Gaceta
Facultad de Medicina UNAM
25 de febrero 2001


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Presentación de la obra literaria del doctor Vicente Guarner:
El Profesor de Anatomía


"Martín Regidor es el joven estudiante de medicina que entra deslumbrado y palpitante en el corazón de la ciudad, Realdo Colombo Quirón es el sabio y riguroso profesor de anatomía, espejo antagónico del joven médico. La lección del maestro consistirá en enfrentar a su alumno con el misterio supremo de la vida que es la muerte, pero también con las herramientas para enfrentarla", con estas palabras el doctor Vicente Quirarte introdujo al público presente en el Paraninfo del Palacio de Medicina, en la reciente obra literaria presentada por el médico cirujano y escritor Vicente Guarner que lleva por título El profesor de Anatomía.

 
De izquierda a derecha, los doctores Octavio Rivero Serrano, Vicente Guarner, Alejandro Cravioto, Enrique Cárdenas y Vicente Quirarte

La presentación, llevada a cabo el pasado 3 de febrero, contó con la asistencia de los doctores Alejandro Cravioto, Enrique Cárdenas de la Peña, Octavio Rivero Serrano, Vicente Quirarte y el autor Vicente Guarner.

Quirarte, actualmente director de la Biblioteca Nacional, destacó que el libro de Guarner, desde la introducción, enfrenta al lector al tema de la muerte. "El estudiante de medicina que traspone el umbral del antiguo edificio de la Santa Inquisición sabe que su aprendizaje lo llevará a enfrentar ese misterio. La circunstancia filosófica de que nacer es empezar a morir, adquiere en Martín Regidor un sentido tangible. El maestro infunde en sus alumnos la inquietud necesaria para que el cuerpo no sea exclusivamente una máquina, sino un complejo organismo que exige del médico una formación humanista".

El doctor Quirarte describe que El profesor de Anatomía, en la figura de Realdo Colombo, se transforma en una especie de capataz exigente, una fría máquina razonadora que obliga a sus alumnos a una memoria topográfica y nominal. "En la prosa modulada, erudita y elegante de Vicente Guarner, la Anatomía deja de ser un mapa frío para convertirse en un viaje apasionante", interpretó Quirarte.

 

Esta novela, sigue señalando el doctor Quirarte, revive aquella urbe de los años cincuentas: un espacio a la medida del hombre donde la caballería andante podía ejercerse real y simbólicamente. Una ciudad entre la bonanza y la degradación, entre el paraíso y el infierno. La metrópoli de la época dorada del cine nacional, el suburbio de Los olvidados y los nuevos héroes forjados por la mitología popular; el autor complementa la historia en la reconstrucción de la ciudad nocturna, de los espacios donde el cuerpo y el alma buscan el olvido y el éxtasis. "Leer El profesor de Anatomía es hacer un viaje en blanco y negro a esa ciudad ya tan remota y, sin embargo, presente en la memoria, y que Vicente Guarner reconstruye con amor y conocimiento".

Al tomar la palabra el doctor Enrique Cárdenas de la Peña se congratuló por la obra de Vicente Guarner al considerar que el autor proyecta un mundo interior de la casona de Santo Domingo, la antigua Inquisición, ocupada desde una fracción del siglo XIX por la Antigua Escuela de Medicina, "…porque como él, allí estudié, y los pasajes que él describe parecen siluetas, retratos, quizá fotografías de muchas de las horas que dejé en el patio central y la escalinata que conserva la estatua del apóstol médico y los salones donde cursé mis primeras asignaturas de la carrera profesional, entre ellos desde luego, el de impartición de esa Anatomía espeluznante, abrumadora para nosotros los iniciados, quienes escuchamos e interpretamos bajo las enseñanzas rígidas y sarcásticas, como bien dice Vicente, de un Realdo Colombo, comentó el doctor De la Peña".

En palabras de Vicente Guarner, "El profesor de Anatomía es producto de mi imaginación y aunque no lo crean mi imaginación da para eso y más. A falta de fantasía también la verdad se inventa", sostuvo. El autor indicó que el objetivo de su obra consiste en señalar en esencia una verdad; de hacer una crónica y crítica en forma severa sobre los estudios de Anatomía de aquella época. Y es que de acuerdo con él constituían un método irracional, memorizado, carente casi de pedagogía, que se usaba como filtro para reducir el paso de alumnos de primero a segundo año en lo que era la Antigua Escuela de Medicina.

El doctor Guarner agradeció los comentarios de los participantes y afirmó que resulta esencial para cualquier rama de la cirugía el completo conocimiento de la estructura corporal.

Finalmente el titular de la FM, Alejandro Cravioto, elogió el trabajo del autor y catalogó además su obra como aquella que forma parte de esa gran tradición cultural que se necesita mantener entre los estudiantes de medicina.