Seminario
El Ejercicio Actual de la Medicina

Acta de la reunión del grupo de trabajo "El Ejercicio Actual de la Medicina", celebrada en la sala de juntas de la División de Estudios de Postgrado e Investigación de la Facultad de Medicina el viernes 28 de Marzo de 2003.

Regresa

El Dr. Octavio Rivero Serrano agradeció al Dr. José Narro director de la Facultad de Medicina su presencia, quien amablemente se presto a escuchar algunos comentarios en relación a lo que este seminario ha hecho durante 4 años.
Como ustedes ven en la orden del día, he pedido a tres de los miembros del seminario hicieran un resumen sobre los temas tratados, para que al final oyéramos algunas participaciones libres y las recomendaciones e instrucciones sobre la aplicación que pudiera tener el material de trabajo con objeto de participar en la formación de médicos. El primer punto lo abordará el Dr. Miguel Tanimoto.

Dr. Tanimoto: Este grupo se fundó a iniciativa del Dr. Octavio Rivero en el año 97 aún cuando sus actividades se iniciaron en 1998; nos reunimos el cuarto viernes de cada mes desde entonces. Inicialmente el grupo estuvo constituido por 18 personas, todos profesores de la Facultad de Medicina, actualmente el número ha crecido en forma muy importante, tanto es así que esta mañana quiero dar la bienvenida a 2 nuevos miembros, Dr. Luis Alberto Ibarra y al Dr. Marco Antonio Zenteno, que solicitaron integrarse a este grupo. En el año de 98 surgió el primer libro que entrego al Dr. Narro, es una recopilación de las sesiones del seminario durante los primeros dos años, se editó en el año 2000 por la editorial Siglo XXI, contiene siete capítulos, el primero "Estructura Actual de la Medicina"; el segundo "Relación Médico-paciente"; el tercero "La Iatrogenia en Medicina"; el cuarto "Tecnología y Medicina"; el quinto "Población, Salud y Ambiente"; el sexto capítulo "Administración y Medicina" y el séptimo "El Médico y los Valores Humanos". Me puse a analizar el libro y del contenido hago un resumen. Sobresale el capítulo referente a la relación médico-paciente, aún cuando todos los demás capítulos son muy relevantes y lo título "Algunas observaciones inquietantes en relación con el ejercicio de la medicina en México". La medicina ha caído en una crisis de definición de objetivos y los medios para encausarla y los médicos han padecido así mismo una crisis de identidad de valores y sus miras que han minado la nobleza del quehacer médico; el elemento fundamental para lograr una buena práctica descansa en la confianza que los pacientes han depositado en manos de sus médicos tratantes, en la medicina actual existen elementos que no la estimulan sino que por el contrario la coartan, la medicina se ha convertido de un negocio lucrativo alejada de los altruismos de la profesión, aunque en algunos sistemas la situación mercantil recae en la explotación de ambos, el encarecimiento guarda relación con la sobre administración, el uso inadecuado de los recursos tecnológicos de diagnostico y tratamiento; y el ejercicio médico sometido a la presión laboral crónica, las condiciones de trabajo del médico son claramente diferentes de las que existían en épocas pretéritas, en la actualidad tiende a ser un empleado de las instituciones públicas y privadas con serias restricciones de su libertad realizando su trabajo en medio de carencias, e incomodidades, bajo presiones de productividad percibiendo un salario insuficiente que no logra resolver sus necesidades y con la amenaza permanente de padecer demandas y reclamaciones; por otro lado se agrega la exigencia de mantenerse al día en sus conocimientos para poder sostener la competencia ahora deseada, en fin el médico actual se encuentra atrapado en la responsabilidad de tener buenos resultados ante el escrutinio de muchos observadores, no solo de su paciente e independientemente de contar con los recursos adecuados para sostener un desempeño optimo la regulación por pares se hace presente en la atención médica y no solo en la investigación, los consejos de especialidad vigilan que quienes se ostentan como especialistas alcancen los estándares técnicos y éticos que la sociedad requiere, aún cuando a la fecha se ha limitado a la realización de una evaluación curricular y de conocimiento. Entre los médicos generales es posible esperar una regulación similar, el médico actual debe mantener su certificación vigente para poder cumplir con los requerimientos académicos y ésta si bien pretende propiciar una práctica médica más científica ha sido apreciadas por algunos como imperiosa práctica de acumular puntos curriculares, el estímulo académico se ha pervertido al transformarlo en una meta y los individuos trabajan para conseguirlo y no tanto como una verdadera superación personal, de esta manera los médicos se han visto envueltos en conflictos de intereses cuando su preocupación por ayudar al paciente compite con las necesidades económicas, académicas u obligaciones laborales, la imagen pública del médico ha cambiado en relación con la que anteriormente tenía ya que hoy se le identifica como un trabajador de salud en el mejor de los casos, o como un comerciante o burócrata más, por este motivo la relación médico-paciente se ha llenado de desconfianzas mutuas que propician una vigilancia de su actuación por parte del paciente, sus familiares o sus defensores legales; el trabajo en equipo es ponderado como una formula deseable para ejercer la clínica, sin embargo, en las unidades de atención médica con frecuencia los médicos tratantes son distintos en cada nueva cita y los enfermos se muestran incapaces de distinguir el médico tratante, de sus ayudantes o estudiantes; la deficiente integración de los equipos de salud proporciona información diferente y contradictoria, el paciente ha adquirido una mayor conciencia de sus derechos al reconocerse como el principal protagonista del encuentro clínico y defiende su capacidad de autodeterminación, la moderna bioética consagra el principio de autonomía para el paciente competente, ello ha permitido el agrupamiento de organismos no gubernamentales que exigen el respeto de sus derechos y la prioridad de su enfermedad; la transición epidemiológica ha favorecido la acumulación de pacientes con enfermedades crónicas y debemos reconocer que los médicos hemos sido formados bajo el modelo de la enfermedad aguda, en la enfermedad crónica una buena parte de la iniciativa la tiene el enfermo el papel del médico es de asesor y educador bajo la idea de favorecer al propio paciente en su toma de decisiones incluyendo las situaciones inéditas, esto significa un cambio drástico en su actitud en relación con los pacientes: La sociedad se ha vuelto desconfiada de todo lo que huela a autoridad ya sea la sanitaria formal o la que representa el médico, las razones por las cuales la sociedad muestra desconfianza descansan en el hecho de que la medicina no es infalible, los medios de comunicación suelen magnificar los acontecimientos en base a sus políticas mercantilistas, un buen número de profesionistas del ámbito legal se valen del deterioro de las relaciones entre médicos y pacientes y médicos y hospitales para tener mayores ingresos, en ocasiones el mismo profesionista no calificado que a veces esconde intereses no médicos ni humanitarios denuncia a sus colegas, por esta razón cada disposición es sujeta a cuestionamiento, los pacientes y los familiares exigen estar enterados, de tal manera que una buena parte las demandas y reclamaciones ocurren como consecuencia de una deficiente información. El papel de la tecnología moderna es difícil de calcular pero no cabe duda de que ha influido en la relación médico-paciente, la interposición de la máquina entre el médico y el paciente lo ha alejado físicamente del mismo y le ha convertido en un técnico manejador de aparatos, la atención médica ha incrementado sus costos por el uso de tecnología tan compleja como por "el florecimiento del negocio de la salud" que genera utilidades cuantiosas; habría que decir que la economía ha invadido el campo de la salud y esta tiene que ser rentable, las utilidades deben beneficiar a muchas personas y no siempre al médico y su paciente que al final acaban siendo utilizados por sistemas que administran la atención médica no siempre están enfocadas a la calidad; nuestra época ha sido testigo de cómo se ha multiplicado los colchones administrativos sin alcanzar una mayor eficiencia; de necesidades administrativas han surgido muchas normas que no han mostrado ser tan valiosas para los pacientes individuales por ejemplo, la referencia y contra referencia obligadas que interfiere seriamente en las relaciones entre médico y pacientes. De todo lo anterior se desprende la importancia de la relación médico-paciente ya que de sus cualidades depende la efectividad terapéutica y tal vez hasta la supervivencia misma de la profesión médica. Es por ello que la respuesta del gremio médico ha sido la de reafirmarse en los valores que han sostenido a la medicina particularmente en esta época en la que se ven amenazados, se destaca que el papel del médico es dar atención al paciente y que este interés esta por encima de cualquier cosa, pero también la voz de los médicos se tiene que hacer oír puesto que en muchos de los cambios que estamos viviendo en atención médica la opinión de estos profesionistas no ha sido tomada en cuenta, por otro lado los médicos tenemos que entender las nuevas realidades sociales y que los pacientes de hoy en día no necesariamente son como los de otras épocas, tenemos que aprender a escuchar a los pacientes no solo en cuanto a sus síntomas sino en cuanto a su forma de ver la enfermedad y la atención, es necesario reafirmar el papel protagónico del paciente en su relación con el médico e identificar esta como una sociedad o asociación sin el menor de los indicios de antagonismo o enfrentamiento, la formación del médico en torno a la relación médico-paciente es un asunto complejo pues depende menos de los contenidos curriculares que de las cualidades personales de los profesionistas, los médicos han estado profundamente interesados en la calidad de la atención que reciben sus pacientes; este es un pequeño resumen del contenido del primer tomo.

Dr. Rivero: El Dr. Fernández Varela nos hará algunas reflexiones sobre los contenidos del segundo tomo.

Dr. Fernández Varela: El Dr. Rivero me encargo que hiciera para ustedes un relato de los contenidos del segundo tomo del libro "El Ejercicio Actual de la Medicina". Los escritos seleccionados para el segundo tomo se agruparon en tres capítulos de temas fundamentales para el ejercicio de la medicina, el primero trata de la formación de los profesionales de la medicina, el segundo agrupa reflexiones diversas sobre la Regulación de la práctica médica y el último versa sobre aspectos relacionados con la organización de la prestación de los servicios de salud, desde luego ninguno de los temas esta agotado en esta obra, de hecho muchos de los trabajos que se siguen presentando en el seno del seminario versan sobre educación, regulación y organización del ejercicio de la medicina, el grupo solicitó al Dr. Alejandro Cravioto la introducción del libro en su calidad de director de la Facultad como un testimonio de la pertenencia del seminario a la Facultad de Medicina y el reconocimiento al apoyo que la dirección nos ha brindado en el desarrollo de nuestro trabajo. El capítulo sobre educación médica consta de dos artículos, en el primero los doctores Octavio Rivero y Raymundo Paredes analizan la formación de los recursos humanos para la salud partiendo de la base del crecimiento profesional y los esfuerzos para incrementar en la misma medida la cobertura de los servicios de salud y adecuarlos a las transiciones epidemiológicas, abordan cinco factores que inciden en el problema los recursos humanos necesarios para la atención de la salud, los responsables de dicha formación en nuestro país, los recursos formados por profesión, número y perfil de cada uno, la calidad de los médicos y los centros educativos y los retos para el siglo XXI. Los doctores Cravioto, Abreu y la maestra Infante plantean la necesidad de hacer cambios profundos en la formación del médico partiendo de la base que el estudiante que ingresa hoy a la escuela de medicina ejercerá la profesión durante la primera mitad del presente siglo, que se anuncie como una etapa de cambios acelerados en la tecnología informática, electrónica, robótica y de telecomunicaciones, cambios en los sistemas de salud en la patología prevalerte, en las formas de ejercicio profesional, de ahí la necesidad de establecer un perfil para el médico mexicano, promover la calidad de los sistemas de salud y desarrollar un sistema de evaluación tecnológica, proponen enseñar a los futuros médicos adaptarse a los cambios en la patología y en la terapéutica, practicar la actualización continua y evaluar sistemáticamente el proceso de enseñanza aprendizaje; en el segundo capítulo titulado "Regulación del Ejercicio de la Medicina" se incluyeron seis trabajos, el primero desarrollado también por los doctores Rivero y Paredes aborda el secreto médico y el consentimiento bajo información, respecto al secreto médico reflexionan sobre su importancia tanto para el paciente como para la sociedad en su conjunto pero señalando que dicha reserva se ha tornado compleja por la atención pluri personal de la salud y las normas legales que rigen el acto médico, insisten en la necesidad de una legislación clara que proteja al paciente y al médico, discuten ampliamente la naturaleza del consentimiento bajo información y su importancia en el momento actual; otro tema incluido el en capítulo es el "Marco Legal en el Ejercicio de la Medicina", preparado por el Lic. Octavio Casamadrid y un servidor, partiendo de la premisa de que cada uno de los actos del hombre lleva implícitos un conjunto de deberes y la obligación de la reparación del daño causado, dichas obligaciones y las sanciones correspondientes, así como los derechos están plasmados en normas jurídicas que en el caso de los médicos tienen particularidades que se describen y discuten en el texto. Los doctores Pérez Tamayo y Kretschmer en su escrito titulado "Comentarios sobre la Filosofía de la práctica médica actual" analizan una serie de puntos como la transformación progresiva de la medicina hacia una actividad comercial en manos de empresarios y administradores la calidad de los servicios en las instituciones públicas, las recientes leyes sobre la organización y funcionamiento de los seguros médicos de prepago, la inexistente organización gremial de los médicos mexicanos para la defensa de sus intereses y el impacto de la globalización de la economía sobre el gasto en salud; incluye también un estudio sobre Medicina Defensiva en el que los doctores Rivero y Paredes señalan y analizan las causas de esta conducta, los factores que la condicionan tanto del médico como del paciente y el entorno social, se discuten las consecuencias negativas de este proceder y se hacen propuestas para evitar la medicina defensiva al mejorar la relación médico-paciente, mantener a este último bien informado, la actualización del médico, el uso racional de la tecnología y los programas de certificación tanto del médico y unidades de salud como de instituciones formadoras de recursos humanos; el doctor Pedro Rizo analiza la importancia del programa de Certificación de Médicos Generales incluyendo los antecedentes históricos, las bases legales en que se sustenta la práctica de la medicina en nuestro país, la justificación técnica y las ventajas de que exista un sistema integral para la certificación de los médicos generales, se expiden los avances que se ha tenido en México los mecanismos propuestos para efectuar dicha certificación y el proceso que ha de seguir. Los doctores Rivero, Paredes y Tanimoto presentan los resultados obtenidos en el programa de "Certificación de Hospitales" muestran como se estructuro el sistema de evaluación, el número de hospitales sometidos al proceso y exponen lo que puede esperarse de este sistema: En el capítulo sobre la "Organización de la prestación de los servicios de salud" se incluyeron tres temas, el primero desarrollado por los doctores Malaquías López y Luis Durán proponen la necesidad de reformas a los sistemas de salud vigentes en México como una revolución posible, analizan el modelo actual sus limitaciones y las deficiencias e inequidades que es necesario corregir, insisten en la necesidad de un nuevo sistema de salud con participación de toda la sociedad basado en el federalismo y en la centralización, que eviten duplicidades y necesidades de patologías no atendidas; el doctor Pelayo Vilar Puig para plantear "El Futuro de la medicina privada parte de un análisis histórico de la atención médica durante el siglo XX la responsabilidad social del estado mexicano de brindar atención a la salud como una garantía social, los problemas financieros de las instituciones públicas y el resurgimiento de la medicina privada, el creciente desarrollo de empresas prestadoras de servicios y de seguros médicos como consecuencia de la elevación del costo de la atención médica, así como la preocupación de certificar a los médicos y las instituciones, considera que el ejercicio médico del futuro estará influenciado por las exigencias de la sociedad de una actualización continua, una regulación más estricta, la certificación periódica de profesionales, la posibilidad creciente de demanda, la falta de valores humanísticos, la falta de recursos adecuados, las empresas médicas con fines de lucro y la necesidad de un riguroso apego a la ética médica; el tercer y último tema de este capítulo es una reflexión sobre los honorarios médicos en la era de los terceros pagadores los doctores Francisco Sámano y Héctor Fernández González, describen con amplitud la forma de pago de los servicios médicos desde la antigüedad y con mayor énfasis durante el siglo XX, principalmente los Estados Unidos de Norteamérica, los conflictos de intereses entre los profesionales y los terceros pagadores tanto públicos como privados y los abusos que se generar en ambos sentidos, fomenta los alcances de la medicina administrada con sus ventajas y desventajas para el paciente y para el médico, así como la situación prevaleciente en México a raíz de la Ley de Instituciones Mutualistas y de Seguros, proponen que se estudien las bases para fijar honorarios profesionales calculados en función a todas las variables que inciden, los problemas y la conveniencia de que dicho sistema sea aprobado por los Congresos de las entidades federativas.

Dr. Rivero: A partir de entonces y considerando las dificultades que teníamos desde el punto de vista económico para sacar un tercer tomo, cuando todavía no salía siquiera el segundo, el material de los años 2001 y 2002 se inscribió en la página Web de la Facultad de Medicina, no tengo una idea exacta que tan consultado es este material, estábamos considerando la posibilidad de que alguien hiciera un estudio para saber hasta donde se consulta, yo creo que de cualquier forma es un material que -quizá no todo pero si por lo menos parte de el- debería formar parte de un tercer volumen coeditado por Facultad de Medicina y Siglo XXI, le he pedido al Dr. Alberto Lifshitz que sea tan amable de hacernos una reflexión sobre los temas más trascendentes que hemos tratado durante los años 2001 y 2002.

Dr. Lifshitz: Los refiero a un documento que tenemos en el fólder, en la página 3 esta la relación de los temas que están en la página Web, primero una característica, como usted ve todos los enfoques son críticos de los problemas que enfrenta la profesión médica en nuestro país y segundo que aparecen firmados por los autores que desde luego son los responsables del escrito original, en cierto modo hay una co-autoría colectiva que aquí se presentan, hacemos criticas, hacemos sugerencias y de acuerdo con lo que cada autor considere las incorpora o no la versión final, entonces todos nos hacemos un poco responsables de lo que aquí esta escrito y como puede usted ver en esta parte yo voy a relatar 2001, 2002 y un poco lo que esta planteado para 2003, ya una parte se vio aquí y lo demás esta en programación; como se puede ver ahí, el primer capítulo sobre Certificación de Hospitales es toda una experiencia que el grupo del maestro Rivero tuvo en el Consejo de Salubridad General y que nos planteo aquí e hicimos algunos comentarios adicionales. Informática y Medicina es un análisis a vuelo de pájaro de todas las potencialidades que tiene esta nueva herramienta, tanto para la educación médica como para la práctica de la medicina. El papel de la medicina general en el sistema nacional de salud, consideramos que es un problema no resuelto, muy grave que no se percibe hacia donde va, cuales son las opciones factibles etc., creo que es un capítulo muy importante de ese libro. La reflexión sobre los consejos de especialidad habla un poco no solo de la experiencia que se tiene ya en México de los Consejos de Especialidad, sino de la cultura de la certificación que ahora estamos enfrentando y de la filosofía de la certificación; la modernización de la enseñanza clínica es una forma de como se pueden utilizar herramientas pedagógicas modernas en el adiestramiento clínico de los médicos. El doctor Guarner hizo un trabajo muy interesante sobre las operaciones innecesarias, nos convenció que el asunto es mucho más frecuente de lo que uno se imagina y que tiene raíces muy profundas y muy preocupantes, el Dr. Sámano hace un escrito sobre el médico ante la sociedad, es un análisis critico de como ha evolucionado la sociedad contemporánea y cual es el papel del médico en estas circunstancias que no siempre hemos estado a la altura del cambio social; Fermín Valenzuela escribió sobre la ética de la prescripción, aquí hay muchos asuntos que tienen que ver desde la promoción por la industria farmacéutica, hasta la formación en terapéutica de los estudiantes de medicina. Para 2002 se hizo un replanteamiento del consentimiento informado que ya estaba en el segundo tomo del libro que se va a editar. Un tema muy discutido y muy debatido y que le preocupa a mucha gente dentro de este seminario es el de terceros pagadores y terceros proveedores, que es ya una realidad incuestionable y que se va extendiendo pero que tendremos que razonar cual es nuestro papel como profesionales de la salud en lo que hacen los terceros pagadores y terceros proveedores. El doctor Torres Valadez habló de ética y cirugía con una serie de reflexiones que él ha hecho durante muchos años, El Médico y la muerte por Ruy Pérez Tamayo es un tema que el ha abordado desde hace mucho tiempo también pero ahora lo presentó como una actualización. El significado actual de Primum non Nocere es una reflexión en torno a uno de los principios de la ética médica contemporánea que es el principio de no maleficencia. El trabajo del Dr. Luciano Domínguez Soto sobre el papel del dermatólogo en la medicina moderna y el avance tecnológico, es un prototipo, un ejemplo en los enfrentamientos del médico contemporáneo con el desarrollo extraordinario de la tecnología; el Dr. Viesca en la problemática actual de la ética médica plantea un panorama de la situación como él la ve. Se incluyo ahí una contribución externa del Dr. José Félix Patiño de Colombia, que cayó al pelo para lo que aquí se esta discutiendo y él autorizó que se publicara en la página Web de la Facultad de Medicina dentro del seminario. La Epidemiología, la epidemiología clínica y la medicina basada en evidencia es un movimiento mundial que esta proponiendo cierto cambio paradigmático en el abordaje de las decisiones en medicina; los círculos de calidad de los comités institucionales hace un análisis crítico de cual es su aportación a la administración de las instituciones de salud. El tema los seguros de gastos médicos que complementan un poco lo que ya se había aportado en relación con terceros pagadores, terceros proveedores etc.; al final usted ve lo que esta planeado para este año, ya se presento "La Función del Médico como Educador en Salud" trabajo muy interesante discutido aquí y "La ética de las novedades terapéuticas" que presentó el Dr. Valenzuela, este es el resumen, usted podrá ver en el programa lo que se presentará en la próxima reunión que será el 25 de abril.

Dr. Rivero: Como usted ve Dr. Narro, lo presentado a partir de la segunda mitad del 2002 y lo que esta proyectado para 2003 tiene que ver con ética, ética del ejercicio médico, nos hemos salido un poco del tema de bioética porque creemos que muchos aspectos de bioética, son el futuro de la medicina, en tanto que hay problemas del ejercicio profesional actual que están constituyendo problemas de ética muy graves, sería un cuarto volumen ya no del ejercicio de la medicina, sino un libro sobre ética del ejercicio de la profesión; el grupo desde un principio ha tenido la sensibilidad y la preocupación de que se nos queda aquí todo lo que discutimos y que no hemos tenido la capacidad de poder proyectarlo hacia el exterior, durante el año de 2000 hicimos un intento de invitación a alumnos presentando unas platicas dentro de la Facultad con muy poco éxito, es decir no se si nos huyo la difusión o que, pero el hecho es que no obstante que eran conferencistas muy taquilleros entre ellos una de Pérez Tamayo donde hubo 10 gentes sentadas aparentemente existe una falta de sensibilidad, una falta de preocupación de los jóvenes y no solamente me refiero a los estudiantes, sino a los médicos jóvenes en relación con esos problemas, al parecer muchos de ellos han llegado a la conclusión de que van a ser empleados, empleados de un hospital privado o empleados del Seguro Social y que toda esta problemática del ejercicio esta un poco al margen de ellos, en la última reunión justamente se presento la necesidad de trasmitirle a usted las ideas del grupo en relación a lo que se ha venido tratando para escuchar su punto de vista de como podría esto estar un poco más cercano a los estudiantes y hacia los jóvenes médicos que forma la facultad, con el objeto de que esta problemática actual tan importante fuera parte del conocimiento, fuera parte de la educación integral de ellos, esta es la razón de haberlo molestado con escuchar estos resúmenes, yo quisiera pedirle a los asistentes si quisieran hacer alguna reflexión en relación a este punto.

Dr. Martínez Cortés: Quisiera completar lo dicho respecto a las actividades de este grupo en lo relativo a la escritura y publicación de la historia del Consejo Superior de Salubridad desde 1840 hasta 2002; concientes de lo que dijo el gran historiador de la medicina Henry Sigerist, que la historia de la medicina nos sirve a los médicos para saber de donde venimos y cuáles son nuestras responsabilidades actuales, es así como hemos venido abordando los estudios y las investigaciones en historia de la medicina y en estos cuatro volúmenes esta justamente la historia de la salud pública en México vista desde el Consejo Superior de Salubridad y sus principales modificaciones a través del tiempo. El primer volumen lo titulamos: De los miasmas y efluvios al descubrimiento de las bacterias patógenas, porque cubre esa parte desde 1840 hasta los ochentas del siglo XIX cuando el concepto imperante del contagio y de las enfermedades infecciosas, es el de los miasmas y los efluvios, ya por los 80's se descubren las primeras bacterias patógenas por Roberto Koch, entonces ya pasamos a otra época, el libro muestra precisamente como -en base a la teoría entonces existente y la ausencia del conocimiento científico sobre el problema de salud pública- son las enfermedades infecciosas, de eso se trata el segundo tomo: El Consejo Superior de Salubridad, el Rector de la Salud Pública en México. A partir de los 80's del siglo XIX, no hay duda de que el rector de salud pública en México es el Consejo Superior de Salubridad justamente ya fincado en estos conocimientos científicos, debo aclarar que esta es la historia del Consejo Superior de Salubridad de la ciudad de México y que nos falta explorar los consejos superiores de cada estado, porque era decisión de que cada estado tuviera su consejo superior, un poco como la descentralización actual, algo conocemos del de Michoacán, pero muy poco de los otros, a ver si después nos ayudamos porque de los demás no conocemos nada. El tercer volumen se refiere al cambio de nombre del Consejo Superior de Salubridad y también por supuesto con el nombre ciertas funciones, cuando se convierte en el Consejo de Salubridad General, entonces ya no es el órgano rector ya es un órgano consultor diríamos u orientador del departamento de salud, de las primeras instituciones que darán origen a la Secretaría de Salud. El último volumen escrito por el que habla y por la historiadora Xóchitl Martínez Barbosa igual que los anteriores, pero en este con la participación del Dr. Octavio Rivero como persona que vivió estos últimos tiempos. ¿Qué cosa le ha pasado al Consejo de Salubridad General en los últimos tiempos?, la idea general es que el Consejo de Salubridad General es una institución con muchas características muy positivas, que cuando los secretarios de salud le dan libertad para que las lleve a cabo, lo hace muy bien y le quita una serie de problemas o le ayuda al Secretario de Salud, pero todo depende justamente del Secretario de Salud. En la época en la que publicamos estos libros el Consejo de Salubridad General tuvo gran actividad por ese diríamos sinergismo entre la Secretaría de Salud y el Consejo de Salubridad General, ignoro como este la situación ahora, pero es precisamente con este espíritu crítico, explicatorio de lo que sucede como hemos escrito estos libros que son evidentemente otro fruto de este grupo.

Dr. Rivero: El Dr. Fernández me hacia notar que se me había pasado decir cuando hacemos la promoción de lo que aquí se trata, que hemos intentado presentar el material en Congresos Nacionales y en otros lugares, efectivamente parece ser que esto ha dado malos resultados, justamente el mes próximo yo tendré que ir a Puerto Vallarta a un Congreso Nacional y presentaré uno de los temas que se han tratado aquí; varios de los integrantes del seminario cuando tienen el congreso de su especialidad a nivel nacional, tratan algunos de los temas, aparentemente este mecanismo de difusión ha sido un poco mayor que el del Web, no se realmente cual sea la trascendencia; quisiera insistir a ustedes -que era la inquietud que tenían hace un mes- en señalarle al señor director cómo creen que podría utilizar este material para influir en la educación integral de los alumnos.

Dra. Durante: Me parece que el seminario, quizá pueda ser muy evidente, pero una de las funciones que puede cubrir muy bien, es señalar con mucha precisión cuales son las amenazas y las posibles áreas de oportunidad que pueda tener la educación médica, el seminario ha logrado concretar muy bien la problemática que se enfrenta no nada más en la educación médica sino en la práctica médica, pero como hemos visto y esto no es nuevo, la educación médica difícilmente puede responder con la misma rapidez que se dan los cambios en el ambiente, ya sea en la práctica, ya sea con las aseguradores, ya sea con la tecnología médica que se utiliza. Esto nos llevaría ha hacernos algunas preguntas; es evidente que muchas veces lo que los docentes queremos enseñar no es exactamente lo que el alumno requiere aprender. ¿Qué necesitamos enseñar?, yo creo que nadie estaría en desacuerdo en decir que necesitamos tener fundamentos científicos, pero también nos enfrentamos a que el bagaje del conocimiento médico cada vez se incrementa en cantidad y en velocidad y entonces lo que necesitamos es que los alumnos sepan contender con este incremento; alguien por ahí proponía "hay que incrementar el número de años en la educación médica", pero esto obviamente en poco tiempo va a dejar de ser una buena opción porque nunca va a ser suficiente, después en la experiencia clínica, ahora en México vivimos una situación privilegiada porque aún nuestros pacientes permiten que nuestros alumnos puedan obtener su adiestramiento con ellos, pero eso también esta cambiando y que en algunas instituciones ya hay limitantes y si nosotros vemos a futuro, yo me atrevería a decir 10 ó 15 años, esto va a cambiar rotundamente, pero por los pacientes, no nada más por las instituciones y que entonces ¿Dónde se van a adiestrar nuestros alumnos? y eso también lo tendríamos que ir previendo. Después lo humanístico, lo humanístico lo podemos realizar en la teoría, pero realmente lo que requerimos es revisarlo en lo aplicado no en la teoría nada más, la teoría es muy buena y sirve de fundamento pero necesitamos asegurar que nuestros alumnos manejen lo humanístico en la vivencia no que lo sepan recitar. Después en esencia tendríamos que enseñar a los alumnos a contender con los cambios, esto es con los cambios de información y con los cambios en la educación continua y que puedan contender con los cambios en los modelos de atención. Por otro lado tendríamos que darles opciones, la medicina básicamente se tendría que seguir enseñando para la práctica médica, pero también vemos que el mercado, -esa palabra que a veces no queremos mencionar-, ya no tiene espacio para tantos médicos y que entonces tendríamos también que ir creando opciones para nuestros médicos en la investigación, en la educación, y en la administración, habría que crearles espacios y quizá una de las claves más importantes y si yo tuviese la respuesta sería muy bueno pero no la tengo es ¿Cómo podríamos hacerle para que los currículo se pudiesen mantener? ¿Cuáles son esas medidas de mantenimiento? ¿Qué requieren nuestros currículo para que puedan funcionar?, porque funcionan muy bien al inicio pero después parecería ser que es un coche que esta garantizado para 20, 30 años de funcionamiento sin ningún tipo de mantenimiento y eso no puede ser. Me parece que el seminario -yo insistiría-, puntualiza muy bien los puntos y los resume además en nuestro contexto mexicano para la educación médica.

Dr. Fernández González: Un tema que ha sido de gran preocupación es que las nuevas generaciones de médicos que estamos formando egresan de un número crecientes de facultades y escuelas de medicina cuya infraestructura, su claustro académico, su currículo, el número de años, las áreas de adiestramiento clínico ofrecen un aspecto sumamente heterogéneo de formación que pudiera dar un común denominador de calidad para esas nuevas generaciones; en un seminario que trabajamos algunos de los aquí presentes que se denominó: Futuroscopio de la salud, se preveía que para el año 2010 estaríamos egresando casi el doble del número de médicos que hoy egresamos de las escuelas, actualmente andamos alrededor de 9 mil por año -15 mil para ser exactos - y se estima que puedan ascender a 17 ó 18 mil, de los cuales el 80% de los egresados en ese período de tiempo serán mujeres. Hoy contendemos en el siglo XXI, -época en que estas nuevas generaciones van a ejercer el arte y la ciencia de la medicina- en un mundo globalizado, con nuevos paradigmas, en donde las fuerzas del mercado intervienen definitivamente en el control a través de exigir productividad y en donde estas fuerzas utilizan lo que ellos denominan la oferta y la demanda, como parámetros de contratación y todos nuestros esfuerzos de certificación y recertificación pasan a un segundo termino cuando lo que prevalece es el afán de lucro de los intermediarios y terceros pagadores que participan en ese proceso, esto ha generado subocupación y desocupación de un número grande de médicos y nuestra preocupación es: ¿Cómo podemos hacer llegar a las autoridades de la Secretaría de Salud, a las autoridades de la Secretaría de Educación, a nosotros mismos las características del médico que se requiere en la actualidad?, para generar conocimiento de posibilidades a las nuevas generaciones que desean formarse como médicos; tenemos la percepción de que nuestros aspirantes no están adecuadamente informados, de que en el camino se frustra una cantidad importante y que eso tiene un costo enorme, en dinero, en intelecto que estamos desperdiciando. Nuestro sentir es cómo podemos unir los esfuerzos de ustedes, -hoy con su presencia Dr. Narro- para hacer llegar a la sociedad un conocimiento real, de qué tipo de médicos necesita México para estas nuevas décadas, hoy que vamos a disponer de un nuevo alfabeto, que vamos a tener que aprender y vamos a penetrar en el misterio de la herencia y vamos a cambiar las verdades de hoy que van a ser las mentiras de ayer, esa ha sido una grave preocupación que le transmitimos con respeto.

Dr. Fernández Varela: Volviendo un poco a la preocupación de todos nosotros manifestada por el Dr. Rivero, en relación al poco interés que parecen tener los jóvenes que están estudiando medicina y los recién graduados en este tipo de temas, que parecen torales en la práctica de la medicina actual, se me ocurre como un camino para interesarlos, que fuéramos capaces de elaborar simuladores de las situaciones que aquí discutimos y que se viven todos los días pero que los muchachos no captan, de tal manera que el muchacho en sus últimos años de la carrera o en los años de residencia le sirvieran como parte de su educación y con la responsabilidades de contestarlos, esto los haría compenetrarse en un problema que existe pero que ellos no ven como que les toque y desde luego dotarlos de la bibliografía, que sería fundamentalmente la que se ha construido en el seminario, quizás esta fuera una forma de que los estudiantes y los médicos jóvenes se interesaran en este tipo de temas, entonces ya verían prácticamente como si les compete.

Dr. Lifshitz: A mi me parece que estas cosas se tienen que vivir y en la medida en que los profesores particularmente de clínica, no se limiten al diagnostico y el tratamiento del caso, sino que hagan el análisis ético, social, económico incluso, de lo que esta ocurriendo alrededor del enfermo, eso podría inducir interés en los alumnos, creo que es también la forma en que se enseña la ética, alrededor de los casos de todos los días y no tanto en el aula, tal vez el asunto tendría que empezar por los profesores, que tuviesen la conciencia de que no es una actividad técnica la nuestra, que no somos robots que recogemos la información y respondemos a esa información, sino que tendremos que analizar todas las circunstancias que hay alrededor de cada decisión médica.

Dr. Sámano: Se ha hablado ya acerca de una serie de amenazas, en particular las amenazas que hay a la educación de nuestros nuevos profesionistas, pero no son diferentes a las amenazas que privan hoy en día sobre la práctica, sobre el ejercicio actual de la medicina y hay quien identifica como tres las más importantes, una tendría que ver con el famoso mundo del mercado que hoy en día es el que manda, el que regula, toda esta serie de intermediarios que han alejado, han polarizado cada vez más el binomio paciente médico y que cada uno de ellos defiende sus intereses políticos, económicos y dejan a un lado los principios básicos del profesionalismo médico. Junto con ello la segunda amenaza, que es de lo que tanto hablamos hoy en día, el derecho de autonomía del paciente, que con todo esto se ve constantemente violado y se queda más como un buen deseo, como un buen principio, que pocas veces conforme avanza el predominio de las decisiones sobre el ejercicio de la medicina por terceros interesados, cada vez menos se pueden lograr. Finalmente viene otro más importante o tan importante como ellos, que compete también a la educación, a la formación de nuestros nuevos médicos y tiene que ver con la ausencia de liderazgo profesional, si no formamos lideres profesionistas médicos, obviamente los médicos van a pasar a ser un instrumento, una parte más de todo este sistema ya tan organizado en favor estas fuerzas que amenazan, comenzando por las del mercado; por otro lado tendríamos que verlo en una circunstancia: ¿Vamos a preparar médicos que satisfagan el entorno actual?, el entorno actual es tremendamente preocupante, creo que debiéramos de buscar cuál es el entorno que queremos como ideal, hoy en día, nuestro sistema nacional de salud atraviesa una crisis muy seria yo podría enumerar una serie de cosas sin negar en primer lugar los grandes avances que en salud pública se lograron en la segunda mitad del siglo XX, pero todos conocemos de los problemas y de la carga que impone la transición demográfica, la epidemiológica, el bajo gasto en salud en nuestro país, el problema que mencionaba el Dr. Fernández respecto a la formación de recursos humanos con escuelas muy heterogéneas, la crisis actual que viven nuestras instituciones de seguridad social IMSS e ISSSTE en donde cada día oímos a sus directores hablar de la irremediable quiebra y desaparición mientras vemos como paulatinamente se van desmantelando, el advenimiento como una alternativa de atención a la salud de la medicina administrada, que en los países donde se ha desarrollado ha sido a expensas de violar los derechos de pacientes y de los médicos para el beneficio económico del mercado; los seguros de gastos médicos que proliferan hoy en día sin que exista una regulación, un marco legal que permita acotar las violaciones que a diario cometen estos individuos en contra de quienes son usuarios de sus servicios. Surge ahora la idea de un seguro popular de salud que no ha sido consultado con la profesión médica, que a juicio de muchos expertos no tiene sustento económico y peor aún, que con el se pretende violar la constitución de nuestro país en el derecho a la atención a la salud que deben tener todos los mexicanos, condicionándola hoy a su capacidad económica; los salarios insuficientes a los médicos, y hablo en particular aquellos que dependen de sueldos de la Secretaría de Salud, del Seguro Social, del ISSSTE, etc.. En el Colegio Médico del Distrito Federal se hizo un estudio comparando los sueldos de funcionarios de estos hospitales o clínicas con los profesionistas de niveles parecidos en empresas privadas, se calcula que son cuando menos diez veces menores los sueldos que perciben nuestros médicos. Las demandas contra los médicos y la actitud de animadversión que se ha promovido entre la sociedad hacia la medicina, vulnerando constantemente a la profesión como grupo y al médico individualmente, todo esto contribuye de gran manera, -pues la prensa irresponsable hace que ocupe las primeras planas el hablar de negligencia médica, cuando en muchas ocasiones la negligencia es administrativa o de las instituciones-, al entorno de una profesión sobre regulada, donde el médico tiene que cumplir con un montón de códigos, de leyes, de certificaciones, de recertificaciones etc. La pregunta aquí sería ¿Ese es el entorno de la medicina para el que vamos a educar médicos?, yo creo que lo primero que vamos a ver en el momento que lo conozcan los estudiantes de preparatoria es una gran deserción, un gran desinterés por querer ser médicos. Deberíamos preocuparnos por cambiar ese entorno, por buscar que nuestras nuevas generaciones contribuyan a cambiar ese entorno a través del conocimiento de cuál es la problemática en nuestro país del ejercicio actual de la medicina y que podamos de alguna manera formar lideres dentro de nuestra profesión.

Dr. Domínguez: Creo que un problema fundamental cuando se habla de mercado, es el centralismo, tenemos que admitir que si somos muchos médicos, pero que el 80% cuando menos, -estoy hablando de mi especialidad-, permanece en la ciudad de México, eso es muy grave, no se si en esto pudiera tener algo que ver -yo creo que si- la Facultad y la Universidad para que hubiera una mayor y mejor distribución de los médicos hacia la provincia. Por otra parte también hay otro problema muy importante, la disparidad en los programas de las diversas universidades, no hay una uniformidad en la enseñanza y eso es muy serio, ¿En que momento se podría llegar a tener uniformidad en la educación universitaria?

Dra. Ponce de León: Se ha hablado ya del alumno, con lo que tiene que contender nuestro alumno de medicina, se ha hablado del ejercicio de la medicina, pero un aspecto muy importante es lo relacionado con el profesor, el profesor es una figura que ha permanecido en los últimos años muy al margen, en realidad lo importante sería fortalecer al docente, apoyarlo a que se forme, no nada más dentro del conocimiento de su especialidad por la velocidad con que se generan estos conocimientos que tiene que mantener al día, sino como va a ayudar al alumno a contender con el crecimiento del conocimiento, con la velocidad con que se genera, con la limitación que tiene en la clínica para acercarse al alumno, o las limitantes con el paciente, por lo tanto es necesario formarlo como profesor, enseñarle de que manera va a enfrentar las situaciones que se avecinan, formar lideres docentes que sean tanto encargados de participar en la docencia como que realicen investigación educativa que les permita ver de que manera van a seguir enseñando a los alumnos, estudiar y enseñarles lo que es la ética de la enseñanza; se ha hablado de la ética del ejercicio pero también hay una ética de la enseñanza de la medicina que tendríamos que empezar a desarrollar dentro de nuestro quehacer en la Facultad de Medicina. Mejorar las condiciones en que se está dando la docencia, el profesor a veces tiene intenciones de utilizar toda la tecnología actual pero no la tiene a la mano, entonces sigue enseñando a través del pizarrón, a través del gis, a través del rota folio y esto limita que realmente tenga la función como docente moderno, actual y que permita que el alumno aprenda; creo que son aspectos a tomar muy en cuenta.

Dr. Valenzuela: Yo quisiera retomar dos cosas, una que decía el Dr. Fernández Varela y otra que esta en el ambiente, se habla de una falta de interés de los alumnos por estos temas, yo no se si realmente exista una falta de interés o bien lo que existe es una falta de nuestra capacidad para trasmitirlo, lo suelto como pregunta, no tengo la respuesta a esta pregunta pero creo que los valores humanos, ya que estamos hablando a final de cuenta de valores humanos, se construyen de una forma vivencial y no en el aula, y yo creo que en medicina particularmente el profesor juega un papel paradigmático, pero para que este papel paradigmático se pueda llevar a cabo, tenemos que crear las condiciones para que se establezca una relación profesor-alumno, de la misma manera que la relación médico-paciente se tiene que establecer para que este binomio funcione de manera adecuada, yo estoy convencido de que la relación profesor-alumno se tiene que establecer y que es mediante esta relación donde el papel paradigmático del profesor, del médico en este caso, se puede llevar a cabo y vamos a poder incidir de manera directa en la calidad humana de nuestros alumnos. Ahora se habla mucho de las buenas prácticas clínicas, las buenas prácticas de investigación las buenas prácticas de formación y el otro día me encontré un documento que me gusto muchísimo que era de algunas prácticas educativas y las buenas prácticas educativas parten de este asunto que me parece fundamental, qué tenemos que hacer para establecer una buena relación profesor-alumno que permita que este valor paradigmático del profesor se trasmita de una forma vivencial.

Dr. Rivero: Con el objeto de poder dar al Dr. Narro director de la Facultad, todo el tiempo que desee, voy a dar un par de comentarios más suplicándoles sean breves.

Dr. Zenteno: Yo creo que la acción o la influencia de la Facultad de Medicina es a diferentes niveles, la cantidad de estudiantes de posgrado es mayor que la cantidad de pregrado, no existe y no es fácil llevar este tipo de temas a los hospitales como parte del adiestramiento, como conferencias podrían fácilmente ser incluidas dentro del programa de las especialidades, porque esa es una medida urgente, los alumnos de Posgrado están a punto de salir, no tienen tiempo, los de pregrado todavía tienen cinco ó seis años en los que pueden modificarse sustancialmente, los estudiantes de posgrado son aquellos que en seis meses, un año o dos años se enfrentarán a este problema, creo que como medida de urgencia se implementara inicialmente este programa de docencia y que sería muy bien recibido en todos los hospitales en los que la Facultad tiene presencia a través de la dirección de enseñanza, esto nos permitiría encuestarlos y permitiría medir fácilmente cual es la repercusión de un curso ordenado con estos temas.

Dr. Rivero: Justamente en el proyecto de PAPIME, que he presentado a nombre del seminario a las instancias correspondientes de la Universidad esta calculada una conferencia quincenal a nivel de residentes.

Dr. Kreschmer: Todos los aquí presentes y somos varias generaciones, cuando terminamos de estudiar medicina nos adentramos a un territorio, un mercado predecible, ya no es así, al estudiante de medicina ahora, más vale advertirles lo que les espera que es completamente diferente, les espera si no se preparan en ese sentido un proceso de proletarización y burocratización que ni siquiera tiene concebido y no les hemos informado que en esa dirección van las cosas, yo creo que esto se tiene que hacer en las escuelas de medicina.

Dr. Martínez Cortés: Yo creo que el señor director tiene en su escritorio la segunda edición de un librito mío que se llama "Ciencia y humanismo al servicio del enfermo", ahí trato de dar las bases científicas y digamos técnicas para tratar al paciente como persona.

Dr. Narro: De verdad muchísimas gracias por la invitación maestro Rivero, por supuesto a todos ustedes, de verdad que me da mucho gusto el poder estar aquí y ver la cantidad y sobre todo la calidad de los integrantes del seminario; conozco del origen, en su momento el maestro Rivero, allá en 1997, 98 me comento de esta idea y estuve enterado y atento, me llego incluso a invitar pero estaba yo en la Sub-Secretaría de Salud. Quisiera decirles varias cosas, aparte de agradecerles otra ves y decirles que me da un enorme gusto, que estoy convencido de que la obra que se ha logrado estimular y producir a partir de esta iniciativa que tomo el maestro Rivero y que gente de una enorme calidad como todos ustedes y algunos que no están presentes el día de hoy pero que se que forman parte de el seminario han logrado hacer, ahí esta, no es fácil encontrar la manera de tener esos productos y menos llevarlos a la realidad, y ustedes lo han logrado, es sin lugar a duda una muestra muy significativa del nivel de éxito que han alcanzado, pero también y que bueno que así se diga y se comente, que se planteen los retos, las posibilidades de hacer más cosas, la necesidad que ustedes sienten de encontrarles salidas adicionales y particularmente con los jóvenes y que bueno, -como la Dra. Ponce de León dijo- también con los maestros, hay que ver el caso de los profesores porque yo pienso que los alumnos son en mucho lo que nosotros estamos haciendo. Me pregunto ¿hay alguien aquí que no sea profesor de la Universidad?, ¿hay alguien que no lo sea? todos somos profesores, todos damos clase en el pre-grado, en el Posgrado, en Iztacala o en la Facultad de Medicina, en Filosofía, en otras áreas y escuelas y la verdad yo creo que todos los que están aquí tienen ese compromiso y no me dejaran mentir, que parte de lo que estamos haciendo y parte de la crisis en la educación, en particular en la educación superior tenemos que verla también desde la perspectiva de donde estamos nosotros y de las fallas que estamos teniendo, más allá de recurrir al expediente fácil, que además es muy atractivo y que hay que hacerlo de cuando en cuando, de decir: "es el plan de estudios, algo esta mal en el plan de estudios, vamos a meterle más años, vamos a meterle más materias", cuando no necesariamente es así, en el sentido más estricto del caso. Me parece que es muy importante y creo que hay que ver de que forma podemos encontrarle otras salidas más allá de las que tienen ustedes de estas obras, yo tengo estos volúmenes el maestro me hizo favor en su momento de dármelos y los revisa uno y les echa un vistazo y encuentra uno ideas provocadoras, argumentos interesantes, datos trascendentes, propuestas; ahí hay una obra y es una manera, pero yo creo que hacen bien en decir: ¿no habrán otras maneras y otras modalidades?. Les voy a decir ahora y como producto de la reacción inmediata, no necesariamente del análisis, que yo trate de entrar a la página del Seminario y por lo menos en mi máquina, con la que estoy teniendo problemas, me encontré con dificultades para entrar a los archivos de las ponencias, vi el listado pero no pude entrar, es falla de mi máquina, habría que ver que estén en un formato para poder bajar la información fácilmente, -Dr. Rivero: están en Acrobat-, es lo más probable y yo no lo tengo montado en esta nueva máquina, quería venir un poco más preparado -Dr. Rivero: a cientos de gentes les debe pasar- les debe pasar lo mismo y si a los que quieren llegar son los jóvenes, olvídense, simplemente no lo están haciendo; me comprometo a ver con Héctor Delgado la posibilidad de que le ponga un contador secundario al de la página de la Facultad para que vayan viendo como se va incrementando, pero ahí están, no se que tanto se este haciendo pero la Facultad podría ayudar ciertamente en esto, por un lado la gaceta de la Facultad, por otro la Revista de la Facultad y por otro llevar la petición a la gaceta de la Universidad para que haya una nota mensual o bimestral sobre el trabajo, la reflexión del seminario sería extraordinariamente bienvenida y de nueva cuenta no va a resolver el problema, nuestra gente no necesariamente revisa y lee todo, pero es otra manera de tener un público que pudiera interesarse. Me parece en adición que debiéramos considerar la posibilidad, -aquí si habría que valorarlo-, como sucede en algún otro grupo u otros grupos de seminarios de esta naturaleza o parecidos, de ver con algún periódico, con la Jornada o con Reforma o con Milenio el que pudieran una vez al mes escribir una página del seminario para difundir estas cosas, varios de estos periódicos, me consta, tienen sus secciones culturales o científicas o técnicas en fin y les puedo asegurar que estarían realmente interesados en poder recibir ese material, es otra forma de salir y tener contacto con el exterior más allá de las discusiones aquí en esta mesa, en este seminario. Por lo que se refiere las salidas clásicas, yo les diría: a la Facultad de Medicina, a la dirección, al director de la Facultad de Medicina, le interesaría muchísimo en poder participar en este tipo de coediciones en los volúmenes que tendrían que hacerse de 2001 y 2002; en el que podría resultar producto de todos estos temas alrededor de la ética médica y de sus distintos asuntos y variantes; de verdad lo digo, estaría yo muy interesado y conmigo podrían ustedes contar. Me parece que efectivamente es cierta la pregunta que hace Fermín Valenzuela, ¿les falta interés a los jóvenes o no estamos sabiendo llegar a ellos?, yo tampoco tengo la respuesta, no tengo datos, no tengo evidencias y ahora todo lo basamos en esto, en datos duros y evidencias, pero si tengo un poco la intuición, y mi intuición es que no estamos sabiendo llegar. Acabamos de tener -no esta aquí el Dr. Pérez Tamayo miembro de este seminario, y algunos de los que estamos acudimos a su presentación-, una conferencia magistral, que fue verdaderamente magistral, del Dr. Pérez Tamayo en el auditorio Ocaranza sobre el asunto de la ética laica, que como yo dije: "que chiste tiene dar una conferencia así de buena si antes se escribió un libro", así cualquiera da una conferencia, realmente fue una esplendida conferencia y pasa lo mismo, les prometo que no hubo manipulación alguna, se hizo difusión y el auditorio estaba lleno , en algún momento hasta en las escaleras, no es un auditorio grande ustedes lo saben y debemos haber sido en el mejor momento un centenar de personas, muy pocos jóvenes y otra vez tengo la impresión de que no estamos dirigiéndonos a ellos, si ellos van a ser "nuestro público", nuestro sujeto de interés, hay que saber llegar; les aseguro que con ellos se llega de otra manera, con ellos se llega más fácil con el contacto directo o con volantes o con invitaciones a través de los jefes de grupo o de otra manera que simplemente en medio de este mar de cosas, - tenemos gran cantidad de mamparas en la Facultad y en medio de los anuncios "se renta departamento en la colonia del Valle" y "compra disquetes de no se que" y "ve al encuentro religioso de no se que cosa" y "no se que de computadoras" y "de esto y del otro" y "que tal y que cual"-, aparece una conferencia de ética médica laica o de lo que fuera, los muchachos no sienten que sea para ellos, que va dirigido a ellos, no lo ven, tienen ceguera de talleres de estas cosas y yo les puedo asegurar, no tengo ninguna duda porque estoy dando clase en el pre-grado, que habría decenas y decenas de jóvenes que estaría absolutamente interesados, vaya, hasta en ir a conocer quién es Octavio Rivero por ejemplo, porque alguien les ha dicho o se enteraron por ahí, o de cualquiera de ustedes; no estamos llegando, podríamos hacer un ejercicio para encontrar mecanismos que nos permitan llegar más fácil, comunicarnos con los jóvenes y probarlo, yo creo que tendríamos que hacer de verdad un esfuerzo en este sentido. Les quiero decir que a mi me gustaría mucho que al director de la Facultad se le permitiera tener como instancia de consulta a este seminario, creo que la capacidad de reflexión que tienen ustedes, el conocimiento, la experiencia, el interés por apoyar y por desarrollar las propuestas que pueden surgir aquí, al director, a mí en particular por supuesto, me interesaría muchísimo tenerlo como mecanismo de consulta y que me permitan de repente traer yo las preguntas y que ustedes me hagan las propuestas, que me permitan que yo vuelva a venir aquí con ustedes.

Efectivamente en este asunto de la numerología que tocaba el Dr. Fernández, yo creo que hay cosas muy preocupantes, uno: el número de escuelas de medicina no lo conoce nadie, otra vez ya llegamos como en los años 70, cuando el Dr. Fernández Varela era director de Iztacala y tuvimos aquella enorme plétora y salvo las damas ya todos estábamos en este asunto de la educación médica, pero la verdad es que en aquel tiempo ¿se acuerdan cuantas escuelas había?, no se, que si 50, que 52 no se cuantas. Por razones de mí presentación del programa de trabajo frente a la Honorable Junta de Gobierno de esta Universidad, -aquí hay miembros muy destacados de ella-, revise como andábamos en esto del número de las escuelas y en cien años hemos pasado de tener 12 a principios del siglo XX a tener hoy en día más de 80, -no que son 72, no es cierto, no que son 77, no es cierto, son más de 80-, buenas, malas, regulares, oficiales, no oficiales, reconocidas, no reconocidas, la que se creo en Tlaxcala etc., son más de 80. Dos, son más de 70 mil estudiantes de medicina en este momento en todo el país, con todo respeto Dr. Fernández no son 9 mil, se esta acercando ya a 11 mil el número de egresados de las escuelas de medicina y sigue creciendo la cantidad. Número tres, estamos aceptando por lo menos -el año pasado fue un año muy generoso, el más generoso probablemente en las últimas épocas en el número de plazas para residentes o en las residencias médicas incluyendo las 300 o algo así para residentes del extranjero- 4,114 plazas con 11 mil egresados, con una bolsa de retención brutal, tenemos en el último examen más de 19 mil alumnos aspirantes a esas residencias y para conocimiento de todos ustedes y enorme preocupación de todos nosotros les debo decir que ahí están todos los datos oficiales, yo no soy malvado que este haciendo una mala propaganda a nadie, se han creado con las instituciones públicas de este país en los dos últimos años, cada año en promedio 1,130 plazas de médicos; nada más es cosa de hacer una regla de tres y de multiplicarlo por cuatro años y de decir que en cuatro años vamos a tener un problema otra ves como lo tuvimos a finales de los años setenta y principios de los ochenta, con médicos desempleados, organizados en un sindicato, en una agrupación, movidos por partidos políticos y generando un enorme inquietud, para allá vamos, y no nos quejemos de que no supimos, que no nos dimos cuenta, que nadie nos dijo, nadie nos avisó, por ahí va este asunto, a mi me parece terriblemente preocupante este asunto. Yo creo como decía el Dr. Fernández Varela que este asunto de las nuevas tecnologías, de los simuladores o de buscarles salidas atractivas a estos materiales, también lo deberíamos probar, transformar algunas de estas cosas en casos o en asuntos o en temas que a través de un disco compacto o a través del papel o a través de la página pudiéramos darles salida para conocimiento, para divulgación y para interés de los estudiantes de medicina tanto del pre-grado como del posgrado como decía el Dr. Zenteno. Me parece que han tocado aquí temas absolutamente torales, todos ellos trascendentes Me parece que este asunto del mercado en donde yo cada día me convenzo más, el mercado tiene nombre no solo tiene nombre, tiene apellido y hasta dirección fiscal, registro federal de causantes, porque de repente dicen los economistas: "se ponen nerviosos los mercados", no, se pone nervioso el señor del dinero, el es que lo mueve, el que lo saca, el que lo quita; este asunto de la psicología del mercado, la psicología de los seres humanos que tienen el control del capital, que tienen la posición de influir, hay que decirlo con toda claridad, en este asunto del mercado, ustedes lo saben, Roberto Kreschmer dio recientemente una conferencia, otra de estas que uno dice: "caray que capacidad para en pocos minutos, frente a una audiencia tan notable, tan destacada, en la asunción de la presidencia de la Academia Nacional de Medicina del Dr. Tanimoto, frente a la figura del señor presidente, del señor secretario de salud, el señor rector, en fin, puede hacerse una serie de consideraciones en poco tiempo, tan profundas, fuera de los lugares comunes y que me parece es fundamental, porque en si hay una amenaza para la medicina, para la práctica médica, para los médicos, pero con perdón de todos nosotros, lo peor, para los pacientes, porque la verdad lo vamos a sufrir todos, pero al final quienes van a pagar las consecuencias de malas decisiones van a ser los pobres enfermos, los pobres seres humanos del conjunto de la sociedad mexicana, particularmente los pobres pobres, esos son los que van a terminar pagándolo. Ni modo para que me provoca el Dr. Sámano, yo no puedo estar más en contra del seguro popular de lo que estoy, se lo he dicho al señor secretario Julio Frenk quien es mi amigo, se lo he dicho en privado, se lo he dicho en público, se lo he dejado por escrito, lo acabo de decir la semana pasada en la última sesión del Consejo de Salubridad General precisamente, fui invitado representando a la Facultad, para que programan el tema, ni necesidad había, para que lo ponen, le dije a Mercedes Juan: "si ya saben lo que voy a decir para que lo ponen", en fin para que me provoca usted también, la verdad, honestamente no son ganas de frenar cosas, sino ganas de que aportemos, que es lo que tenemos que hacer, yo estoy convencido también de que no vasta con decir: "oiga esto esta mal", y tampoco se puede acudir al simple expediente sencillo de decir: "que Francisco Gil de más dinero", tenemos que ponernos de a deberás en una forma más madura a ver que hacemos y como financiamos los servicios públicos que se nos están diluyendo. Otra generación, una generación anterior a la nuestra fue la fundadora de las grandes instituciones de salud hace 60 años o más, a la generación de nosotros le tocaba hacer la gran reforma de estas instituciones, no lo estamos haciendo y se nos están derrumbando, lo mismo es el IMSS con toda la capacidad que tenía y con todas las posibilidades, que es el ISSSTE que esta moribundo y que sigue vigente aquel adagio, casi teorema del maestro Laguna, no es ofensivo, además lo dijo él "el ISSSTE es la única institución que siempre puede estar peor", se esta cumpliendo, parece que ya llegó al fondo y resulta que no, que todavía hay más posibilidades, no puede ser, tenemos que entrarle y lo mismo pasa con la Secretaría y esta pasando con los sistemas privados, se nos esta descomponiendo el equilibrio, el modelo de la organización de la atención médica en el país y no basta con decir que están mal las cosas, tenemos que hacer propuestas para que se mejoren y lo voy a decir como una autocrítica, yo creo que la Facultad de Medicina no esta tomando el papel que debiera tener en este sentido para hacer las aportaciones correspondientes; tan estamos así que me decía aquí a soto voce el maestro Rivero: " hay que hacer una revisión ", -yo se lo he propuesto a los señores directores de Iztacala y de Zaragoza-, hay que hacer una revisión incluso en el caso de la Facultad de la UNAM, de Iztacala y Zaragoza de la manera como estamos enseñando la medicina, de la manera como nos estamos relacionando con las instituciones de salud, de la manera como estamos haciendo nuestra relación con otras escuelas y facultades de medicina del país, de la manera como estamos correlacionándonos con otras escuelas del área de la salud, estamos absolutamente aislados, estamos separados. En esta parte de la numerología déjenme decirles otro horror, acabamos de tener más de 9 mil solicitantes para medicina en la UNAM para 250 plazas que se abrieron a concurso, 3 de cien, más de 9 mil solicitantes. Hay que acabar con algunos mitos muy bien establecidos que dicen: "el problema es que nuestros estudiantes del pase reglamentado son rete malos", pues no, la Facultad de Medicina admite estudiantes con tres años absolutamente regulares en bachillerato y con promedio superior a 8.6, no son malos nuestros alumnos del pase reglamentado, no son malos en lo absoluto, son los mejores. Le puedo decir que hoy en día por esta situación de la demanda tan brutal, la Facultad de Medicina, como lo fue la Facultad de Filosofía hace algunos años, o la facultad de Ciencias en algún otro momento, tiene a los mejores alumnos, algo estamos haciendo mal que después resulta que no son tan buenos, somos nosotros, somos los profesores y somos los directivos, en fin lo tenemos que asumir. Finalmente este comentario que duele mucho, pero que tiene razón Roberto y que otra vez en 20 palabras nos lo deja ahí como un asunto candente, los estudiantes de medicina no tienen un futuro previsible y lo malo es que si uno dijera: "no, si hay un futuro previsible" es que ese futuro es más bien malo para ellos. Terminaría diciéndoles que tengo la convicción de que los asuntos que ustedes han discutido, planteado, presentado en este tiempo que me hacen favor de compartir conmigo y de recordar algunos de ellos, tienen la mayor trascendencia, la mayor importancia, el mayor nivel, desde la dirección yo puedo contribuir con el seminario, con la divulgación, con estas búsquedas de salida, con el asunto de los profesores, a los profesores hay que llegarles también con estos temas, a mí se me han ocurrido algunas cosas que nos ayuden a participar, lo tenemos que hacer, por ejemplo un congreso anual del personal académico de la facultad; tenemos 300 profesores de tiempo completo, quizá un congreso con ellos y con los de asignatura también y tenemos un gran número de profesores de 20 horas ó más, hay que invitarlos hay que juntarlos y generar un espacio, no hay estos, no existen esos espacios para que los profesores hablen, discutan, platiquen, analicen, comenten, argumenten, no los tenemos y además déjenme decirles, hoy no tenemos como lo tuvimos en algún tiempo 25 mil alumnos, hoy tenemos en el pre-grado 5,100 desde hace varios años y resulta que no alcanzan las aulas y resulta que es un pleito por los espacios, algo estamos haciendo mal. Quisiera adquirir el compromiso con ustedes maestro Rivero y con todos los integrantes del seminario, que es al mismo tiempo compromiso y petición, de estar cerca de ustedes, de pedirles que me dejen tener el beneficio de consultar con ustedes asuntos, la confianza para que me digan las cosas que me quieran decir, como me las quieran decir, ya la piel a estas alturas de la vida no la tiene uno nada delgada, la tarea es muy, muy importante. Algunas cosas prácticas de las que tome nota y entiendo que a ustedes les interesaría voy a echarlas a andar de inmediato y si algunas otras, por ejemplo, lo del periódico fuera de interés puedo explorarlo yo conozco a gente en los medios, pero sobre todo que me permitan espacio.

Dr. Rivero: Muchas gracias señor director, estoy seguro de transmitirle a usted el agradecimiento que el seminario tiene, no solamente por las reflexiones que amablemente ha hecho usted en relación a lo que aquí hemos tratado durante ya cerca de 5 años, sino a la posibilidad de actuar como usted mismo lo propone, como un organismo de consulta de la dirección de la Facultad, todas las proposiciones que usted ha mencionado y algunas más que pueden surgir de esta reunión las vamos a tratar de implementar lo más pronto posible con el objeto de ser útiles, más útiles a la Facultad y nuevamente muchas gracias por su presencia.

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