Gaceta
Facultad de Medicina UNAM
25 de enero 2002


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Primera Jornada de Médicos Internos del Hospital General de México

Después de 24 años se retoma la organización de unas jornadas académicas
Con el objetivo de fomentar la clínica, la investigación y la docencia entre los jóvenes

Con el lema de “El camino a la excelencia a través de la clínica” y con la finalidad de fomentar la clínica, la investigación y la docencia en etapas tempranas de la formación de los médicos, así como la fraternidad y el compañerismo entre los internos del Hospital General de México, el pasado 12 de diciembre se inauguró la Primera Jornada de Médicos Internos de Pregrado (MIP).

Durante la ceremonia realizada en el auditorio “Dr. Abraham Ayala” del mismo nosocomio, y narrando entre bromas, situaciones sobre la función de los internos en el hospital, Sergio Gustavo Zúñiga Sánchez, interno y vicepresidente de las Jornadas, comentó que el objetivo de ellas es fomentar la clínica, la investigación y la docencia en etapas tempranas de su formación, y aún más, aumentar la fraternidad y el compañerismo que ya existe entre ellos.

Expresó, a nombre de todos sus compañeros, su agradecimiento al Hospital General de México por su formación en esta parte de su carrera, que sin lugar a dudas deja una huella imborrable; al grupo de médicos, enfermeras y paramédicos del hospital, pero en especial al paciente.
Durante la ceremonia de inauguración, los invitados recibieron reconocimientos por parte de los internos

“Damos gracias a nuestra querida Universidad Nacional Autónoma de México y al Instituto Politécnico Nacional, que sin lugar a dudas siguen manteniendo el compromiso de formar a los mejores médicos del país“.

El doctor Alejandro Cravioto, director de la Facultad de Medicina de la UNAM y presidente honorario de las Jornadas, aclaró que éstas no son la primeras, pues de acuerdo con su recolección de datos su generación organizó las primeras en 1972, donde estuvieron grandes personalidades.

“Lo hicimos como una forma de celebrar el año de esclavitud que terminábamos y de alguna manera agradecer a esta institución lo que habíamos aprendido. El internado es una época de quejumbre, nos sentimos usados, cansados y al mismo tiempo vemos que es una de las épocas de mayor enseñanza, y en este hospital sobre todo de una gran calidad humana, que afortunadamente sigue, de los profesores a los alumnos. El hecho de convivir con ese grupo de académicos en situaciones difíciles y tomando en cuenta la condición socioeconómica de la gran cantidad de enfermos que llega a este hospital, es lo que desarrolla en muchos de nosotros la relación médico-paciente, así como la parte fundamental de nuestra función desde el punto de vista ético. El hecho de que hayan renovado esta tradición, aun aceptando que éstas sean las primeras bis, me da gusto, y sobre todo que lo hagan en forma de homenaje a esta institución, que en algunos años será centenaria y que sigue siendo el hospital universitario más cercano, tanto a la UNAM como a las otras escuelas de medicina públicas y privadas. Por lo tanto, creo que estos tres días serán de celebración y una forma de dar la bienvenida a los nuevos internos este año, que se abre a la incertidumbre con la que todos comenzamos, y afortunadamente con la felicidad que todos terminamos este periodo”.

Por su parte, el doctor Fran-cisco Higuera Ramírez, director general del Hospital General de México, rectificó que éstas son las terceras Jornadas, porque las segundas fueron en 1977, también nombradas primeras porque no hubo continuidad, por lo que hoy son las primeras bis bis.

Aseveró que para él son tres los motivos de agrado por inaugurar estas Jornadas, el primero porque detecta una generación pujante y moderna con gran compromiso, no sólo con el Hospital General de México, sino de los jóvenes con sus escuelas y facultades a las que pertenecen y con el país.

“Creo que con generaciones como las que les van a continuar, México cambiará para mejorar; el segundo motivo es que este hospital contará con jóvenes que vengan a nutrirse con la ética, la filosofía y el espíritu que el país y la institución necesitan. Grandes han sido los maestros que han pasado por esta institución y grandes los que continúan hoy dando sus conocimientos, pero esperamos que ustedes sean los futuros médicos que lleguen a estas plantillas y que generen mayores recursos y logros para la institución, y el tercero porque mi hijo pertenece a esta generación que, después de muchos años, retoma lo que debería haber sido una tradición”.

Durante su participación, el doctor Higuera dijo que las Jornadas son una actividad que para quienes pasan por esta institución se disfruta junto al grupo de médicos y maestros que enseñan a hacer de la medicina no solamente la ciencia que todo el mundo aprecia, y se desea conocer y obtener para mejorar la actividad profesional, sino el humanismo y la ética con que se debe ejercer la profesión, ese sentimiento humano de ver al individuo que sufre y al que hay que servirle para sopesar lo que hoy es el MIP.

Comentó que la experiencia recibida en este periodo otorga la disciplina que hace sentir a un médico, y el aliciente para continuar hasta llegar a ser jefe de servicio. “Ese espíritu de llegar a jefe de servicio en esta institución -creo con mucha soberbia- sólo se da en este hospital; ese anhelo por llegar a ser el más prestigiado, porque ha sido el mejor adiestrado, el que más ha apoyado a la formación de jóvenes y que además tiene la capacidad de lucha, es muy gratificante, y espero que las escuelas de medicina y hoy la Facultad de Medicina, continúen promoviéndolo”.

Agregó que estas Jornadas, donde se ven temas filosóficos y médicos muy formativos, son una alternativa más de enseñanza que debe ser impulsada por las escuelas y facultades, lugares donde se genera esa noble intención de servicio, y auguró que ojalá éstas no sean las únicas para que perduren como una tradición. “Para que no olviden que fueron internos de pregrado de esta institución y que el año entrante, como médicos en servicio social, puedan expresar sus conocimientos y compartir con los internos que hoy entrarán al grupo de los famosos MIP”.

Además de los doctores Higuera y Cravioto y el interno Zúñiga, se encontraron presentes los doctores Rafael Gutiérrez Vega, director médico adjunto; Eduardo de Anda Becerril, director de Enseñanza, y Rubén Burgos Vargas, director de Investigación, todos ellos del Hospital General de México; María Teresa Cortés Gutiérrez, secretaria general, y Sara Morales López, titular de la Secretaría de Enseñanza Clínica, Internado y Servicio Social, ambas de la Facultad de Medicina de la UNAM, y Miguel Zamora Garza, subdirector académico del Instituto Politécnico Nacional. También estuvieron los internos de pregrado Ascari Alcides Velázquez Pacheco, presidente de las Jornadas, y Augusto de Jesús Sánchez Arriola, vicepresidente.

Cabe mencionar que el doctor Alejandro Cravioto abrió la Primeras Jornadas de Médicos Internos de Pregrado del Hospital General de México con una conferencia magistral titulada “La reflexión del futuro de la práctica médica”.

La charla inició comentando que hay cosas fundamentales en la medicina que no pueden cambiar, que lo importante es cómo se incorpora lo nuevo sin perder lo fundamental.

Expresó que los avances científicos y tecnológicos no sólo han modificado la medicina, sino el conocimiento y la enseñanza, donde surgen cada vez más especialidades, así como las mismas relaciones administrativas y hospitalarias que han llevado al médico a que cada vez aumenten sus años de estudio y preparación para poder tener acceso a una plaza.

 

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