Gentamicina
Solución inyectable
Antibiótico

FORMA FARMACÉUTICA Y FORMULACIÓN:

Cada ml de SOLUCIÓN INYECTABLE contiene:

Sulfato de gentamicina equivalente a.................................................. 20, 80 y 160 mg
de gentamicina base

Vehículo, c.b.p. 2 ml.

 

INDICACIONES TERAPÉUTICAS:

GENTAMICINA es un antibiótico aminoglucósido de amplio espectro. Actúa sobre bacterias gramnegativas aerobias, incluyendo enterobacteriáceas, Pseudomonas y Haemophilus. Actúa también sobre estafilococos (Staphylococcus aureus y Staphylococcus epidermidis) incluyendo cepas productoras de penicilinasa, tiene actividad muy limitada sobre estreptococos. Carece de actividad sobre bacterias anaerobias.

GENTAMICINA inyectable está indicada en infecciones causadas por gérmenes sensibles:

Infecciones abdominales.

Infecciones de piel y tejidos blandos.

Infecciones gastrointestinales.

Infecciones biliares.

Infecciones genitourinarias que incluye infecciones complicadas y recidivantes.

Infecciones óseas.

Infecciones en quemaduras.

Otras infecciones: Meningitis, septicemia, peritonitis, listeriosis, peste, neumonía (Klebsiella-Pseudomonas) granuloma inguinal.

 

FARMACOCINÉTICA Y FARMACODINAMIA:

GENTAMICINA es un aminoglucósido. Antibiótico bactericida al menos bajo condiciones aeróbicas, esta actividad se reduce bajo condiciones anaeróbicas y de hiperosmolaridad.

GENTAMICINA se une a la subunidad 30s de los ribosomas bacterianos, produciendo un complejo de iniciación 70s de carácter no funcional.

Las concentraciones plasmáticas máximas son de 6 µg/ml con dosis I.M. de 1.5 mg/kg de 11 µg/ml con dosis I.M. de 3 mg/kg, de 5 µg/ml con bolo I.V. de 40 mg/m2. El tiempo preciso para alcanzar (Tmáx) es de 1 hora por vía I.M.

GENTAMICINA es distribuida por los tejidos y fluidos orgánicos, alcanzando concentraciones adecuadas (50-100% de las plasmáticas). Las mayores concentraciones se alcanzan en los riñones, aunque también se obtienen valores adecuados en pulmones, corazón y musculatura esquelética. GENTAMICINA se difunde mal a través de las meninges, en ausencia de inflamación.

En pacientes con meningitis se alcanzan concentraciones terapéuticas. Se difunde a través de la placenta, alcanzando concentraciones sanguíneas fetales equivalentes al 30-40% de las plasmáticas. La unión a proteínas plasmáticas es de 5-9%.

GENTAMICINA se excreta por la orina (98%) de forma inalterada. Tiene una vida media de 4 horas.

Después de la administración intramuscular de sulfato de GENTAMICINA, la concentración sérica pico del inyectable ocurre entre 30 a 60 minutos, y los niveles séricos son medibles entre 6 a 8 (12 para la fórmula pediátrica) horas. En los lactantes de 1 semana a 6 meses, la vida media es de 3 a 3.5 horas.

En lactantes y prematuros menores de 1 semana, la vida media sérica de GENTAMICINA es aproximadamente de 5.5 horas. En lactantes prematuros pequeños, la vida media está inversamente relacionada con peso al nacimiento.

En los lactantes prematuros que pesan menos de 1,500 gramos, la vida media es de 11.5 horas; en los que pesan de 1,500 a 2,000 gramos es de 8 horas, y en aquellos que pesan más de 2,000 gramos es de aproximadamente 5 horas.

GENTAMICINA como los otros aminoglucósidos puede acumularse en el suero y en los tejidos de los pacientes tratados con altas dosis y/o periodos prolongados, en particular en presencia de función renal inmadura o deteriorada.

En los pacientes con función renal inmadura o deteriorada, GENTAMICINA se elimina del organismo más lentamente que en los pacientes con función renal normal.

A mayor deterioro de la función real, es más lenta la eliminación por lo que se deberá ajustar la dosificación.

En los pacientes con quemaduras graves, la vida media puede estar significativamente disminuida y resultar en concentraciones séricas menores a las anticipadas de la dosis en mg/kg.

Las concentraciones de GENTAMICINA decrecen en forma bifásica posterior a la última dosis administrada. Hay una disminución rápida inicial, y posteriormente una fase lenta por lo que se pueden medir niveles séricos hasta 10 días o más, después de la última dosis administrada.

GENTAMICINA se reabsorbe de la luz de los túbulos proximales alcanzándose niveles cortica­les hasta 100 veces mayores que en el suero.

Después de la administración inicial en un paciente con función renal normal, por lo general 70% o más de la dosis de GENTAMICINA se recupera en la orina en 24 horas, y se pueden alcanzar concentraciones por arriba de 100 mcg/ml. La transformación metabólica en el hígado es mínima o nula, el medicamento se excreta principalmente por filtración glomerular. Después de varios días de tratamiento, la cantidad de GENTAMICINA excretada en la orina es cercana a la dosis diaria administrada.

Después de la administración parenteral, GENTAMICINA se puede detectar en suero, tejido linfático, esputo (25-50% de los niveles séricos) y en los líquidos sinovial, pleural y peritoneal. Las concentraciones en la corteza renal algunas veces pueden ser hasta 8 veces mayores que los niveles séricos usuales.

En general, las concentraciones en bilis han sido bajas y sugieren una excreción biliar mínima. GENTAMICINA cruza la membrana peritoneal y la barrera placentaria (alcanzando niveles de 30-40%). Debido a que los aminoglucósidos se difunden pobremente en el espacio subaracnoideo después de la administración por vía parenteral, las concentraciones de GENTAMICINA en el líquido cefalorraquídeo a menudo son bajas y dependen de la dosis, velocidad de penetración y grado de inflamación de las meninges.

La penetración a los tejidos oculares después de la administración intramuscular o intravenosa es mínima. GENTAMICINA penetra a los eritrocitos y a los polimorfonucleares, alcanzando niveles del 10 y 80%, respectivamente, en relación con los niveles séricos. Se excreta en la leche materna en cantidades mínimas. Las concentraciones en el LCR obtenidas después de la administración intravenosa o intramuscular de sulfato de GENTAMICINA tienden a ser menores a medida que la inflamación de las meninges disminuye.

Después de la administración intralumbar puede existir una limitada difusión ascendente del medicamento, presumiblemente debido a la dirección del flujo del LCR.

La administración intraventricular produce altas concentraciones en los ventrículos y a través del sistema nervioso central. En general, resultan niveles adecuados de la dosificación cada 24 horas, pero es preferible manejar la infección de cada paciente por medio de determinaciones en serie de las concentraciones séricas y del LCR.

 

CONTRAINDICACIONES:

Antecedentes de hipersensibilidad o reacciones tóxicas graves a GENTAMICINA u otros aminoglucósidos.

 

PRECAUCIONES GENERALES:

Los enfermos tratados con aminoglucósidos deberán estar bajo observación clínica estrecha debido a la posible toxicidad asociada a su uso. Los aminoglucósidos son antibióticos neurotóxicos y nefrotóxicos que se absorben en cantidades importantes en las superficies corporales después de la irrigación o la aplicación local. Se deberá considerar el potencial del efecto tóxico de los antibióticos administrados de esta manera.

Se ha reportado un aumento en la nefrotoxicidad después de la administración concomitante de los antibióticos aminoglucósidos y las cefalosporinas.

Debe determinarse periódicamente el nitrógeno ureico en sangre, la creatinina sérica o la depuración de creatinina.

Las concentraciones séricas máximas o mínimas de aminoglucósidos pueden aumentar el riesgo de toxicidad renal y del octavo par craneal.

Los aminoglucósidos se deberán utilizar con precaución en pacientes con enfermedades neuromusculares como miastenia gravis, Parkinson o botulismo infantil, ya que estos medicamentos pueden agravar la debilidad muscular debido a sus efectos potenciales curariformes en la placa neuromuscular.

Durante o después del tratamiento con GENTAMICINA, se han descrito parestesias, tetania, signo positivo de Chvostek y Trousseau y confusión mental en pacientes con hipomagnesemia, hipocalcemia e hipocaliemia. Cuando esto ocurre en lactantes, se ha observado tetania y debilidad muscular. Se requiere tanto en niños como en adultos de una terapia electrolítica adecuada.

Se debe evitar el uso sistémico o tópico concomitante, y/o secuencial, de otros medicamentos neurotóxicos y/o nefrotóxicos como cisplatino, cefaloridina, kanamicina, amikacina, neomicina, polimixina B, colistina, paromomicina, estreptomicina, tobramicina, vancomicina y viomicina. Otros factores que pueden aumentar el riesgo de toxicidad para el enfermo son la edad avanzada y la deshidratación.

Se debe evitar el uso concomitante de GENTAMICINA con diuréticos potentes como el ácido etacrínico o la furosemida, ya que ciertos diuréticos son per se ototóxicos.

Además, cuando los diuréticos se administran por vía intravenosa pueden potenciar la toxicidad del aminoglucósido, alterando la concentración del antibiótico en el plasma y en los tejidos.

Los pacientes ancianos presentan una reducción en la función renal que puede no ser evidente en los resultados de los análisis de rutina, como nitrógeno ureico o creatinina sérica.

Puede ser más útil la determinación de la depuración de crea­tinina. La vigilancia de la función renal durante el tratamiento con GENTAMICINA, como con otros aminoglucósidos, es particularmente importante en estos pacientes.

Se ha reportado un síndrome parecido al de Fanconi con aminoaciduria y acidosis metabólica en algunos adultos y niños que recibieron inyecciones con GENTAMICINA. Se ha demostrado alergenicidad cruzada entre los aminoglucósidos. Durante el tratamiento, los pacientes deben estar bien hidratados. Aunque la mezcla in vitro de GENTAMICINA y carbenicilina resulta en una inactivación rápida e importante de GENTAMICINA, esta interacción no se ha demostrado en pacientes con función renal normal que recibieron ambos medicamentos por diferentes vías de administración.

Se ha reportado reducción de la vida media sérica de GENTAMICINA en pacientes con insuficiencia renal grave y que recibieron carbenicilina concomitante.

Algunas marcas de sulfato de GENTAMICINA inyectable contienen bisulfito de sodio, el radical sulfito puede causar reacciones de tipo alérgico, incluyendo síntomas anafilácticos y episodios asmáticos graves y potencialmente fatales en pacientes susceptibles.

No se conoce la prevalencia de la sensibilidad al sulfito en la población general, aunque probablemente sea baja. La sensibilidad al sulfito es más frecuente en personas asmáticas.

 

RESTRICCIONES DE USO DURANTE EL EMBARAZO Y LA LACTANCIA:

Categoría de riesgo C: Los antibióticos aminoglucósidos atraviesan la barrera placentaria y pueden ocasionar daño fetal si se administran en mujeres embarazadas. Existen varios reportes de sordera congénita total bilateral irreversible en niños cuyas madres recibieron estreptomicina durante el embarazo.

No se han reportado efectos colaterales graves a la madre, feto o recién nacido durante el tratamiento en mujeres embarazadas con otros aminoglucósidos.

Se desconoce hasta donde el sulfato de GENTAMICINA puede causar daño fetal cuando se administra a una paciente embarazada, o si puede afectar la capacidad de reproducción. Si se usa GENTAMICINA durante el embarazo, o si la paciente se embaraza durante la administración de GENTAMICINA, se le debe informar del potencial daño al feto. En mujeres que están amamantando, GENTAMICINA se excreta en cantidades mínimas a través de la leche materna.

 

REACCIONES SECUNDARIAS Y ADVERSAS:

Nefrotoxicidad: Los efectos renales adversos como se demuestra por la presencia de cilindros, células, proteína en la orina, por un aumento en el nitrógeno de la urea, nitrógeno no proteico, creatinina sérica u oliguria, han sido reportados y con mayor frecuencia ocurren en pacientes con una historia de disfunción renal y en los tratados por largos periodos con dosis mayores a las recomendadas.

Neurotoxicidad: Se han observado efectos adversos graves en las ramas vestibular y auditiva del octavo par craneal, en especial, en pacientes con deterioro renal (en particular si requieren diálisis) y en los tratados con altas dosis y/o terapia prolongada.

Los síntomas incluyen mareo, vértigo, ataxia, tinnitus, pérdida auditiva, la cual como sucede con otros aminoglucósidos puede ser irreversible. En general, la pérdida auditiva se manifiesta en su inicio con una disminución de la audición de altas frecuencias.

Otros factores que pueden aumentar el riesgo de toxicidad incluyen las dosis excesivas, deshidratación y la exposición previa con otros medicamentos ototóxicos.

Se han reportado neuropatía periférica o encefalopatía, incluyendo adormecimiento, hormigueo de la piel, fasciculaciones musculares, convulsiones y un síndrome similar a miastenia gravis.

Nota: El riesgo de reacciones tóxicas es bajo en pacientes con función renal normal que no reciben sulfato de GENTAMICINA inyectable a altas dosis, o por periodos más largos a los recomendados.

Otras reacciones adversas reportadas que posiblemente están relacionadas con GENTAMICINA incluyen, depresión respiratoria, letargia, confusión, depresión, alteraciones visuales, disminución del apetito, pérdida de peso, hipotensión e hipertensión, erupciones cutáneas, prurito, urticaria, ardor generalizado, edema laríngeo, reacciones anafilácticas, fiebre y cefalea, náusea, vómito, aumento de salivación y estomatitis; púrpura, seudotumor cerebral, síndrome orgánico cerebral agudo, fibrosis pulmonar, alopecia, dolor de articulaciones, hepatomegalia transitoria y esplenomegalia.

Mientras que la tolerancia local del sulfato de GENTAMICINA inyectable es en general excelente, existen reportes ocasionales de dolor en el sitio de la inyección. También hay reportes ocasionales de atrofia subcutánea o necrosis lipoídica que sugieren irritación local.

Se ha reportado evidencia de disfunción del octavo par craneal, cambios en la función renal, calambres en las piernas, erupción cutánea, fiebre, convulsiones, y un aumento en la concentración de proteínas en el líquido cefalorraquídeo en los pacientes tratados de manera concomitante con la inyección intratecal de sulfato de GENTAMICINA y la preparación parenteral de GENTAMICINA.

 

INTERACCIONES MEDICAMENTOSAS Y DE OTRO GÉNERO:

No se han reportado a la fecha.

 

ALTERACIONES EN LOS RESULTADOS DE PRUEBAS DE LABORATORIO:

Las anormalidades de laboratorio posiblemente relacionadas con GENTAMICINA son: aumento de los niveles de transaminasas séricas (SGOT, SGPT), deshidrogenasa láctica y bilirrubina sérica; disminución de calcio, magnesio, sodio y potasio séricos; anemia, leucopenia, granulocitopenia, agranulocitosis transitoria, eosinofilia, aumento o disminución en la cuenta de reticulocitos y trombocitopenia.

Mientras que las anormalidades clínicas en las pruebas de laboratorio pueden ser hallazgos aislados, éstos pueden estar asociados con signos y síntomas clínicamente relacionados, por ejemplo, la presencia de tetania y debilidad muscular pueden estar asociadas con hipomagnesemia, hipocalcemia e hipocaliemia.

 

PRECAUCIONES EN RELACIÓN CON EFECTOS DE CARCINOGÉNESIS, MUTAGÉNESIS, TERATOGÉNESIS Y SOBRE LA FERTILIDAD:

No se han reportado a la fecha.

 

DOSIS Y VÍA DE ADMINISTRACIÓN:

El sulfato de GENTAMICINA inyectable puede administrarse por vía intramuscular o intravenosa. Se debe obtener el peso del paciente antes del tratamiento, para el cálculo correcto de la dosificación.

La dosificación de aminoglucósidos en pacientes obesos se deberá basar en un estimado de la masa corporal magra. Es recomendable limitar la duración del tratamiento con aminoglucósidos a un corto tiempo.

Se recomienda realizar la determinación de las concentraciones séricas de GENTAMICINA, para asegurar niveles adecuados pero no excesivos. Después de la administración intravenosa o intramuscular de GENTAMICINA inyectable, dos o tres veces al día, la concentración máxima, medida entre 30 minutos a 1 hora después de la administración, se espera que esté entre 4 a 6 mcg/ml.

Con la administración de una dosis diaria, se pueden anticipar concentraciones pico elevadas pero transitorias. Con todos los esquemas se deberá ajustar la dosis para evitar concentraciones prolongadas por arriba de 12 mcg/ml. También se deben evitar niveles máximos mayores de 2 mcg/ml, medidos justo antes de la administración de la siguiente dosis. Para determinar si un nivel sérico es adecuado para un paciente en particular, se debe considerar la sensibilidad del germen causal, la severidad de la infección y el estado inmunológico del paciente.

La duración del tratamiento para todos los pacientes es de 7 a 10 días. En infecciones por complicaciones se pueden requerir periodos más largos de terapia.

Administración intramuscular:

Adultos:

Para los pacientes con infecciones graves y función renal normal: La dosis recomendada de sulfato de GENTAMICINA inyectable es de 3 mg/kg/día, administrados en tres dosis iguales cada 8 horas, o dos dosis iguales cada 12 horas, o bien, una dosis diaria.

En enfermos con infecciones que amenazan la vida: Se les puede administrar una dosis hasta de 5 mg/kg/día, repartidos en tres o cuatro dosis iguales. Esta dosificación se deberá reducir a 3 mg/kg/día, tan pronto como esté indicado clínicamente.

En enfermos con infecciones urinarias: En particular si son crónicas o recurrentes, y sin evidencia de insuficiencia renal, que pesen 50 kg o más, GENTAMICINA puede administrarse por vía intramuscular en una dosis de 160 mg una vez al día durante 7 a 10 días.

Para adultos que pesen menos de 50 kg: La dosis diaria única deberá ser de 3.0 mg/kg de peso corporal.

Cuando sea posible, es recomendable determinar periódicamente las concentraciones séricas pico y mínimas de GENTAMICINA durante el tratamiento, para asegurar niveles adecuados pero no excesivos del medicamento.

Cuando se determinen las concentraciones pico después de la administración intramuscular o intravenosa, la dosificación se deberá ajustar para evitar niveles prolongados por arriba de 12 mcg/ml.

Cuando se determinen las concentraciones mínimas (justo antes de la siguiente dosis), se deberá ajustar la dosificación para evitar niveles por arriba de 2 mcg/ml.

La determinación de un nivel sérico adecuado, para un paciente en particular, considera la susceptibilidad del organismo etiológico, la severidad de la infección y el estado inmunológico del paciente.

Pacientes pediátricos:

Prematuros o recién nacidos de 1 semana o menos: 5-6 mg/kg/día (2.5-3 mg/kg cada 12 hrs).

Recién nacidos de más de una semana y lactantes: 7.5 mg/kg/día (2.5 mg/kg administrados cada 8 hrs).

Niños: 6-7.5 mg/kg/día (2.0 a 2.5 mg/kg administrados cada 8 hrs).

La duración usual del tratamiento para todos los pacientes es de 7 a 10 días. En infecciones difíciles y complicadas puede ser necesario un curso más prolongado de tratamiento.

En estos casos se recomienda la vigilancia de la función renal, auditiva y vestibular debido a que la toxicidad es más probable que ocurra con el tratamiento por más de 10 días.

La dosificación se debe reducir si está clínicamente indicado.

Enfermos con insuficiencia renal: Se deberá ajustar la dosificación en los pacientes con deterioro de la función renal para asegurar una terapéutica adecuada, pero sin alcanzar niveles sanguíneos excesivos.

Siempre que sea posible, se deberán determinar las concentraciones séricas de GENTAMICINA.

Un método de ajuste de dosificación es aumentar el intervalo entre la administración de las dosis usuales. Debido a que la concentración de creatinina sérica tiene una alta correlación con la vida media sérica de GENTAMICINA, esta prueba de laboratorio puede servir como guía para el ajuste del intervalo entre las dosis.

En el adulto, el intervalo entre las dosis (en horas) se puede calcular al multiplicar el nivel de creatinina sérica (mg/100 ml) por 8. Se debe considerar esta guía cuando se trate de lactantes y niños con deterioro grave de la función renal.

En los pacientes con infecciones sistémicas graves y deterioro de la función renal, puede ser necesario administrar el antibiótico con mayor frecuencia, pero con una dosis reducida.

En estos pacientes, las concentraciones séricas de GENTAMICINA se deberán determinar para obtener niveles adecuados, pero no excesivos.

Las concentraciones pico y mínimas determinadas de manera intermitente durante el tratamiento pueden proporcionar una guía óptima para el ajuste de la dosificación. Después de la dosis inicial usual, una guía para determinar la dosis reducida a intervalos de 8 horas es dividir las dosis normalmente recomendadas entre el nivel de creatinina sérica.

Se debe hacer notar que el estado de la función renal puede cambiar durante el curso del proceso infeccioso.

Administración intravenosa: La administración intrave­nosa de GENTAMICINA puede ser particularmente útil para el tratamiento
de pacientes con septicemia bacteriana o en choque. También puede ser la vía preferida para algunos pacientes con insuficiencia cardiaca congestiva, alteraciones hematológicas, quemaduras severas, o en aquéllos con una reducida masa muscular.

Para la administración intravenosa intermitente en adultos, la dosis única de sulfato de GENTAMICINA inyectable, puede diluirse en 50 a 200 ml de solución salina isotónica estéril o en una solución estéril de dextrosa al 5% en agua; en lactantes y niños, el volumen de diluyente debe ser menor.

La solución puede administrarse por infusión en un periodo de 30 minutos a dos horas.

La dosis recomendada para la administración intravenosa e intramuscular es la misma.

El sulfato de GENTAMICINA inyectable no deberá premezclarse con otros medicamentos, deberá ser administrado por separado de acuerdo con la vía de administración recomendada en los esquemas de dosificación.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

En pacientes con insuficiencia renal en hemodiálisis, la cantidad de GENTAMICINA eliminada de la sangre puede variar dependiendo
de varios factores que incluyen el método de diálisis utilizado.

Una hemodiálisis de 8 horas puede reducir las concentraciones séricas de GENTAMICINA en aproximadamente 50%. La dosificación recomendada al final de cada periodo de diálisis es de 1 a 1.7 mg/kg, dependiendo de la severidad de la infección.

En niños, la dosis recomendada al final de cada periodo de diálisis es de 2.0 a 2.5 mg/kg, dependiendo de la severidad de la infección.

Los esquemas de dosificación arriba mencionados no tienen la intención de ser recomendaciones rígidas, pero pueden utilizarse como guías para la dosificación cuando no son posibles las determinaciones de los niveles séricos de GENTAMICINA.

Una variedad de métodos están disponibles para medir las concentraciones de GENTAMICINA en los líquidos corporales: éstos incluyen métodos microbiológicos, enzimáticos y técnicas de radioinmunoanálisis.

Administración intratecal: La inyección intratecal de sulfato de GENTAMICINA está indicada para la administración directa en los espacios del LCR del sistema nervioso central.

La dosificación varía dependiendo de factores como edad, peso del paciente, sitio de inyección y grado de obstrucción del flujo del LCR y de la cantidad estimada de LCR.

En general, la dosis recomendada para los lactantes de 3 meses de edad y mayores, y en niños es de 1 a 2 mg una vez al día.

Para adultos, 4 a 8 mg pueden administrarse una vez al día.

La administración de la inyección intratecal de sulfato de GENTAMICINA se deberá continuar hasta que el microorganismo susceptible resulte negativo en los estudios del LCR, debido a que la dosis intralumbar o intraventricular son administradas inmediatamente después de la toma de muestras para estudios de laboratorio.

El tratamiento debe continuar por lo menos un día después de que se hayan obtenido resultados negativos en los cultivos de LCR y/o los estudios de citología.

El método sugerido para la administración de la inyección intratecal de sulfato de GENTAMICINA en el área lumbar es el siguiente: Se retira de la ampolleta la cantidad de medicamento deseada para la inyección intratecal.

Una cantidad de líquido cefalorraquídeo (aproximadamente 10% de volumen total de LCR) se deja fluir dentro de la jeringa para mezclarse con la inyección intratecal de sulfato de GENTAMICINA.

La solución resultante se inyecta en un periodo de 3 a 5 minutos con el bisel de la aguja hacia arriba.

Si el líquido cefalorraquídeo es purulento, o si no se obtiene LCR, la inyección intratecal de sulfato de GENTAMICINA puede diluirse con solución salina estéril antes de la inyección.

La inyección intratecal de sulfato de GENTAMICINA también puede administrarse directamente en el espacio subdural o directamente en los ventrículos, incluyendo para su uso un “reservorio implantado”.

 

MANIFESTACIONES Y MANEJO DE LA SOBREDOSIFICACIÓN O INGESTA ACCIDENTAL:

En el evento de una sobredosis o reacciones tóxicas, la hemodiálisis puede ayudar en la eliminación de GENTAMICINA de la sangre, y es especialmente importante si está comprometida la función renal.

 

RECOMENDACIONES SOBRE ALMACENAMIENTO:

Consérvese a temperatura ambiente a no más de 30° C y en lugar seco. No se garantiza la esterilidad de este medicamento en caso de que la jeringa o el envase tenga señales de haber sufrido rotura previa. Almacenar a 2º y 30ºC.

Nota: Algunas preparaciones intratecales no contienen ningún preservador.

Una vez abierta la presentación, el contenido se debe utilizar de inmediato y las porciones no utilizadas deben desecharse.

 

LEYENDAS DE PROTECCIÓN:

Literatura exclusiva para médicos.

No se deje al alcance de los niños.

 

NOMBRE Y DOMICILIO DEL LABORATORIO:

Véase Presentación o Presentaciones.

 

PRESENTACIÓN O PRESENTACIONES:

 

 

Fuente: S. S. A. Catálogo de Medicamentos Genéricos Intercambiables para farmacias y público en general a junio de 2005.
Con el objeto de demostrar la intercambiabilidad a que se refiere el artículo 75 del reglamento de Insumos para la Salud, los medicamentos que integran el Catálogo de Medicamentos Genéricos Intercambiables han sido comparados, siguiendo los lineamientos indicados por la NOM-177SSA1-1998, contra los productos innovadores o de referencia enlistados en las págs. 31 a 39 donde usted lo podrá consultar.