Examen profesional en el Hospital “Gea González” Ceremonia posterior al examen profesional, única en su estilo El doctor Juan José Mazón, director del Hospital General “Doctor Manuel Gea González”, dio la bienvenida al gremio médico y una cordial felicitación a los jóvenes Erika Quintana Rodríguez, Juan Francisco Gómez Velázquez y Ricardo Jiménez Góngora, con motivo de la acreditación de su examen profesional. En la ceremonia efectuada en la sala de juntas del Hospital, el pasado 7 de mayo, el doctor Mazón les dijo: “Han dado un paso trascendental en su vida, dejan de ser estudiantes de la medicina para convertirse en estudiosos de ella. Saben que no concluye con el examen la vida de estudio. Saben que uno de nuestros maestros -don Ignacio Chávez- señalaba que quien se matricula en la carrera de medicina se inscribe en una carrera vertiginosa que no termina sino con la muerte del médico o con la conclusión de la relación médico-paciente. Nuestro Hospital, como sede universitaria, les hace llegar la felicitación por su ingreso al gremio médico, pero haciéndolos conscientes de las responsabilidades que tienen dentro del ejercicio de nuestra profesión”.
Entre la lectura del Juramento Hipocrático y la Declaración de Ginebra, los jóvenes fueron felicitados por los jurados, profesores que los evaluaron y calificaron como capaces de ejercer la práctica médica en nuestra sociedad, y se les hizo entrega de una medalla conmemorativa del Hospital. En entrevista, el doctor Mazón comentó que la idea de realizar esta ceremonia surgió a partir del hecho de formalizar la presentación del examen profesional. “Hace algún tiempo indiqué al personal del Departamento de Enseñanza que cada vez que haya examen profesional, asistan los jurados, los profesores, los representantes de la Universidad y los espantados muchachos a una pequeña ceremonia donde nos presentamos con bata y estetoscopio. Les dirijo un mensaje de felicitación, se lee el Juramento Hipocrático y la Declaración de Ginebra, se les da una medalla conmemorativa y todos nos abrazamos, todo ello para que el acto no pase desapercibido”. |