La Clínica de Trastornos del Sueño, centro asistencial, académico y de investigación de la FM De acuerdo con datos de la Academia Mexicana de Trastornos del Sueño, en el mundo 30 por ciento de la población padece o padecerá algún trastorno relacionado con el sueño. El organismo señala que en México 40 por ciento de la población sufre de alguna patología de este tipo. Ante la prevalencia de este problema de salud pública, se creó en 1998, por iniciativa del Departamento de Fisiología de la Facultad de Medicina, la Clínica de Trastornos del Sueño en la Unidad de Medicina Experimental (UME) que tiene su sede en el Hospital General de México. “Es la Clínica más grande de toda Latinoamérica y la mejor equipada, cuenta con cuatro habitaciones parecidas a un cuarto de hotel con su propio baño, porque existen otras que sólo tienen una habitación, y se llaman cámaras de registro para hacer estudios; están provistas de una cámara de circuito cerrado con la cual monitoreamos a los pacientes”, explica su actual director, el maestro en ciencias Reyes Haro Valencia, en entrevista con este medio informativo, luego de señalar que las principales funciones de esta unidad son la atención a pacientes con trastornos del dormir, el desarrollo de proyectos de investigación, la capacitación de estudiantes de pregrado y posgrado y la difusión de las actividades realizadas en la Clínica en los medios de comunicación y en foros académicos.
Miembro de la Sociedad Mexicana para la Investigación y Medicina del Sueño, señala que en México una de cada tres personas sufre de algún tipo de trastorno del sueño como insomnio, ronquido, parasomnias, sonambulismo, etcétera, y esto se pueden manifestar desde el recién nacido hasta el adulto mayor. “En la Clínica no sólo atendemos insomnio, ronquido, hipersomnias y narcolepsias, los más frecuentes, sino parasomnias, que afectan a la población infantil, las cuales se manifiestan en sonambulismo, terrores nocturnos, taquicardias, evacuación de orina durante la noche, etcétera; estas perturbaciones tienen solución y pueden atenderse en la Clínica, incluso se reciben recién nacidos con propensión a muerte súbita infantil, es decir, que corren el riesgo de morir mientras duermen. Por medio de estudios de polismografía diurna y nocturna se identifica el trastorno, se diagnostica la severidad del mismo y se proporciona el tratamiento adecuado, logran-do que el niño quede fuera de peligro”, asegura. No al uso de somníferos Con relación al insomnio, el experto destaca que se conocen 20 causas asociadas a este trastorno, este problema no se resuelve en hospitales de atención primaria porque en ellos se tiende a controlarlo sólo con fármacos. “La causa principal del insomnio es el exceso en el consumo de café, refrescos de cola, y cigarrillos. Cuando el paciente es atendido en la Clínica uno de los aspectos que incluye el tratamiento es controlar la dieta y hemos visto que eso ayuda para mejorar la calidad del sueño.” Especialista en neuropsicología, Haro Valencia destaca que tomar medicamentos para dormir ocasiona la pérdida del sueño. Estos fármacos no deben tomarse de manera prolongada, porque la mayoría provoca efectos adversos como tolerancia y dependencia. Tolerancia significa que el paciente requiere de una mayor dosis para sentir los efectos; la persona se vuelve dependiente porque ya no puede dormir sin el uso del medicamento y cuando decide suspenderlo experimenta el síndrome de abstinencia, es decir, que el organismo de-manda el somnífero al que está acostumbrado. “Si tomamos en cuenta que dentro del sector salud existen medicamentos para el control del insomnio, entonces tenemos un serio problema epidemiológico”, afirma. ¿Roncar es realmente dormir bien? Otro trastorno del sueño es el ronquido. El especialista indica que contrario a la idea de que roncar significa dormir profundamente, éste es un síntoma de dejar de respirar y se denomina síndrome de apnea obstructiva del sueño (SAOS). La causa no sólo es el sobrepeso, sino el crecimiento en los tejidos que existen alrededor de la garganta, mismos que al relajarse reducen el espacio donde pasa el aire y ocasiona una fuerte vibración que es el ronquido; cuando se está más relajado se obstruye por completo el paso del aire, y se provocan apneas. “Por reflejo, la persona, al estar dormida, tiende a moverse brusca-mente para volver a respirar y sucede varias veces durante la noche; existen individuos que dejan de exhalar más de 500 veces. “Existe una técnica muy eficaz para tratar el ronquido o SAOS denominada continuous positive airway pressure (CPAP), se emplea una compresora de uso médico que produce aire ambiental, a ésta se conecta una manguera a una mascarilla que se coloca en la nariz del paciente, al momento de hacer el estudio se aumenta las presión del aire hasta que el sujeto respira y deja de roncar”, afirma. Otra alternativa para controlar el SAOS es colocar una prótesis de avance mandibular, que es un dispositivo similar al que utilizan los deportistas y se emplea cuando el problema es leve. Sin embargo, cuando el ronquido es estrepitoso, en algunos casos se realiza una intervención quirúrgica con láser. “El sueño consta de cinco etapas, las intermedias son responsables de nuestro descanso; así, las personas que sufren de apnea no reposan bien, se encuentran cansados a toda hora, se duermen con facilidad durante el día, presentan problemas de falta de atención y de memoria, disminuyen su apetito y capacidad sexual y tienen desinterés para desarrollar cualquier actividad. Este padecimiento es la segunda causa de accidentes automovilísticos, después del alcoholismo. Asimismo, las apneas afectan más a los adultos, pero también a los niños; en el caso de los neonatos existe un trastorno conocido como síndrome de muerte súbita infantil, en este caso los neonatos no roncan, pero dejan de respirar por una falla en su cerebro que no envía el estímulo respiratorio y mueren cuando están dormidos”, indica el especialista. La Clínica: centro formador de especialistas y de investigación Durante los cinco años de existencia, la Clínica no sólo ha sido una unidad de atención y de referencia de patologías relacionadas con el sueño, sino “es —como señala el especialista— un centro de capacitación continua, formador de recursos humanos y de investigación”. En él se desarrollan seis proyectos entre los cuales destacan: eficacia terapéutica de los dispositivos orales en el control del síndrome de apnea obstructiva de sueño; fisiopatología del síndrome de muerte súbita infantil; estudio de la prevalencia de los trastornos del sueño y validez del cuestionario para su medición; efectos de la terapia asistida con delfines sobre la organización del sueño en pacientes con parálisis cerebral infantil; efectos de la administración transdérmica de nicotina sobre el sueño de pacientes deprimidos, y efectos de la abstinencia a la nicotina sobre el sueño en fumadores crónicos. Respecto a la delfinoterapia el investigador explica que es un proyecto en colaboración con los acuarios de Aragón y de Chapultepec. Consiste en meter a niños con discapacidad o problemas neuropsicológicos a una alberca para que interactúen con delfines y se realicen estudios exploratorios. Esto ha permitido que mejore su capacidad de aprendizaje, de atención y de conducta. “Además, desarrollamos un estudio donde de-mostramos que fumar afecta la continuidad y la calidad del sueño; en otro descubrimos que la aplicación de la nicotina (no fumada) aplicada en parches tiene efectos terapéuticos para mejorar el descanso y estado de ánimo en pacientes deprimidos. Asimismo, estamos estudiando la eficacia terapéutica de los dispositivos orales para el control del ronquido.” La Clínica y la vinculación académica En el aspecto académico la Clínica ofrece la posibilidad de que estudiantes de las ciencias de la salud y de áreas afines realicen el servicio social porque es un centro formador de recursos humanos; al respecto el director de esta Clínica señala: “Tenemos pasantes de las carreras de medicina, biología, psicología y odontología, así como estudiantes de pos-grado, estos últimos desarrollan proyectos a fin de obtener ya sea el grado de maestría o de doctorado. “Una de las funciones principales de la Clínica es brindar capacitación y adiestramiento a estudiantes en la técnica de resgistro polismográfico, que consiste en la habilidad para colocar electrodos, usar el equipo de adquisición de señales y realizar la captura de datos, así como la interpretación y elaboración de un reporte de éstos. En el actual plan de estudios de la FM existe sólo una materia (fisiología del sistema nervioso) donde se abordan estos temas; por esta razón nosotros organizamos en forma constante cursos y conferencias, y participamos en congresos, que son actividades que llevamos de manera continua todo el año con la colaboración de miembros de la Sociedad Mexicana para la Investigación en Medicina del Sueño, entre ellos el doctor Óscar Costero, quien es también profesor de esta Facultad.” Finalmente el responsable de la Clínica destaca que en los cursos que organiza la unidad se cuenta con la colaboración de psiquiatras, neurólogos, neuropediatras, neurofisiólogos, otorrinolaringólogos y nutriólogos. Cabe destacar que durante el año 2002 el personal de la Clínica realizó 989 consultas y 878 polismografías diurnas y nocturnas tanto con fines diagnósticos como de investigación, por lo que 80 por ciento de los pacientes acudió a la unidad por iniciativa propia, mientras que el restante 20 por ciento asistió proveniente de otros centros hospitalarios. Si usted padece algún problema al dormir, recuerde que la Clínica de Trastornos del Sueño es una alternativa para el tratamiento de su padecimiento. Esta unidad de atención se encuentra en la Unidad de Medicina Experimental del Hospital General de México, la dirección es calle Dr. Balmis No. 148, en la colonia Doctores, Delegación Cuauhtémoc, saliendo de la estación del metro Hospital General. Para mayores informes llamar al teléfono: 5623-2685. |
