Con el objetivo de implantar y mejorar la enseñanza de la microbiología y parasitología en el currículum de la carrera de medicina, los doctores Francisco Biagi y Jorge Tay aceptaron la invitación por el entonces director de la Facultad de Medicina, doctor Raoul Fournier Villada, para crear el departamento de Microbiología y Parasitología de la Facultad de Medicina.
Hasta antes de la década de los sesentas sólo existían laboratorios de microbiología y parasitología, en donde se daba la enseñanza práctica de dichas materias y se producía material para las prácticas de los alumnos; el 25 de abril de 1961 se inauguró el actual departamento de Microbiología y Parasitología que en su inició sólo contaba con un piso del edificio ``A'' de investigación de la FM; actualmente, está constituido por dos niveles y por unos 35 profesores de tiempo completo, además de que produce investigación y formación de recursos humanos a nivel de especialización, maestría y doctorado en áreas como la microbiología, virología, parasitología, micología o inmunología médica, entre otras.
Durante una entrevista concedida a este medio, el doctor Jorge Tay Zavala, jefe del laboratorio de parasitología del departamento de Microbiología y Parasitología, comentó que las personas que se han formado durante estos años en el departamento, a nivel de especialidad, maestría o doctorado y adiestrados en la práctica médica han presentado sus servicios en hospitales de asistencia y laboratorios de diagnóstico, así como en las escuelas o facultades del país y también en el extranjero. Prueba de ello, añadió, fue el curso que durante ocho años desarrolló el departamento formando especialistas en medicina tropical, en convenio con la Universidad de Luisiana, Estados Unidos; a través del cual se enviaba de ocho a diez becarios por año.
Ahora, después de casi cuarenta años de profesor, el doctor Jorge Tay Zavala comentó que siempre ha trabajado en la Facultad de Medicina. Comenzó como profesor de asignatura y, a través del tiempo, consolidó una carrera dentro de la investigación hasta llegar a su actual nombramiento de profesor de carrera, titular C. Durante todo ese tiempo fungió durante 10 años como jefe de departamento, periodo en el que creció en tamaño y recursos; hoy se desempeña como profesor y titular del laboratorio de parasitología del departamento del cual fue fundador.
El doctor Jorge Tay tiene una personalidad muy activa y versátil que se demuestra en sus investigaciones, aunque su principal línea de investigación es la enfermedad de Chagas, tripanosomiasis americana provocada por el Trypanosoma cruzi. Tema sobre el que ha publicado más de 45 artículos, mostrando diferentes aspectos: clínicos, diagnósticos, epidemiológicos, trasmisores del parásito, etcétera; hasta la fecha, suman 103 publicaciones en revistas nacionales e internacionales, donde presenta diversos aspectos de la parasitología médica; por ejemplo, la frecuencia de las parasitosis intestinales en la República mexicana, toxoplasmosis, fasciolisis, entre otros temas.
El doctor Tay, además de ser académico, es autor de cinco libros, entre ellos podemos mencionar: ``Parasitología Médica'' y ``Microbiología y Parasitología Médica'', que se utilizan como libros de texto en diversas escuelas y facultades del país. El primer caso cuenta con seis ediciones.
Cabe mencionar que entre otros cargos universitarios el doctor Tay ha sido miembro del Consejo Técnico de la FM y Consejero Universitario, presidente de la Asociación de Profesores de Microbiología y Parasitología, presidente de la Asociación Mexicana de Parasitología y, actualmente es miembro de la comisión dictaminadora del Consejo Técnico, encargada de evaluar los puestos del personal docente y su categoría en la FM. Además, cuenta con la distinción de que un laboratorio del departamento lleve su nombre, lo que se formalizó en noviembre de 1990.
Por otra parte, podemos mencionar que el laboratorio que dirige el doctor Tay ha producido de 60 a 70 mil preparaciones microscópicas, casi todo el material que se utiliza para la enseñanza del laboratorio de parasitología médica en la FM y en otras escuelas y facultades de la República.
Dentro de su trabajo lo que más le gusta es investigar aspectos de parasitología médica y estar en contacto con los alumnos: ``me fascina, porque es muy gratificante poder comunicarme con ellos y trasmitir los conocimientos que uno tiene acerca de algo, tratando de que ellos entiendan y apliquen adecuadamente dichos conocimientos para cuando lleguen a ser médicos'', aseguró.
Respecto a su gusto por la parasitología, comentó que su estudio se divide en varios casilleros, aunque existen personas que se dedican toda su vida, por ejemplo, a estudiar garrapatas y las enfermedades que trasmiten; ``pero hay gente como yo, muy inquieta, que nos gusta estudiar las enfermedades parasitarias desde todos los puntos de vista; es decir, el aspecto etiológico, sus mecanismos de transmisión, lugares donde son endémicas las enfermedades, daños que causan al huésped que recibe el agente infectante o cómo se comporta el parásito; en la actualidad, trabajo en un inmunógeno (vacuna) contra el Trypanosoma cruzi que produce la enfermedad de Chagas, la cual actualmente no tiene vacuna y tampoco cuenta con tratamiento médico; lo que se hace, en los lugares donde es endémica esta enfermedad, es sólo controlar a los trasmisores'.
``Esta enfermedad está reconocida en países como Brasil, Argentina, Chile, Venezuela y Centro América como una enfermedad de primer orden y como causa de muerte en las personas; en Brasil es una de las primeras causas de muerte y un problema de salud pública, hasta el grado de haber realizado más de 60 mil encuestas epidemiológicas; en México, como casi no se conoce, sólo se han realizado entre cinco y diez encuestas, por lo que no se sabe la morbi-mortalidad que produce, lo que sí le puedo decir es que en dos terceras partes del país se han encontrado a los trasmisores infectados por el parásito, principalmente en las chozas, en donde se trasmite a la gente; hemos encontrado varios casos, gente que ha muerto por esta enfermedad y enfermos con este padecimiento. En nuestro país no sabemos si es una enfermedad de alto riesgo todavía, porque no se han hecho estudios a profundidad, pero las condiciones existen y están presentes en muchos lugares'', afirmó.
En el laboratorio del doctor Tay trabajan cuatro profesores de carrera: Raúl Romero Cabello, José Trinidad Sánchez Vega, Dora Ruiz y Cristino Ruiz; dos técnicos: Aurora Rivero y Rufina Alvarez; además de la señora Estela Piña que funge como auxiliar de laboratorio. Tay Zavala manifestó que el ambiente en su laboratorio es cordial, jovial, de compañerismo y productividad, ``porque no podría ser de otra manera. Si se trabaja en un lugar sin armonía, no se trabaja a gusto y no se produce. Si las personas están a gusto y se comportan con disciplina y es buen compañero se logran muchas cosas''.
A nuestro entrevistado le gusta la música, toca el piano, la guitarra; canta y hasta compone boleros románticos como los de la época de Agustín Lara, a parte de seguir estudiando y actualizándose. ``Soy lírico y me he relacionado con músicos, quienes han trasladado algunas de mis canciones a papel pautado''. Dice no tener ninguna pieza famosa porque se dedica a la parasitología y para componer se necesita tiempo, pero como pasatiempo le gusta mucho.
``Mi familia está muy contenta con mi etapa de músico, aunque a veces protesta
mi mujer y me dice: `siempre las mismas canciones'; pero cuando le canto las que
le he compuesto se sorprende; en general, están satisfechos con mi actuación,
tengo dos hijas y seis nietos felices'', finalizó el doctor Jorge Tay Zavala.