Seminario
El Ejercicio Actual de la Medicina

Acta de la reunión del grupo de trabajo sobre "El ejercicio actual de la medicina", celebrada en la sala de juntas de la División de estudios de postgrado e investigación de la Facultad de Medicina el viernes 22 de febrero de 2002.

Regresa

El Dr. Rivero dio la bienvenida y pidió al Dr. Fernando Torres Valadés presentara su trabajo: Los comités institucionales como círculos de calidad ¿Tienen vigencia actual?.

Al terminar la lectura el Dr. Tanimoto coordinó la sesión y solicitó la participación de los presentes.

Dr. Fernández González: Comentaba antes de iniciar la reunión que la cultura de la calidad es un compromiso inexorable y que debemos participar todos, desgraciadamente la estructura de nuestro sistema de salud no otorga los estímulos necesarios a los participantes en los comités de control de calidad. Debido a que las ideas que emanan del trabajo realizado cada semana por estos comités institucionales no llegan al consejo de administración del hospital y no se traducen en logros que sean reconocidos y que verdaderamente estimulen a los participantes de los mismos a seguir trabajando, tengo la impresión de que frecuentemente se estructuran para cumplir un programa pero que no se supervisan, no se revisan los resultados, no se hace un análisis específico, de cual fue el trabajo del comité de infecciones o del comité de tejidos y se hace un reporte comparativo con la autopsia, por poner un ejemplo. que permita tomar decisiones, que modifique para el siguiente periodo de observación el resultado de ese trabajo. Mientras esto no se de -y creo que es tan importante en los hospitales públicos como privados-, el resultado final de la comprobación de la calidad queda en entre dicho. Creo que es un esfuerzo magnífico, el trabajo es excelente, lo felicito doctor, pero siento que tendríamos que hacer algo para que el trabajo de quienes se dedican semanariamente a cumplir un objetivo pueda ser reconocido, y se proyecte para beneficio colectivo.

Dr. Tanimoto: El doctor Rivero que ha pertenecido tantos años al Comité del Hospital General, - que tiene más de un siglo de fundado-, que opina al respecto.

Dr. Octavio Rivero Serrano: La reflexión que nos hace Torres Valadez, me deja muchos asuntos para comentar. En 1er. lugar creo que, -y esto lo mencionamos desde que empezó el seminario-, tenemos que hacer una distinción entre la atención médica a la salud en los hospitales públicos y en los hospitales privados; hay un aspecto muy importante en el que quisiera insistir: En Estados Unidos de Norteamérica, hay hospitales privados que funcionan realmente como hospitales, en México, la mayor parte -por no decir casi todos- los hospitales privados funcionan como sanatorios, no como hospitales. Es decir, la estructura que yo entiendo de un hospital es una estructura bien organizada, en donde el director y el subdirector están trabajando con las jefaturas de las divisiones de medicina, ginecoobstetricia, cirugía, pediatría, la división de enseñanza, la división de investigación y todos van siguiendo un proyecto que esta supervisado. Fundamentalmente de lo que habla el trabajo, es de la supervisión de la calidad. La calidad de los hospitales privados mexicanos, es completamente al azar, es decir el cuerpo médico de un hospital privado en México consiste principalmente, no en aquellos elementos que han sido escogidos por la dirección médica por su calidad para trabajar en el, sino de aquellos que tuvieron el dinero para comprar el consultorio adjunto al hospital, o que pagaron la renta altísima que cobran por un consultorio en estos lugares. De manera que el paciente que llega a un hospital privado en México, voy a poner el caso de un enfermo de columna, no necesariamente cae en manos del experto de columna que puede tener el cuerpo médico de ese hospital, sino que puede caer en manos de cualquiera. He visto en la época que trabaje en hospital privado, como un cirujano general podía meterse a quitar la mitad de un pulmón sin tener la menor idea de si estaba indicado o no, si era o no factible realizarlo. Le llamaban al especialista de tórax cuando el enfermo ya estaba complicado, el especialista recibía el caso que había sido mal manejado por el hospital y debió ser derivado al especialista adecuado y no al cirujano en turno. Esta es una diferencia fundamental que yo creo que es importante mencionar, porque mientras ese sector del país siga trabajando su hospital como sanatorio el nivel de calidad de la atención puede estar en el pico de arriba o en el pico de abajo.

Otra cosa que me interesa mucho y que Miguel y yo pensábamos plantearles ahora como tema fundamental del seminario para un tiempo prolongado, es el tema de la ética. Estoy viendo muchos esfuerzos, incluyendo la universidad, de grupos que hablan de bioética, cuidado con esto, porque el grupo de bioética que esta formado en la Universidad, lo integran algunos médicos, pero hay también filósofos y literatos y es un concepto, que no ha aterrizado completamente. Quisiera proponerles a ustedes que nos dedicáramos, no a hablar de cuestiones de bioética que pueden ser muy importantes para el futuro, como el asunto del genoma, de la clonación, en fin, son temas que nos vendrán a preocupar realmente dentro de 20 años. En cambio hay asuntos del ejercicio profesional actual que son de ética del ejercicio; creo que este grupo debería de empezar a trabajar estos temas, con el objeto de para el año del 2003 pudiéramos publicar un libro sobre Ética del ejercicio médico. El ejercicio de la medicina realmente esta en el consultorio o en la medicina de hospital, donde hay muchos problemas éticos que no son de futuro sino de actualidad. Otro aspecto muy interesante del trabajo de Torres Valades, es que son las reflexiones de alguien que ha vivido la medicina, no es teoría, es poner en papel algo que él ha vivido durante años y estos trabajos habitualmente siempre tienen una gran riqueza. En cuanto al problema de la sobre administración, -aquí mi maestro el doctor Martínez Cortes, fue director del Hospital General en aquella época casi tenia 2000 camas, con una estructura administrativa muy modesta y funcionaba-; yo viví la subdirección de ese hospital con el doctor Clemente Robles, y todavía era más modesta la estructura administrativa. En la actualidad los médicos -porque hemos tenido la culpa nosotros-, hemos aceptado la idea de que la mejoría en la calidad va a depender de una mejor estructura administrativa. Se da el caso que la unidad de neumología (de la que yo fui director a la muerte de don Alejandro Celis, tenia 200 camas, es decir, era un hospital muy grande, ahora tiene solo 70 camas) y como cada unidad del hospital general, tiene ahora un delegado administrativo que se ha convertido en el director. Esto es completamente absurdo, estamos dejando la medicina en manos de gentes que no tienen ni la menor idea de lo que es. Entonces no es de extrañar que a la junta de gobierno -en la cual por cierto ya no estoy- del hospital general, el actual director, a quien yo respeto y le tengo una gran amistad, nos haya presentado una estructura administrativa que era la tercera parte en recursos del hospital, a lo cual la junta de gobierno no estuvo de acuerdo y no le aceptamos su idea, pero esto apunta hacia adonde esta yendo la medicina. Recuerdo que cuando regrese de Italia el doctor León Green me hizo favor de invitarme a trabajar con él al Instituto de Cancerología en cirugía de tórax de los enfermos con neoplasias y que teníamos un trabajo horrible para poder conseguir que nos arreglaran el único endoscopio de fibra que tenia, porque no había dinero para ello, y yo le decía al director, Arturo Beltrán que es muy buen amigo mío, como es posible que digas que no hay dinero para arreglar el endoscopio, si yo veo que a los 40 o 50 empleados administrativos, que no se que hacen, les compran ropa fina cada 4 meses. Eso es completamente absurdo; en el sexenio pasado era yo el representante de la Secretaria ante la junta de gobierno de los hospitales del Departamento del Distrito, y en algunas de las juntas llamé la atención sobre el hecho de que el costo de la ropa para los trabajadores significaba el doble del presupuesto que el destinado a los medicamentos, no puede ser y me dijeron: desgraciadamente son conquistas sindicales que no se pueden cambiar; no había medicinas, pero había ropa; es lo mismo que estoy mencionando del Instituto de Cancerología.

Dr. Miguel Tanimoto: Tú Fernando que tienes tanta experiencia en dirección de hospitales, que has dirigido el Hospital Militar con esa disciplina sui generis que tiene; que has estado en el Hospital Español por muchos años; en el Instituto Nacional de la Nutrición y has trabajado también en hospitales privados, que podrías comentar al respecto.

Dr. Fernando Torres Valadés: Respecto a la primera pregunta, efectivamente llegue a ser director del Hospital Militar, cuando me hacen esa pregunta les digo que son mexicanos, no tenía escandinavos o suecos. En un momento dado puede ser que la disciplina facilite el trabajo. Eso no quiere decir que en el Hospital Militar no hayan habido actitudes negativas, voy a poner un ejemplo, cuando yo era médico muy joven los jefes de departamento pensaban que por llegar y hacer una craneotomía descompresiva o hacer una operación de tórax, era suficiente por su calidad de jefes de departamento. Hablar de o que alguien preguntara, o que hiciera algún reporte y tuviera intención de valorar su departamento casi era un insulto, se enojaban, consideraban que su papel era ser brillantes cirujanos. Después en otra etapa, los jefes de departamento no tenían ni idea de lo que eran indicadores de rendimiento de un departamento, que es una dotación de campo. Respecto al hospital privado, trabaje en uno, tienen estructura para lograr recursos y los médicos que ahí trabajan no siempre están certificados, no tienen una carrera sólida. El hospital español lo conozco desde hace quince años, es una institución sui generis, porque trabaja los dos aspectos; la seguridad social con sus derechohabientes y como institución abierta. pero son muy selectivos desde el punto de vista de su personal, exigen que los médicos que van ahí, cumplan con los requisitos y den garantía al trabajo. En general las instituciones mixtas como esas creo que dan buen resultado, yo pienso que es el camino. Logre en el hospital militar una situación mixta, capté recursos importantes por atenciones privadas. Los Institutos han sido hospitales en donde los círculos de calidad tienen sus antecedentes primarios con la intención de proporcionar una atención, educación e investigación de la más pura calidad. Considero que el Instituto Nacional de la Nutrición inició la cultura de la calidad en México. Para terminar un ejemplo, me preguntaron ¿qué te paso cuando estabas en el hospital militar y llegaste al Instituto Nacional de Nutrición?: contesté; yo sentía que había vivido una película en blanco y negro y cuando llegue a nutrición me la pusieron a color y en pantalla panorámica. Lo digo con la honestidad que lo viví.

Dr. Héctor Fernández Varela: A mí me parece, aparte de que el trabajo es muy bueno -y felicito al doctor Torres Valadés-, es muy completo y nos ubica en todo lo que ha sido esta lucha por la calidad del ejercicio médico. Pero del titulo del trabajo se infiere que hay que sustituir a estos círculos de calidad o comités de calidad por otra cosa o si bien deben persistir. El punto central y el doctor Torres Valadés lo dice, que simplemente hay que tener otra organización, donde la innovación sea lo que prevalezca en esta lucha por la calidad. Cuando hace uno un análisis, me parece difícil creer que han existido círculos de calidad o comités de calidad, que no estén permanentemente luchando por la innovación.

Yo creo que todas las instituciones importantes desde hace muchos años no nada más tienen círculos o comités de muchos tipos, sino tienen áreas de planeación que están atendiendo precisamente como ser más eficientes y como tener más calidad en las cosas. Anotaría que los comités de calidad no son el inicio de la preocupación por la calidad en los médicos; desde el momento que los médicos discuten sus casos clínicos y anatomoclínicos en una sesión, lo que están buscando es mejorar la calidad y están encontrando en donde estuvieron los errores y como pueden ser mejorados, yo creo que esto nos lleva a tener una gran ventaja sobre la invención de la calidad como un proceso. Se dice, tomando el concepto de la calidad total y las tendencias de calidad, que el consumidor es el que debe calificar la calidad, yo creo que los pacientes no necesariamente están capacitados para saber la calidad de los procesos, hay necesidades sentidas que si tienen los pacientes y otras que son las necesidades reales. Hablando un poco de la cirugía, una cosa es lo que al paciente le gustaría como resultado de esa cirugía y que no hubiera molestias y otra es lo que el paciente requiere y donde el médico tiene el deber y la obligación de estar conciente de lo que debe hacer. De ahí lo que decía el doctor Rivero: algo muy importante es la percepción de la calidad, que resulta diferente según quien lo diga. Para el médico una atención de calidad es que todo salga bien, que tenga todos los recursos a la mano etc. etc., para el paciente que no tenga dolor, que se recupere inmediatamente o antes si es posible etc. etc., para el administrador es otra cosa y todo depende de donde se den los eventos. Para el administrador la calidad en la atención médica es que se gaste menos, que no se desperdicien los recursos, según su criterio y si es un área de lucro pues todavía peor. Hay otros factores que califican la calidad para ellos, de tal manera que esto de alguna manera tiene que quedar muy claro, calidad aquí en abstracto no significa nada, hay que aterrizarlo, debería ser realmente la calidad de la atención médica. Terminando por el principio, me gustaría saber si el doctor Torres valadez, tiene idea clara de lo que hay que hacer en innovación de estos procesos de calidad. Por más que le doy vuelta yo creo que la calidad se da por una serie de circunstancias, entre ellas los comités pero no es solamente eso. Si hablamos de calidad medica, tenemos que hablar de la calidad de la enseñanza, tenemos que hablar de la actualización de todos los recursos. Que hacer, yo creo que ahí es donde entra para mi gusto -y así lo he hecho también durante mi vida como directivo de hospitales- tener un grupo de planeación que capte todo lo que se esta dando en el hospital y que sea propositivo, para lograr cosas nuevas. Esa seria la propuesta, tener un grupo de planeación prospectiva que pudiera ser el que llevara esta doctrina de la innovación, me preocupa un poco como aterrizar la vigencia de los círculos de calidad.

Dr. Roberto Kretschmer: También me sumo a la felicitación al trabajo del doctor Torres Valadez, por el tema que a algunos nos parecería de entrada árido, pero que lo logra hacer de una contundencia clara muy interesante, porque esto es lo cotidiano. Hacer trabajar un hospital con la intención de hacerlo quizá mejor. Comparto algo que entreveo en lo que comentaba esto: comienza con un titulo muy como de reto, de pregunta, yo me esperaría al final en forma igualmente breve no sé si un si o un no o hágase esto y lo encuentro diluido en tres páginas, en donde si hace referencia a la pregunta, pero demasiado diluido para mi gusto, se antoja que terminara con una contundencia, si o no hay que cambiarlos. La respuesta a esa pregunta se empieza a gestar en la página 13 y sigue y se diluye cuando que comenzó con una explosión. El otro punto que me gustaría tocar es que también estoy muy de acuerdo con el doctor Rivero, es que cuando usted comenzaba a leer el primer párrafo dije: ¿ y por que se va a circunscribir al sector oficial y la seguridad social?, Luego me di cuanta que son dos mundos completamente diferentes desde su nacimiento y su estructuración como dice el doctor Rivero, son sanatorios y no hay estructura realmente, son anécdotas diarias, a ver que pasa. En esto de la calidad hay un extremo de definiciones, lo que espera el paciente es una cosa y lo que la medicina sabe que es el máximo que puede dar es otra y a veces la distancia es muy grande. Como pediatra les puedo decir que es muy fácil ver salir gentes felices de un hospital de niños, que entran deshidratados y salen caminando porque la infancia es así, pero haber como hacen satisfactores de calidad tan fácilmente en un hospital de oncología donde no hay remedio. Es una gama muy grande de definiciones de calidad, la multiplicidad de comités es la que más o menos le da solidez al proceso, quisiera terminar hablando de algo que veo como un peligro, vaga como es la calidad, la van a sustituir con publicidad, con cartelones. Hay un hospital en el que uno llama y antes de recibir la cascada de opciones se queda uno dormido, en la primera dicen que es el centro de excelencia en la atención médica en México, y se pregunta uno a que punto voy a llegar, como la definieron. Quien decide, eso esta bien cuando fabrica uno calcetines y dice que son los mejores del mundo, pero en esto de la medicina hay que tener mucho más cuidado.

Había un tema de los medios y la medicina que no sé si se cancelo o se va a hacer. Hasta que punto la simulación de calidad, la simulación de excelencia, esta empezando a sustituir la realidad, los hospitales mejores que en mi corta experiencia he visto, han sido poco elegantes, hasta groseramente feos y sin embargo la excelencia ha sido de primera y ahora es el otro extremo, en una excelencia faraónica casi hotelera y pretenden que hay calidad y lo peor es que la gente se lo puede tragar por un tiempo, hasta que se den cuenta duramente que no era así, entonces me gustaría que se señalara o que se reavivara el tema de hasta que punto los medios la publicidad esta sustituyendo la realidad, lo importante no es lo que es, sino como le digo que es.

Dr. Fernando Martínez Cortés: El trabajo es el reflejo de un interés por algo que se ha vivido con aspectos muy negativos, yo creo que no es fácil que nosotros establezcamos criterios de calidad en los hospitales. Hablando del hospital general yo quisiera también que nos situáramos en el tiempo, porque no es lo mismo lo que sucedió al trabajar como directivo en un hospital hace 30 años, como lo que esta sucediendo ahora. No conozco otros hospitales a fondo, nuestra dirección por los setentas era dirigir a grandes lideres en la medicina, es muy diferente a dirigir puras infanterías. No estoy muy ducho en esto del ejercito, pero entonces era Alejandro Celis era Clemente Robles etc., el director tenia más bien que coordinar esas actividades y esas grandes gentes, por que ellos eran el núcleo que estaba formando personal de neumología, claro que había otras gentes que se creían figuras y estas eran las difíciles, porque adoptaban las mismas conductas que los que estaban dando el prestigio a la medicina del hospital. Era un tipo de ejercer la dirección o la autoridad de otra manera, es decir no solamente entre pares sino tal vez de súper pares, eran gente con gran prestigio y que además lo estaban haciendo muy bien y en eso se fincaba el hospital. Dividimos teóricamente el hospital en esas grandes figuras y en otras que se creían tales, pero que no funcionaban y ahí fue donde empezaron a trabajar ciertos comités, como el de tejidos. Para que un comité de tejidos funcione bien necesita tener un buen patólogo que respalde muy bien; Pérez Tamayo, con nosotros resultó muy bien pero con muchas dificultades, con muchos problemas que suscita el comité de tejidos entre el grupo del hospital, si no hay buen respaldo y habitualmente el respaldo superior no es bueno cuando empiezas a ejercer cierto ruido en la comunidad, porque lo que se quiere es que no hagan olas. La persona que tú suspendes se va a quejar al sindicato etc., era difícil. Ahora la administración o la dirección del Hospital General, debe ser de otro modo. Desde que me retire no he vuelto al hospital General pero desde lejos veo que esas grandes figuras de la medicina ya no existen que es otro tipo de dirección. Veo también ahora que el Hospital General se divide en directores y subdirectores y lo que resta, no sé que personal reste, pero hay directores y subdirectores de lo que resta. No sé si esa súper administración conduzca a cosas muy concretas y buenas.

Por otro lado yo quisiera sumarme a la idea del doctor Rivero, sobre la ética de la práctica médica, ya más de una vez me han oído que justamente nuestro interés es el de la ética, de lo que hacemos todos los días los médicos, sin olvidar que la bioética, es la bioética de los grandes problemas, pero no son los problemas que vemos todos los días, sería un tema importante para nuestro seminario: "La ética del ejercicio de la medicina", tengo la experiencia vivida también durante muchos años, -desde que fundamos aquel seminario para el estudio de la medicina del hombre en su totalidad-, de que los filósofos tienen su punto de vista de la ética y de la bioética como los antropólogos de la antropología etc., y que el nuestro es a veces bastante diferente y a donde llegamos es, que los filósofos nos dieran algunas conferencias de filosofía para que nosotros aprendiéramos ciertas bases del utilitarismo de Bentham, que cosa es esto, que cosa es lo otro y viéramos que es lo que justamente se adecue a muestra profesión, porque ellos siempre hablan desde la teoría y nosotros tenemos que hablar desde la práctica, esa teoría aplicada a lo que hacemos todos los días. A mí me reprocharon que era utilitarista, en el sentido torcido que se la ha dado al utilitarismo, cuando yo pienso que la mejor ética para el médico es la de Jeremías Bentham, pero incluido a lo que se llama ética personalista. Jeremías Bentham dijo que lo mejor es lo bueno, que lo bueno es lo útil y para mí, lo bueno es lo útil para la solución del problema de salud del paciente, y no nos metemos con Aristóteles ni con Huges, porque no es el caso. Necesitamos llegar a una ética práctica que sea asimilable por prácticamente todos los médicos.

Dr. Fermín Valenzuela: A mí me gusto mucho el trabajo del doctor Torres Valadez, encontraría varias cosas que me preocupan, primero, dentro de la gran área gris que representa la palabra y el término "calidad", un problema que esta surgiendo -y no veo que se trate en este documento y me parece fundamental-, es como se ha querido suplir el verdadero concepto de calidad por normatividad. Que es lo que estamos viendo ahora, lo que estamos viendo son una gran cantidad de indicadores que hay que cumplir, independientemente de que pase con la labor sustantiva. Lo veíamos mucho en la junta de gobierno del Hospital General, regañaban al director porque no se cumplían los indicadores y él decía que lo importante es el aspecto médico. El doctor Rivero tuvo una intervención bastante fuerte en ese sentido porque por cumplir indicadores se nos olvidan lo que son las labores sustantivas. El peligro de que la calidad se confunda con el cumplimiento normativo es un peligro que existe realmente, y que según mi punto de vista es secundario un poco a la falta de definición de lo que es la calidad en los servicios médicos; les quiero poner un ejemplo que me acaba de suceder: tuve una inspección por la Secretaría de Salud a una de las unidades, me preguntaron dónde estaba mi procedimiento de capacitación, se los enseñe y que donde existía la evidencia del cumplimiento, entonces le dije mire tenemos un programa de postgrado en farmacología clínica, las cuatro gentes que participan aquí, están inscritos en ella, dos de las gentes que participamos somos profesores etc., y aquí esta todo esto y como ven está aprobado por el consejo técnico en la Facultad de Medicina, pero donde esta su bitácora de asistencia insistió, no tenemos bitácora de asistencia dije, y donde está su firma en cada una de estos documentos, yo no acostumbro hacer eso, como resultado a la Universidad Nacional Autónoma de México le pusieron una nota diciendo que no había evidencia del cumplimiento de formación de recursos humanos. Lo digo nada más para que nos demos cuenta de lo grotesco que puede llegar a ser esto. Estamos muy preocupados porque el zapato este limpio y bien amarrado y se nos olvida revisar la suela para evitar que no tenga agujeros y para lo que tiene que servir. Para mí esto es una preocupación grande que estoy viendo cada vez con mayor insistencia y lo que esta sucediendo, también como parte de esto mismo, es que no hay verdaderos expertos. Me acuerdo que algún día él maestro Chávez me dijo, -me quejaba de que no había un experto para alguna cosa que estaba pidiendo que hiciera- "pues es muy fácil, si no hay expertos invénteselos, invéntese un experto". Esto de la cultura de la calidad esta muy bien en el discurso, pero no ha sido todavía arraigado en el interior, ni de las instituciones. ni de las personas, no es en general estoy seguro que mucha gente tiene muy claro y que personalmente todos queremos hacer lo mejor que podamos, no tengo duda de eso. Pero lo que es esta cultura de la calidad, como lo ha venido mencionando Demy, nos ha llevado a una cosa terrible, hemos sustituido calidad verdadera por normatividad y expertos verdaderos por invenciones de Wal Dysney y estamos muy preocupados por que las formas se cumplan independientemente del fondo. Es algo a lo que todos los que tenemos que ver con la dirección y que nos supervisan, nos monitorean, nos autorizan y nos certifican, nos tenemos que enfrentar. Debería haber un cambio, es algo que en el documento debería tratarse, porque realmente uno de los cambios importantes es que estos comités vayan introyectando en serio el concepto de calidad y no el concepto de la seudo normatividad de la calidad.

Dr. José Luis Ortigosa Ramírez: Infiero que mucho de lo que está ahí escrito es algo personal del doctor en su dirección del Hospital Militar, porque en realidad da la impresión de que estos círculos de calidad o sea estos grupos, funcionan como círculos de calidad. Mi impresión personal es que para cubrir el concepto de círculos de calidad, el individuo tiene que meterse mucho ahí. Estamos viendo el número de comités que existen en el hospital y el número de médicos que asisten. Un médico tiene que asistir a 3 ó 4 comités y si quiere actuar en forma estricta como lo exige el círculo de calidad, prácticamente se pasaría una gran cantidad de tiempo en su trabajo administrativo. Desde este punto de vista creo que difícil que pueda funcionar así, yo estoy de acuerdo en que en realidad estos comités funcionan para cumplir con la normatividad y que tienen que trabajar porque así esta explícito en los documentos con los cuales los certifican como hospitales que funcionan con calidad. Están bien encaminados para cumplir estándares, que inclusive se llaman estándares de calidad, la mayoría de ellos son numéricos, porcentuales. Indicador es la división entre algo que fue y lo que pretendemos que sea lo adecuado. Si bien pudieran haber funcionado adecuadamente en el Hospital Militar, dentro de nuestras instituciones, -excepto algunos hospitales muy específicos- simplemente sirven para cumplir normatividad. Estuvimos trabajando en los estándares para evaluar la calidad de los hospitales, vimos que había muchos problemas en los hospitales y que en la mayoría de ellos únicamente se cumplen indicadores para decir que eso es igual a calidad. Esto es un concepto muy personal.

Dr. Octavio Rivero: El programa para este año es que salga en el primer semestre el segundo tomo del "Ejercicio actual de la medicina" y en el segundo semestre se pudiera sacar el otro libro que tenemos pendiente sobre " Las modificaciones de la medicina en los últimos 50 años" y quiero pedirles que a partir de abril todos nos propusiéramos desarrollar algún tema de ética del ejercicio médico, con el objeto de contar con material para que en el 2003, se edite un libro sobre "Ética del ejercicio medico". Estoy tratando de obtener recursos de la Universidad con alguno de los programas que existen de apoyo y me preguntaron, ¿para que les sirve a los alumnos de medicina lo que hacen? porque tengo que encontrar algún mecanismo para poder obtener el apoyo a través de alumnos y pensé que lo que hacemos es material para historia y filosofía de la medicina. Lo que hacemos aquí en realidad es una reflexión sobre la filosofía de la medicina actual. Queda perfectamente bien que intentemos que el trabajo de los próximos 12 ó 14 meses, sean temas de ética del ejercicio médico, con el objeto de que se pueda utilizar para el web de la Facultad de Medicina, que ustedes ya han visto que existe y que están los trabajos del grupo. También con la intención de hacer una reunión en la Academia Nacional de Medicina, -quizá cuando sea presidente uno de nuestros miembros-, de un día completo sobre ética del ejercicio médico. Quiero pedirles que piensen y reflexionaran para que nos propongan temas para el resto del año y parte del año que viene sobre ética del ejercicio médico.

Dr. Tanimoto: La próxima reunión será el miércoles 20 de marzo con un tema que nos presentará el doctor Pedro Rizo sobre Medicina Preventiva, no será el viernes último de marzo porque coincide con semana santa, ni el viernes 22 por la posibilidad de puente.

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