Premio Nobel de Medicina 2002 Brenner, Sulston y Horvitz identificaron los genes que provocan la muerte de células El pasado 7 de octubre, los científicos británicos Sydney Brenner y John Sulston, y el estadunidense Robert Horvitz, fueron galardonados con Premio Nobel de Medicina 2002, por sus aportaciones al descubrimiento de los genes que provocan la muerte de células que los portan, como parte del desarrollo biológico de los organismos. Existe la muerte celular llamada necrosis, es decir, muerte accidental, lo cual, evolutivamente, no estaba programado; en cambio, la muerte programada, llamada apoptosis, se encuentra en la información genética de los organismos. Algunos ejemplos de la muerte celular se observan en la metamorfosis de los renacuajos, cuando las células de su cola mueren para dar paso a otras. También en el ser humano ocurre este proceso, por ejemplo, cuando los dientes de “leche” mudan en otros definitivos. Con los descubrimientos de los tres galardonados, también se ha ampliado la comprensión de enfermedades degenerativas como el Alzheimer y el cáncer, donde las células no se “suicidan”, sino que se reproducen constantemente hasta formar tumores. Se observó también que cuando la desaparición de las células es prematura, pueden surgir enfermedades neurodegenerativas o males cardiacos. Los investigadores premiados realizaron sus estudios en lombrices intestinales, particularmente una lombriz de cerca de un milímetro de largo y alrededor de mil células, llamada Caenorhabditis elegans, cuyo “programa suicida” es similar al de los humanos. Los tres científicos identificaron en este animal los genes más importantes que regulan el desarrollo de los órganos y el suicidio de las células. Los premiados desarrollaron el sistema del gusano cada uno en diferentes líneas: Brenner fue el primero en implementar el modelo experimental del nematodo (lombriz); Hortvitz investigó la muerte celular, y Sulston colaboró en la determinación de los genes, de manera que cada uno contribuyó en diferentes aspectos a la biología de la muerte celular. Cabe señalar que los galardonados identificaron las líneas celulares que contienen a los genes ced-3 y ced-4, responsables del “suicidio”. Asimismo, el descubrimiento de los mecanismos responsables de la muerte celular, permitió a Sulston entender el crecimiento de los órganos y miembros de los organismos. Con este descubrimiento se permite entender la muerte celular prematura que se presenta en padecimientos como Alzheimer y Parkinson. |