamentalmente por personas de la industria químico-farmacéutica, hay algunos funcionarios públicos también y a mí me llamaron para conformar este grupo y ahí hay cosas que me parece que deben meditarse muy bien, lo que se pretende, –y hay una gran insistencia inclusive me parece que de las propias autoridades de salud–, es que los medicamentos que aparecen en los grupos que solo pueden ser expedidos con receta –pero que todo mundo los consigue sin ella– y que en este momento por la ley de publicidad que se tiene al respecto y por los efectos para la salud esta prohibida y no pueden ser publicitados de ninguna manera, ahora sé esta proponiendo que sí se publiciten, con una serie de reglas y controles para que se aproveche ahí el momento de la publicidad para hacer educación para la salud sobre el padecimiento etc. etc. Esto creo que se hace en los Estados Unidos, esta prohibido en Europa en general y tiene sus bemoles, hay que meditarlo, yo me cuestioné ante el grupo diciendo ¿qué se gana con esto?, ¿cuál es la razón de esta situación?, se me dijo que la ganancia es que puede ser un vehículo educativo, la razón no me la supieron dar, sin embargo parece que hay alguna cosa y a la mejor yo estoy paranoico pero me lo imagino porque parece ser que hay cierta presión de los medios de publicidad y no tanto de las empresas farmacéuticas; note que los de Canifarma dicen: “nos da igual pero todos parejos, si se puede todos, si no se pone no nos afecta”, entonces dice uno: ¿por qué entonces hay interés de meter esto?. Han perdido mucho dinero las empresas publicitarias al no poder anunciar tabaco y a cambio de esto parece ser que se les esta ofreciendo una nueva fuente de ingreso a través de publicidad de medicamentos, que son controlados por decirlo de alguna manera, pero a mí esto me parece peligroso y viene muy a cuento de este trabajo, por eso se los platico. Luego la otra parte, lo que sí esta permitido en este momento que es la publicidad de los medicamentos de libre venta, en esto si se puede hacer publicidad, desde luego con un reglamento muy ajustado que me parece muy bien hecho, sin embargo lo que dice el artículo de Rafael es cierto, no se ciñen a esto y hay anuncios totalmente fuera, ofreciendo curaciones de cosas que no curan etc. etc. y volvemos a cuestionarnos ¿qué esta pasando ahí? porque las empresas farmacéuticas están muy preocupadas sobre todo porque la mayor parte de los anuncios proceden de empresas que no están dentro de la industria farmacéutica seria; Genomma Lab por ejemplo, ellos prometen la curación de quien sabe cuantas cosas, violan el reglamento pero resulta que lo que consiguen de ventas a través de los anuncios es muy superior a las multas, entonces ellos los meten al mercado y una vez que les cobran la multa lo retiran pero ellos ya sacaron una cantidad mucho mayor de lo que la multa implica, lo que quiere decir es que a las empresas publicitarias como la televisión, la radio etc. etc. son a las que se les debería apretar, porque dicen: “bueno esto no es cuestión nuestra, es un anuncio que pone fulanito”, creo que debería haber una responsabilidad compartida, ahí también tendría que avanzarse en este reglamento de publicidad. Finalmente en el párrafo último de la página cuatro simplemente le agregaría un tiempo de verbo diferente, dice que tienen la sartén por el mango porque tienen la información, tienen el tiempo y tienen el derecho, yo creo que no lo tienen pretenden tener el derecho, yo le pondría: “pretenden tener el derecho a sacar conclusiones, hacer juicios, etc.,” si no, da la impresión que si están facultados para ello, simplemente es una observación al respecto.

Dr. Vilar: Yo creo que Rafael nos hizo una buena síntesis del problema, que esta encima de la mesa y que todos los días vemos como se vulneran aspectos de la práctica médica, hay un punto que no se toca y creo que valdría la pena abordarlo, que es el problema del secreto profesional, los medios de comunicación lo vulneran de la manera más fácil. Hemos visto en televisión como un torero después de ser cornado se esta muriendo y lo están entrevistando, hay una falta de respeto a la confidencialidad del paciente, los que trabajamos en hospitales donde de repente se interna un personaje, sean hospitales de gobierno u hospitales privados, vemos como los medios de comunicación vulneran la confidencialidad profesional de los pacientes, este es un problema que no ha sido resuelto, por lo que dicen de que el publico tiene derecho de saber de las figuras publicas, eso es una aberración y también es un problema serio. Otra cosa interesante de todos los medios, es la penetración que tiene la radio, la televisión y los periódicos, hay un sistema de complicidad que es notablemente efectivo para ciertas áreas. Si uno va y se mete a los mercados de los sábados y los domingos en los pueblos, la cantidad de propaganda que se hace a través de merolicos y de venta de medicamentos es impresionante y eso impacta en la población. Hay un famoso merolico, –lo he comentado aquí en esta mesa de discusión–, que anuncia que sus productos están avalados contra las alergias por su maestro el doctor Fernando Martínez Cortés, a este merolico lo he estado buscando en sábados de descanso, su matriz esta en Yautepec, él ha grabado sus discursos y tiene una persona empleada en los diversos mercados de la zona y en el radio y en la grabación lo va repitiendo, desde luego los medios tienen su influencia en eso también. Otra parte interesante es una curiosidad que tengo siempre que viajo a una ciudad del país, es revisar la sección amarilla y ver como se anuncian los médicos, es una poesía ver como se anuncian en las diferentes especialidades, como se anuncian en páginas enteras con las promesas de las cosas más inverosímiles, –como la restauración de la virginidad– y sobre esto pudiéramos bordar una infinidad de cosas, realmente creo que es una ola que nos esta tapando y que no tenemos como frenar; en el hospital donde yo trabajo hay un alergólogo que se ha anunciado en la sección amarilla y mucha gente se ha quejado en la forma que lo hace, es muy difícil, no le podemos decir ni prohibir nada, es su libertad.

Dr. Álvarez: Yo creo que la acción de la Secretaría en ese sentido ha sido muy irregular, porque como lo comento Fernández Varela las empresas están violando flagrantemente con su publicidad y no sucede nada; yo tengo una página Web, la hice y la presente y un día apareció cancelada porque la empresa no me aviso que faltaba un letrero que decía Secretaría de Salud número tal, por eso de inmediato cancelaron mi página, pasaron como dos meses antes de que la repusieran, en cambio lo que aquí sucede no lo podemos evitar, se necesita mejorar.

Dr. Domínguez: Todo mundo se ha enterado de lo más reciente respecto a la legislación sobre los tatuajes y perforaciones que son un verdadero problema, pero de ahí a que se ejerza acción penal contra toda esa cantidad increíble de puestecitos que están hasta en Perisur, media una distancia muy importante, que bueno que ya salió la norma al respecto, pero no lo van a cumplir a corto plazo de ninguna manera.

Dr. Franco: Primero felicitar al doctor que con su trabajo nos abre los ojos y la puerta hacia un terreno del que sabemos poco y quizá valga la pena explorar más. Es la teoría general de la comunicación y tenemos que enfocarlo en principio al comunicador, los medios de transmisión, el receptor y las barreras que se oponen, con todo ello nos va a dar un campo enorme. Lo felicito por habernos compartido su trabajo; yo propongo que nos pudiéramos dedicar un poco más y trabajar sobre la teoría de la comunicación y con estos aspectos que les prestamos poca atención y que el doctor nos trae a colación para enseñarnos lo importante que es y no menospreciarlo, no hacernos a un lado, no decir “esto no tiene ningún sentido, lo he hecho yo mismo, es una tontería, para que prestarle atención”, cuando yo soy el único que no le presta atención, porque las personas, los que los leen, los que tienen poca información médica o la tienen distorsionada no le prestamos atención; es un capítulo al que el médico no esta prestando la atención que requiere y no le estamos dedicando las horas de estudio ni la interrelación con los comunicólogos para ver por donde estamos y que debemos hacer dentro de la medicina porque es demasiado nuevo para nosotros, sin embargo nos dedicamos en nuestro terreno científico a trabajar arduamente en nuestro campo de acción, pero prestamos muy poca atención a como comunicamos las cosas; lo felicito y creo esto debemos ponernos a leer, al menos yo para meterme más a fondo en este terreno e ir desglosando poco a poco esto para poder llegar a un entendimiento adecuado primero y después quizás hacer propuestas hacia las instancias que pueden hacer algo.

Dr. Pérez Tamayo: Yo estoy de acuerdo con Rafael y con todos los que han hablado, pero me parece que esto es solamente una parte del problema, si no fuéramos médicos y estuviéramos aquí un grupo de arquitectos, pudiéramos hacer exactamente la misma descripción de las dos áreas que se han triplicado, por un lado la falta de cultura de los medios y por otro lado los intereses económicos de las compañías que funcionan un poco alrededor de la profesión, estas son cosas que afectan a otros campos de la actividad humana, en realidad creo que podemos hacer poco para cambiar esto, desde mi punto de vista de raíz, vamos a decirlo, tener un verdadero impacto, porque son fuerzas que se mueven, que afectan a todos los sectores de la sociedad, no solamente a la medicina. En efecto uno ve en la televisión cosas que revela una falta de cultura elemental básica en los llamados comunicadores, esta bien el nombre porque si comunican; yo creo que Rafael tiene razón, pero creo que es parte, la parte que le toca a la medicina, sin embargo esto afecta a toda la sociedad y a todos los niveles. Estaba pensando que cuando voy al mercado los sábados en la mañana, hay un yerbero, –no he desarrollado una amistad profesional con él ni lo consulto, pero lo saludo– que tiene una hierba muy interesante, es una hierba que sirve para limpiar las vías nerviosas y urinarias.

Dr. Rivero: Yo creo que el problema ya esta y es cada vez más grave me parece Héctor que la visión que usted tiene de que la industria no esta muy interesada, es un poco ingenua con todo respeto, yo he leído un artículo reciente de un doctor norteamericano cuyo nombre se me olvida, en donde menciona claramente que es una política, una política norteamericana y durante mucho tiempo los productores de medicamentos norteamericanos vieron la tendencia de introducir los medicamentos a través del médico, para eso es el visitador médico; el visitador médico aparentemente tiene limitaciones para ellos, entonces ya le dieron la vuelta al asunto, en forma tan sencilla como crear en el público la necesidad del medicamento, entonces el paciente se convierte en el propagandista del laboratorio. Vean ustedes lo que esta sucediendo con la promoción de los medicamentos para la disfunción eréctil, en este momento constituye para los laboratorios uno de los mecanismos más grande para ganar dinero, parece que Pfizer ha ganado miles de millones de dólares en todo el mundo a través de un solo medicamento y ese medicamento no fue introducido a través de los médicos, el medicamento fue introducido a través de la televisión con los pacientes, el paciente se convierte entonces en el propagandista número uno del medicamento; un sector muy importante es el de los medicamentos que se venden con receta, teóricamente estos medicamentos para disfunción necesitan una receta, esta es una parte del problema que usted señala muy claramente; el otro problema también muy grave, es el de los medicamentos populares, yo tengo la tentación, –que es lo que mencionaba Pelayo–, cuando me voy de viaje a provincia, me interesa ver los anuncios de televisión de lo que promueven, es increíble, si en México, en el DF lo que se promueve por televisión de medicamentos para bajar de peso, para estar mejor, para la columna vertebral, para el aparato digestivo, para mil cosas, son verdaderamente risibles, en provincia es increíble lo que sucede y de acuerdo con el nivel de educación de la gente en la provincia es el nivel de los anuncios, son dos segmentos muy importantes, el de los medicamentos populares prácticamente no tiene remedio. El otro día logre escuchar en un noticiario de Zabludowsky una entrevista de él con un director de la Secretaría de Salud, aparentemente la persona que esta encargada de regular la promoción en medios y en televisión de los medicamentos populares y él decía que lo que sucede es que sí existe una manera de limitarlos, pero sucede lo que decía Rafael, él decía que las multas son tales que con mucho gusto las pagan porque lo que venden es muchísimo más y siguen metiendo el producto y siguen pagando la multa periódicamente, porque ganan muchísimo dinero a través de la venta, el problema es lo que decía el doctor Pérez Tamayo, el nivel de educación popular de la gente, mientras más bajo es el nivel de educación popular de la gente más fácil es la entrada de todos estos productos, ya sean populares o no y la gran avalancha que se va a venir de los no populares, yo estoy seguro de que se va a aprobar en un consorcio entre los medios y la industria farmacéutica, la posibilidad de anunciar medicamentos teóricamente de receta y la presión contra los médicos para poder recetar estos medicamentos va a ser terrible, yo no le veo salida porque es un problema económico gigantesco contra el cual no existe posibilidad de defenderse.

Dr. Fernández Varela: Recuerdo algunas de las defensas que hicieron los representantes de Canifarma de esta situación, precisamente eso, que con su fuerza de propaganda, sus agentes que visitan médicos, tienen en total cubierto a 40 mil médicos y que a los 130 mil médicos restantes les llegan con un anuncio por televisión y ahí el médico se entera en lugar de esperar a que lo visiten, para ellos era también muy interesante esa parte, pero que no estaban totalmente convencidos, que no tenían demasiado interés en esto, yo creo que es algo que se seguirá discutiendo, pero mucho me temo que va salir porque hay apoyo de las autoridades.

Dr. Kretschmer: Veo en un canal o dos de televisión, que se ha creado un laboratorio de producción de medicamentos con el interesantísimos nombre de Genomma Lab con una insistencia impresionante, ¿quién es Genomma Lab?, ¿alguien sabe?

Dr. Fernández Varela: Es un distribuidor, ni siquiera es un laboratorio, no produce, compra y vende de laboratorios X o Z que tienen un registro de salubridad pero nada más y ellos lo pasan y son quienes pagan la multa de mil salarios mínimos, que son 30 mil pesos que es la multa prevista, son 30 mil pesos que en primer lugar es una bicoca comparado con lo que les cuesta el anuncio, pero aparte si el anuncio lo ponen es porque sacan mucho más de eso, para ellos la multa no importa, ustedes ven como Genomma Lab va variando sus medicamentos, de repente retiran uno y sacan otro, yo creo que ahí lo que se impondría es el cierre de la empresa al seguir violando el reglamento, pero eso no esta permitido y también a la empresa televisiva como yo decía, sí son corresponsables, no pueden decir que no son responsables de este anuncio.

Dr. Sanfilippo: La caja de los productos de Genomma Lab tienen una leyenda que dice que no son medicamentos y que es responsabilidad de quien lo recomienda y de quien lo consume, que ellos no son responsables, ahí hay un dolo muy importante.

Dr. Fernández Varela: En la caja si, pero la propaganda dice: sirve para esto.

Regresa