Gaceta
Facultad de Medicina UNAM
10 de mayo 2003

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Se presenta El arte del canto en la Facultad de Medicina

Bellos cantos de un tenor, una soprano y una mezzosoprano de Bellas Artes

Entre bellos cantos, datos históricos y anécdotas de las obras y los autores interpretados, el pasado 31 de marzo la Facultad de Medicina se engalanó con la presencia del proyecto Bellas Artes en la UNAM. El arte del canto, que encabeza la Dirección General de Atención a la Comunidad Universitaria (DGACU), y que tiene como objetivo fomentar y coordinar la formación artística y cultural de los jóvenes universitarios.

El programa Bellas Artes en la UNAM se ha llevado a cabo en los planteles de la Escuela Nacional Preparatoria y del Colegio de Ciencias y Humanidades y, en esta ocasión, en la Facultad de Medicina.

El objetivo principal es difundir el género del bel canto entre la comunidad de bachillerato y de licenciatura, con el fin de enriquecer su proceso de formación integral.
El elenco en cada concierto consta de una soprano, una mezzosoprano, un tenor, un pianista y un comentarista. En esta ocasión el elenco en la Facultad de Medicina fue integrado por los maestros Alicia Cascante, soprano; Ana Caridad Acosta, mezzosoprano; Alfonso Orozco, tenor, el pianista José Luis González y el comentarista Alfonso Navarrete, quienes interpretaron las obras: Vals de “Musetta” (aria de la ópera La Bohemia de Giacomo Puccini); “Habanera” (aria de la ópera Carmen, de George Bizet); “E lucevan le stelle” (aria de la ópera Tosca, de Giacomo Puccini); “Ninfa hechicera” (romanza de la operata La viuda alegre, de Franz Lehar); Zapateado de la zarzuela La tempranica, de Jerónimo Jiménez. Cuatro canciones populares: Dime que sí, de Francisco Otero; Estrellita, de Manuel M. Ponce; Así, de María Greever, y Granada, de Agustín Lara. Finalmente, “Las mañanitas” (dúo de la zarzuela Don Gil de Alcalá de Manuel Penella); “Subir, subir” (dúo de la zarzuela Luisa Fernanda, de F. Moreno Torroba), y “Libiamo, libiamo” (dúo de la ópera La traviata, de Giuseppe Verdi).

La maestra Alicia Cascante, soprano, realizó estudios de canto, piano y armonía en el Conservatorio Nacional de Música de la ciudad de México, del cual egresó diplomada en canto con mención honorífica. Posteriormente hizo estudios de posgrado en el Conservatorio Santa Cecilia de Roma y en la Academia Chiggiana (Siena). En la Compañía Nacional de Opera de Bellas Artes ha interpretado los roles de Micaela (Carmen de Bizet), Zerlina (Don Giovanni), Pamina (Die Zauberflote de Mozart), Lauretta (Gianni Schicchi de Puccini), Salud (La vida breve de Falla) y Antonia (Les contes d’Hoffman de Offenbach), entre otros. En el terreno del oratorio ha participado en el Réquiem de Mozart y en el de Verdi; La misa del Almirante Nelson y Las estaciones, de Hayden; El stabat mater de Pergolesi y el de Rossini, los Nocturnos de Chávez, las Iluminaciones de Britten y otros.

Ana Caridad Acosta, mezzoso-prano, de 1987 a 1995 participó en todas las temporadas de la Opera de Bellas Artes, cantando diversos papeles entre los que destacan Santuzza, de Caballería Rusticana, la Zia Princessa, de Sour Angélica y Ulrica de Un ballo en maschera. Ha participado en el Festival Internacional Cervantino y en las temporadas de Opera de Morelia, Guadalajara y Monterrey. Asimismo, ha interpretado zarzuela; ha ofrecido diversos recitales de lied en salas de concierto en la República. En el campo de la oratoria y música sinfónica se ha presentado con orquestas, como la Sinfónica Nacional, la Filarmónica de la ciudad de México, la Sinfónica de Minería, la Filarmónica de la UNAM, y la Orquesta de Cámara de Bellas Artes, entre otras. En 1993 recibió el premio de la Unión de Cronistas de Teatro y Música. Ha sido laureada en concursos como el Carlo Morelli, Fanny Anitúa y Voces del Pacífico de la ópera de San Francisco.

Alfonso Orozco, tenor, debutó cantando el papel de Rodolfo en la ópera La Bohemia en el Teatro Morelos de Toluca, desde entonces se ha convertido en figura obligada en las temporadas nacionales de ópera, interpretando papeles estelares del repertorio italiano y francés. Entre los papeles que ha realizado se encuentran Pinkerton, en Madamme Butterfly, Cavaradossi en Tosca, Calaf en Turandot, Canino en Payasos, Turidda en Caballería rusticana, Radamés en Aída, Don Carlos en Don Carlo, Sansón en Sansón y Dalila, y Don José en Carmen, entre otros. Se ha presentado en conciertos con las orquestas más importantes del país y del extranjero, alternando con cantantes y directores de talla internacional. Realiza frecuentes apariciones interpretando zarzuela y opereta, así como en pro-gramas de ópera para televisión mexicana.

El pianista José Luis González también es organista, director, arreglista y compositor, tiene varias obras, la más importante: Iridiscencias, que ha sido tocada por la Orquesta Sinfónica Nacional y la Filarmónica de la UNAM; además Sinfonía americana y música de cámara como Estratos, Cosmos y Arcanos. También tiene varias canciones de concierto y música popular, así como arreglos para coro mixto, canto y piano, voz y orquesta, y coro y orquesta. Ha sido maestro de la Escuela Nacional de Música de la UNAM e impartido las cátedras de conjuntos corales, repertorio vocal y análisis musical en el Conservatorio Nacional de Música. Actualmente forma parte del grupo de Concertistas de Bellas Artes y fue director del coro de la UNAM. Ha actuado en diversas compañías líricas como director de orquesta en obras como La Traviata, operetas y zarzuelas; ha sido director huésped del Coro de Madrigalistas dirigiendo La Pasión según San Juan, de Bach, con la orquesta de Cámara de Bellas Artes, y el Réquiem alemán, de Brahms, entre otras.

Alfonso Navarrete debutó en 1970 en el Palacio de Bellas Artes después de ganar un concurso para interpretar el papel de Alfredo en La Traviata, de Giuseppe Verdi. En 1979 fue contratado por la Compañía Nacional de Opera de Bulgaria, en donde interpretó los papeles principales para tenor de Rigoletto, La Bohemia, La Traviata y Tosca; en Sofía, Verna, Stara, Sagora y Provdiv, entre otras. Ha interpretado más de treinta diferentes papeles de primer tenor, además de ser el primer cantante mexicano que estrenó una ópera de Verdi en el continente americano. Se ha consolidado como primer tenor de la Compañía Nacional de Opera cantando tanto en México como en el extranjero con figuras de la lírica internacional como Shirley Verte, Cristina Deutekom, Gilda Cruz Romo y Ghena Dimitrova, entre otros. En noviembre de 1993 le fue otorgada la medalla al mérito artístico del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes y el INBA.

Al concluir la presentación en el auditorio “Dr. Raoul Fournier”, el tenor Alfonso Orozco comentó que este programa del INBA en la UNAM, que coordinan la Dirección General de Atención a la Comunidad Universitaria y la Coordinación Nacional de Música y Opera del INBA, tiene más de doce años activo y cada año se presenta en diferentes escuelas y facultades.

Comentó que durante el tiempo que lleva este programa han aprendido a conocer al público de cada escuela, y está convencido de que su esfuerzo artístico es hacía los jóvenes que están hambrientos de buena música, poesía y arte en general, y dijo: “Creo que cuando hacemos estos conciertos hacemos patria, porque los damos a quienes lo necesitan y esto es mucho más importante que presentarnos en los grandes teatros. Tenemos que cuidar a nuestros muchachos y enseñarles las cosas bellas, porque el arte también habla del amor, la muerte, etcétera, pero en términos nobles y no como en los medios de comunicación que muchas veces son vulgares.”

Aseveró que las presentaciones que ellos realizan son a partir del interés de cada escuela y facultad que pide a la DGACU les mande música, teatro, coros, ballet, cuartetos de cuerdas o exposiciones.

Finalizó expresando que ojalá otras instituciones culturales se sumaran a este tipo de proyectos y felicitó la labor que realizan la UNAM y Bellas Artes en el sentido de promover la cultura entre los jóvenes.

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